Estuve yendo a la escuela normalmente los últimos días.
Paso una semana sin saber nada de el, y mi periodo se retraso, y eso me tenía de nervios y mi última opción sería hablar de el.
Empecé a hacerlo, pero ¿que podía decir? No le e visto la cara no tengo un sólo rasgo que lo identifique.
Aún haci continúe mi búsqueda.
-?conoces a un tipo con una chamarra azul, generalmente el pelo largo?-
-¿crees que alguien se puede vestir haci todos los días? Nadie tenía respuestas, hay muchas personas en el mundo con esa vestimenta pero ninguno es el.
***
2 semanas y varios días y mi periodo sigue ausente.
Un día común como los demás salí de la escuela y de regreso a casa sentí una mirada fría en mi hombro, se escuchaban pisadas detrás de mí, cada paso que yo daba había un eco.
Me voltee en sí, vi aún tipo con unos shorts y una camisa holgada color verde los ojos le resaltaban y el cabello negro.
-necesitó hablar contigo- toma mis manos con fuerza evitando que escape
-¿quién eres?- alejó bruscamente mi mano de la de él.
-me llamó franck, yo-
Hace una pausa.
-¿tú que?- le digo casi gritando.
-soy el que se ha estado metiendo a tu casa- dice casi en susurro.
Mi corazón empieza a latir a mil por hora, mis ojos empiezan a llorar no entiendo por qué.
En ese momento mi cuerpo se movió solo y me pegue a su pecho y comienzo a golpearlo con mis puños una y otra vez.
-¡te estado buscando!- le digo con lágrimas en los ojos y la voz solloza -¿dónde estabas? ¿Por qué no me buscaste? -
Toma con sus manos de espalda de modo que quede abrazada de el
-pensé que no querías que te buscara- su voz se corta.
-yo lo que más quería era volver a verte- no sé por qué mi corazón no se tranquiliza sigue latiendo igual de fuerte, me siento tan bien tenerlo abrazado.
-yo ya no pude más por eso te busque, a pesar de que no sabía tu reacción-
Sentí como mis mejillas se ponían tibias eso significaba que estaba roja.
Mi celular empieza a sonar, apenas percibí la manera que se rompió la escena.
Saco del bolsillo de mi chamarra el celular y veo el número de la casa de mis padres.
De seguro me buscan ya es tarde.
-tengo que irme- le digo pero realmente no quiero irme.
-está bien-
Me volteo y camino unos pasos cuando siento un jaloneo en mis brazos.
-¿te puedo a volver a ver?- me dice apurado y con la respiración acelerada mientras su lengua moja sus labios.
-claro que si.- le sonrió
-ok, yo te busco- también sonrió
Ambos tomamos caminos distintos a nuestros hogares
