El chico deseaba tener una enamorada que lo ame con todo su fuerza y que dure mucho tiempo; pero el destino le negó esa dicha, dado que jamás logró una relación estable, terminaba solo y desamparado. Y no era su culpa, si no que cupido no estaba de su parte y todas sus enamoradas tenían que cambiarse de ciudad o irse lejos por cualquier motivo. La computadora terminaba siendo su mejor compañía. Mario terminaba el colegio, solo y demasiado triste. -El amor no es para mí- decía en solitario.Sin embargo sus esperanzas se centraban en la Universidad, donde tendría más oportunidades.
Ya en la Universidad, lastimosamente todas las posibles candidatas tenían pareja, cosa que le deprimió mucho. Un buen día, cansado de todo aquello y sin más opción, decidió entrar a lo que nunca le había gustado ni llamado la atención, una sala de chat.
Conoció mucha gente de muchos lugares y países diferentes, compartía ideas y comentarios pero no era lo que buscaba. Amigas iban y venían. Sus padres se preocupaban porque Mario ya no salía de su cuarto muy a menudo como antes y sus habituales horarios habían desaparecido. Rápidamente se convirtió en un ser noctámbulo. Se mantenía chateando por largas horas y era esa búsqueda obsesionada de encontrar el amor, lo que lo mantenía preso. Finalmente cuando ya estaba a punto de rendirse y resignarse a su irremediable destino en aquella larga noche oscura y fría, era muy raro que una chica se conectara a esas horas de la noche, era una chica muy bonita (al menos eso decía la imagen en la pantalla). leyó en la pantalla un -Hola, como estás. ¿Podemos ser amigos?-
Los ojos del joven que empezaba a ilusionarse brincaron de emoción, jamás le había pasado eso. empezó el intercambio de palabras y resultaron ser muy buenos amigos. Por suerte, era de la misma ciudad, aunque de otra Universidad. En las redes sociales tenía fotos hermosas que cautivaron aún más al chico y un buen círculo de amigos a su alrededor. Después de una semana de intensas conversaciones con esta hermosa chica. Mario consiguió el número telefónico. ¡La cita estaba próxima!.
Todo resultó ser genial, ¡la verdad es que nunca había sido mejor que ahora!. -En el Internet encontré la mujer de mi vida, pensaba mientras caminaba de la Universidad a su casa. Ni bien terminaba de cenar apresurado (cosa que sus padres no terminaban de entender), encendía el su pc y se conectaba con esta interesante chica que misteriosamente siempre estaba disponible a media noche. Seguían alimentando esa relación hasta que decidió marcar el numero de la chica
-¡Oh que voz tan hermosa!- pensaba el joven, mientras la escuchaba.
Y claro era una chica muy encantadora, de las que te roban los pensamientos. Luego de tres días de conversación telefónica y tres semanas de intensa palabrería, planearon el encuentro para el fin de semana próximo en la noche. Ella decía que en el día, estaba muy ocupada. El lugar ideal para verse sería el parque central.
El momento llegó y el joven tenía puesto su mejor ropa, una casaca de cuero elegante, un jean a la moda. Esperaba a su princesa que tanto le había hecho soñar. A veces la intriga entraba en su mente y pensaba: -¿ porqué siempre se conecta a media noche?- Pero evadía tales consideraciones, la felicidad era más grande.
La vio venir, de lejos, hermosa, alta y radiante. El corazón latía más y más fuerte. La mirada penetrante de aquellos ojos color miel lo hipnotizo. El viento frío de la noche hacían que el cabello oscuro y lacio de su princesa, se mueva en un va y ven de elegancia. Vestía toda de negro y cuando el chico despertó de su sueño, ella ya estaba junto a él, con sus labios carmesí que invitaban al beso y así sucedió. Fue la noche más maravillosa e increíble del joven enamorado, en mucho tiempo.
Tomados de la mano caminaron fuera del parque, él no podía creer que tanto amor le alcanzaría de un momento a otro. Llegaron hasta un callejón abandonado y allí ella exclamó: -amor, déjame contarte una historia. Ella lo miró fijamente y dijo: -Hace tres años, me enamoré de un chico que conocí por el chat. Todo empezó a ser perfecto como lo nuestro, y una noche me trajo hasta este sitio.-
-No entiendo princesa, ¿porqué me cuentas todo esto?- preguntó el chico. Ella prosiguió: -Cuando aquella persona a quien entregué todo mi amor y mi corazón, me trajo hasta este lugar nunca imaginé lo que sucedería...-. Mario sentía su corazón latir más de lo normal y empezó a asustarse seriamente. preguntó nuevamente... -pero ¿qué sucedió? Yessenia, asi se llamaba su princesa, expresó: -En este lugar, justo donde estoy parada ahora. quél amor que pensaba era verdadero, me asesinó cruelmente. Por eso te he traído hasta aquí. Necesitaba desahogarme.-
El galán no podía creer lo que escuchaba y se lanzó a reír a carcajadas producto del shock que sufrió con tal afirmación. Y mientras estaba en ese estado, la mano de su novia empezó a helarse e inmediatamente se convertía en un esqueleto revestido de una capa putrefacta de piel, en el estado mas terrible de descomposición. Su cara se derretía en los huesos y los ojos salían de sus agujeros. Los labios que se sumían hacia dentro, dejaban ver una hilera de dientes en medio de la calavera maldita.
El chico se horrorizó, se arrojó al piso y perdió el habla al instante. Eran las 2:00 a.m, la profundidad de la noche había llegado.
Al día siguiente, las personas lo encontraron abrazando un cadáver, llamaron a la policía de inmediato. El muchacho se encontraba en estado de histeria y no podía pronunciar palabra alguna, gemía como un animal y nunca más se recuperó. Las investigaciones concluyeron que el chico desenterró el cadáver de la señorita que había muerto hace un par de años, efectivamente asesinada.
El muchacho fue internado en un manicomio con el diagnóstico de "Demencia avanzada" y sus padres se afligieron profundamente sin poder hacer. -Era un buen hijo- dijeron entre lágrimas y grandes lamentos.
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Lugares y Leyendas Tenebrosas
Paranormalecomo el nombre mismo dice lugares y leyendas historias talves reales, disfrutenlo