Besos de Cristal [#BuscandoTesoros]

PRÓLOGO

-Deja en paz el celular Cristall-me dice en voz baja mi padre. Lo que me hace rodar los ojos y soltar un sonoro suspiro como muestra de mi inconformidad.
Vengo a la iglesia con el único fin de honrar la memoria de mi mamá, y mi padre cree que por el hecho de engañar a todos los presentes, y hacerlos creer que de verdad le sigue doliendo e importando su ausencia, también me convence a mi. Pero no lo hace. Una vida a su lado me ha enseñado que el gran Landon Wyatt no tiene corazón, lo que significa que no tiene sentimientos, en su lugar hay un inmenso hueco rebosando de egocentrismo.
-Vamos Criss- me dice Christopher, y odio que me diga el nombre en diminutivo- Deberías complacer a tu padre, tan solo por tratarse de este momento- levanta su perfecta ceja perfilada, lo que me hace querer arrancarle la cabeza.
Christopher Lemark, el francesito hijo de puta, con el que mi papá me quiere congraciar. Sinceramente, no entiendo porque insiste en que formalice mi relación con él. Hemos salido un par de veces, y no voy a negar que la he pasado bien, bueno, muy bien cuando estamos a solas. El chico definitivamente sabe que hacer con la boca y con las manos. Pero toda esa experiencia, se debe a su muy merecida reputación. El tipo es un Don Juan. Christopher simplemente se dedica a sacar el mayor provecho de todas sus conquistas. Su táctica infalible, es enamorar hasta las manitas a las pobres incautas que sucumben a sus encantos, que por cierto posee bastantes, y después simplemente exprimirles los bolsillos, haciéndolas creer, que son ellas quienes le "obsequian" todos los regalos caros que el príncipe desea tener. Es un verdadero lava-cerebros. Aunque conmigo su táctica no le ha funcionado en lo absoluto, sabe que mi nombre es sinónimo de una fortuna de varios millones, por eso conmigo no ha tirado la toalla, sigue persistiendo al pie del cañón. Tanto así, que si no lo conociera, creería, como todos los demás que de verdad le importo. Así, que aunque el tiempo juntos siempre este muy bien invertido, sea guapo y me agrade su compañía, Christopher es mas falso que un billete de tres pesos, y no me puedo fiar de él.
Volteo a mirarlo, y le regalo una perfecta y falsa sonrisa prefabricada, mientras levanto mi dedo medio sin ninguna sutileza en ello, lo que me hace acreedora del mas exagerado grito ahogado de la mujer que está a nuestras espaldas, que al parecer no puede meterse en sus asuntos y h sido testigo de mi falta de tacto hacia con el pobre Christopher.
Mi padre voltea al escuchar el sonido de la entrometida de atrás, y ahora me mira con el ceño tan fruncido, que podría tocar la punta de su nariz con las cejas. Y yo me limito a mirar al frente, fingiendo como él, que me importa una mierda que lo que los presentes piensen.
Comienzo a escuchar al sacerdote, el Padre Roberts, quien oficio tanto la boda de mis padres, como mi bautizo y primera comunión. Realmente comienzo a poner atención a lo que está diciendo. Está hablando acerca de como es posible que las personas que se nos adelantaron en el camino, son capaces de permanecer con nosotros por medio de nuestros recuerdos. Y me resultan tan acertadas sus palabras, ya que a pesar de haber sido demasiado joven cuando perdí a mi madre, al día de hoy, la recuerdo tan alegre y cariñosa, como si apenas hubiera sido ayer la última vez que que estuve con ella.
De verdad que me propongo comportarme durante lo que resta de la ceremonia. Eso hasta que me vibra el celular en las manos. Entonces me apresuro a abrir el menú, antes de que salte el peculiar tono que le he asignado al numero de mi mejor amiga Lara, que se trata de un sonoro y extravagante eructo.
"Perraaaaa. Por qué demonios me dejas colgada?! ¶ut@"
Me da por reír por la manera en que me escribe y contesto de inmediato.
"Estoy en misa. De mi madre muerta, recuerdas???"
Doy enviar y sólo un par de segundos despues recibo su respuesta.
"Por supuesto que lo sé!! Pero quiero saber si esta noche iremos a la fiesta de la que te hable ¿?"
Lo pienso durante un segundo, esa fiesta es en un lugar al que mi padre jamás aprobaría que fuera, con personas con las que no tiene deseos que me mezcle en absoluto. Así que comienzo a teclear una rápida, pero concisa respuesta.
"A que hora pasas por mi? ;P"