Capitulo diez.

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Encontrarse en el aeropuerto con un método de nerviosismo ya era normal en Camila, extrañaba a Lauren y sus ansias no cambiaban, necesitaba verla ahora o nunca. Faltaban solo unos minutos para que el avión pueda aterrizar y de esta manera Camila pueda reencontrarse con Lauren luego de unos meses atras, desde que se fue a la universidad a terminar su carrera de comercio.

El avión ya había aterrizado y el corazón de la castaña latió mas fuerte de lo anormal. La extrañaba tanto, mordía sus uñas en busca de calmar su ansiedad.

-Bu!-La intención era lo que contaba, Camila volteo lo mas rápido posible para que un abrazo inesperado y unas cuantas risas permanecieran unidas.

-Dios, eres tu- Posando su ojo por cada parte del cuerpo de la ojiverde.- Estas tan cambiada, te he extrañado demasiado.- Lauren río por la expresión de la castaña.

-Tu igual, mirate, hermosa como siempre.- Un fuerte cosquilleo se adentro en su estomago al escuchar tales palabras a pasado tiempo, ya no eran mas que unas niñas.

Se encontraban en la casa de la mama de Lauren, todos muy bien vestidos para el evento familiar, una noche con los Jaureguis, Camila se quedaría a cenar y a dormir, no quería separarse ni un segundo de Lauren hasta que partiera el día de mañana.

La cena consistia en escuchar los malos chistes de Camila, en Lauren mirando a Camila como si fuera la primera vez y toda la familia comentando cada cosa que se les ocurria. Lauren, ya hacia sentada al lado de Camila dando resultado que su mano tomara rumbo a su pierna para asi poder deslizarla con suavidad, Camila rio por el cosquilleo aun asi dejo a Lauren en lo suyo.

Terminando su bonita y honesta charla, Camila ayudo a recoger mientras Lauren fregaba dejando a su madre y padre descansar.

-Desearia que asi fuera en casa.- Lauren sonrió

-Al menos no tienes que escuchar incoherencias departe de todos.- La castaña fruncio el ceño- Era una broma.

Ver a Lauren como fregaba riendo por cualquier comentario, o broma, era la vida para Camila sabiendo bien que para la chica estar enamorada de esta desde hace años ya, no era algo de broma, las dos familias lo sabian, todos menos Lauren.
Este se acerco un poco para dejar un dulce beso en la mejilla y correr por toda la habitación hasta llegar al segundo piso, habitación de Lauren.

-Ya basta, esto cansa Cabello.- Lauren moria del cansancio para que Camila siguiera riendo, música para sus oidos.

Entraron a la habitacion cuando Lauren se encontraba ya tirada en la cama. Camila tomo sus cosas, entro al baño y se cambio, era el turno de Lauren. Ya con todo apagado rieron.

-Bien deberiamos descansar, mañana tu vuelo sale temprano.-Lauren volteo la cara, la miro fijamente posando sus manos en las mejillas de Camila contra la oscuridad. Nerviosismo, eso era ahora.

-Deberiamos...-Se acerco y ataco sus labios dejando mil y un emociones, un beso dulce y corto con desilusión.
-No puedo Lauren.- Camila volteo para así cerrar sus ojos.
Lauren suspiró, ¿Que había sucedido? Si el sentimiento de Lauren a Camila era mutuo porque no acepto el beso que llevaba esperando ya hace meses. Muchas preguntas en un solo dia. Lauren finalmente logro descansar para asi agarrar fuerzas del otro dia.
La tensión era rara, ya se hacia en el aeropuerto, despidiendo a Lauren, de nuevo, el parlante sonó llamando a los pasajeros de su vuelo, se alarmaron y todos se despedían facilmente, mientras tanto la ultima fue Camila la abrazo como nunca mientras una lágrima caía.

-No llores, escribiré, lo prometo.- Camila asintió y el parlante volvió a llamar.
Vacío, un gran vacío ¿Ella escribirá?.

Las cartas de Lauren. /CS/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora