Capítulo 1

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Otro día de escuela, ya no me agrada venir a la escuela, siempre es lo mismo: maestros insoportables, niñas fresa, los típicos populares...


Pasaron las dos primeras clases antes del primer receso; ya se mi rutina, da el toque, guardo mis cosas, voy al salón de junto para platicar con mi mejor amiga llamada Atenas Domínguez, nos quedamos en su salón, charlamos 15 minutos (lo que dura el receso), en fin... Siempre es lo mismo.


-¿Qué clase te toca, ______?-Dice Atenas, también es algo rutinario.-


-Matemáticas -hago una mueca con la boca.-


-Mmm, está bien, nos vemos en el siguiente receso -sonríe.-


Le sonrío y muevo la cabeza en forma de "sí".


Me dirijo a los casilleros para sacar el libro y libreta de matemáticas pero hay mucha gente en esa zona debido a que terminó el receso. Me apresuro ya que a lo lejos veo al maestro en dirección a mi salón; saco mi libro y libreta y me dirijo corriendo a mi salón.


-Maestro -toco la puerta- puedo pasar?


-Pasa,______.

Entro, cierro la puerta y me siento en mi lugar. Acomodo mis libros en mi mochila y mi lapicera se cae y se le salen todos mis útiles.



-Maldición. -susurro a mi misma en lo que recojo todo para ponerlo en mi lapocera de nuevo.-



La prefecta toca la puerta y nos saluda


-Maestro, buenos días, ¿me permite un momento porfavor?


Me incorporo luego de guardar mi lapicera y presto atención a Flor.



-Hola chicos, buenos días -le hace una seña a alguien para que entre al salón- tienen un nuevo compañero, trátenlo bien y no le sean mala influencia eh. Diles tu nombre, corazón.



Entró un chico castaño, ojos café claro, alto, unos labios bien torneados y una espalda ancha... Oh Dios... Es muy guapo.



Me quedo observándolo cuando entró al salón y el dirigió su mirada hacia mí. Me dedicó una sonrisa y yo le respondí de igual forma.



-Hola, mi nombre es Cameron Dallas y vengo de Texas -dijo a todo el salón.-


-Hola Cameron -Dijimos todos a la par.-


Enfrente de mi, hay una silla vacía


Que se siente aquí, que se siente aquí


Y como fué, se sentó delante de mi.


Al parecer todas las niñas lucen fascinadas ante la presencia de Cameron, al igual que yo... Pero sólo espero no lucir tan obvia.



El chico nuevo se acomoda en su silla mientras que el profe le da la bienvenida y explica el siguiente tema, al cuál no le entendí nada. El maestro nos dijo que hicieramos una página del libro con base a lo que nos explicó.



Abro mi libro en esa página e intento resolver mínimo un problema.
Cameron se voltea para verme y dice



-¿Acaso le entendiste a esto? -Me pregunta sonriendo y haciendo un gesto de sufrimiento con las cejas.-



-La verdad no -sonrío- soy pésima en matemáticas, lo siento.



-No te preocupes, yo igual, creo que por eso estoy aquí -suelta una risita- y ¿cómo te llamas nena?


-Soy ______ Sparks -Oh no, creo que me sonrojé.



-Mucho gusto ______, lindo nombre.



-Gracias, igual el tuyo, es original.


-Muchas gracias linda, ¿te puedo pedir un favor?


-Claro, dime.


-Hasta ahora, eres la única persona que conozco, así que... ¿Me podrías mostrar la escuela? ¿O aconsejarme de los maestros, etc? Claro, si no te molesta.



_______ dile que si! No seas tímida


-Por supuesto Cameron -le dedico una sonrisa.



-Gracias, creo que nos llevaremos bien señorita Sparks.

Hermoso Error.  «Cameron Dallas y Tú»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora