Empieza con F y termina con O

NO TE SOPORTO

No quiero ni siquiera entrar. Tengo muchos nervios y siento que me desmayare en cualquier momento.
Toco la puerta blanca y espero a que el profesor me de la autorización de pasar.
-¿Me permite pasar?-mi voz es temblorosa.
-Adelate- me contesta y se vuelve al pizarrón para seguir escribiendo.
Tomo la banca mas cercana de mi. Pero que mala idea he tenido, no veo ni una sola palabra que esta plasmada en el pizarrón. Hay una chica sentada cerca de mi, tiene cabello largo oscuro y facha de que no se baña muy seguido pero no puedo decirle eso.
-Muy bien como todos ya sabrán empezamos este curso de una semana antes de que comiencen sus clases con sus grupos correspondientes- el profesor empieza su explicación y su presentación.
Me sudan las manos, eso es asqueroso. Vuelven a llamar a la puerta y aparece un grupo de tres niñas, todas pidiendo permiso para pasar al salón.
-Mañana espero que todos lleguen mas temprano. Jóvenes aun que no lo crean la puntualidad es lo más importante en un empleo.
Su clase es aburrida pero eso me facilita entenderla rápido. Es como una clase de español.
-Oye- alguien me llama pero decido ignorar el llamado. Tengo mis audífonos puestos es fácil simular que no la escucho.
-Oye- vuelve hablarme pero esta vez toca mi hombro. La tensión empieza.
-¿Que?- me alejo de su toque y me quito los audífonos.
-No tengo a un el libro del curso. ¿Puedo acercarme contigo para trabajar?
¡No! Solo debo decirlo.
-Si, ya que.
-Gracias. Me llamo Yanira, ¿y tu?.
-¿Yo qué?- contesto con algo de brusquedad.
-¿Como te llamas?
-Cintia.
Odio tener que trabajar con alguien. Siempre trabajo sola en la escuela. Solo tenía que decirle que no.
La clase de español se termino, gracias a dios no creo seguir soportando a esta tipa hablando de regueton y banda. Esa música y yo no congeniamos. Me levanto para estirar las piernas un poco.
-Hola, ¿Cintia?- dice una chava de cabello largo y ojos cafés. Creo que cuando se presentó dijo llamarse Janet.
-Si, tu eres Janet ¿verdad?
-Claro, ya viste de mi nombre si se acuerda- le dice a la otra chava que esta junto a ella, es re llenita y también es de pelo largo.
-Del nombre que no recuerdo es el tuyo, era algo con E.
-Elisa.
-De tu nombre nunca se acuerdan por que seguro que eres muy coda-dice Janet soltando una gran risa, que es muy contagiosa. Se acerca atrás de ellas un chavo que si mal no recuerdo su nombre era Emanuel.
Llega el profesor de matemáticas y las últimas cuatro horas de curso me la paso pensando como resolver eso jeroglíficos . Nunca he sido buena en mate.
Al llegar a mi casa llego directo a saludar a mi papá, mi mamá me sigue hasta mi cuarto para que le siga contando que tal me fue. Cuando se va a preparar la cena y me deja sola reviso mi iPad para darme cuenta que ya tengo varias invitaciones de mis nuevos compañeros, no mas bien mis nuevos amigos del curso. Este día fue mejor de lo que me lo imaginaba.
➰➰➰➰
Hoy es el tercer día en el curso y para ser sincera me ha ido bastante bien. Ayer conocí algunos de mis compañeros que irán conmigo en mi salón. Habigail y Noelia son muy simpáticas pero Mario no se por que pero no me simpatiza mucho hasta puedo decir que me cae gordo. Llegó junto a Yanira, como vivimos en la misma estación del metro viajamos juntas de ida y regreso. Cuando saludo a todas mis amigas nos sentamos juntas hasta la parte de atrás.
El profesor llega y empieza su clase. No veo nada desde el lugar donde estoy, necesito más aumento en mis lentes pero bueno no hay nada que hacer por ahora, al menos Yanira me deja tomar los apuntes de su cuaderno. Un fuerte toquido en la puerta me saca de mis pensamientos.
-¿Puedo pasar?- dice un chavo alto y pelo oscuro. Parece que esta enojado.
-¿Y tu por que llegaste tan tarde?- le contesta el Profe.
-Maestro es mas que obvio que acabo de llegar- lo dice fuerte y claro.
-Ya me di cuenta. Pasa.
Él pasa y empieza a mirarnos a todos. Y se gira al profesor que esta pasando lista.
-¿Y donde me siento?- le dice al profesor.
-Hay muchas bancas hijo, toma una y siéntate. Deja de ser tan ruidoso.
Tengo que taparme la boca para no dejar salir una gran carcajada.
Parece que el niño nuevo se enojo. Camina hasta la parte de atrás y de mala gana jala una banca y se sienta. El profesor deja pendiente pasar su lista de asistencia , así que empieza con sus malditas actividades en equipo.
Janet empieza a formar nuestro equipo: Yanira, Elisa, Emanuel y yo. Empezamos a juntar nuestras bancas pero Emanuel tarda en integrarse.
-Esta guapo. ¿Verdad?- menciona Yanira.
-¿Quién?- pregunto. Aquí en este salón no hay muchos guapos.
-El recién llegado-Yanira me dice poniendo los ojos en blanco.
Emanuel junta su banca con las de nosotras pero no es solo su banca de él, también está la banca del niño nuevo. No le tomo importancia vuelvo mi atención al profesor. Empieza a dar las instrucciones de como debemos elaborar el trabajo.
-Amigo ¿por qué llegaste tan molesto? - pregunta Janet.
-No llegue molesto- se defiende con cierto tono que no me gusta mucho.
El profesor retoma su lista de asistencia.
-Valencia Jassiel- menciona el profesor mi apellido y mi segundo nombre.
-¿Quien carajos se puede llamar así? Jassiel- dice en voz baja pero burlona el niño nuevo. Todos lo miran y yo respiro para conservar la calma y no estrangularlo.
-Yo me llamo así imbecil. ¡Presente!
Solo me mira. Parece que no encuentra las palabras para componer la estupidez que acaba de hacer. Los siguientes minutos son incomodos, cuando terminamos el trabajo todos pasan a exponerlo excepto El Niño nuevo y yo.
-Fernando.
-¿Que?- le contesto de mala gana.
-Así me llamo Jassiel.
-Y eso a mi ¿que?.
-Solo quería que lo supieras.
-Yo ni quería saberlo- me cambio de lugar para poder darle la espalda y mirar la exposición de nuestro trabajo.
La exposición salió perfecta. Al terminar la clase, todo el mundo sale a la cafetería y yo salgo con Janet, Yanira y Elsa. Afuera esta lloviendo así que damos toda una vuelta con tal de no mojarnos. Al llegar a la cafetería prefiero esperarlas en la puerta ya que hay muchas gente.
-Quítate- me ordena alguien a detrás de mi. Doy media vuelta y es Fernando.
-No- me paro mas derecha y cruzo mis brazos.
-¿Que?- parece sorprendido.
-Que no idiota.
Alza una ceja y se acerca más a mi. En ese momento oigo a Janet que pelea con Emanuel.
-Ya te dije que no- Janet empuja a Emanuel y se vuelve a meter dentro de la cafetería.
-¿Que le hiciste?- le pregunto. Emanuel le ha insistido a Janet que anden desde el primer día. Ella siempre lo manda a la mierda diciéndole que no le interesa.
-Nada. Solo que me comprara un jugo pero no quizo.
-Mejor tu invítale algo.
-No traigo feria- sacude sus manos en sus bolsillos.
-¿Feria?- ¿que es eso?.
-Dinero- me aclara Yanira saliendo de la cafetería.
-Ah.
-Niña fresa- Emanuel me dice.
-Solo un poco.
Regresamos al salón y el profesor de matemáticas no ha llegado. Así que nos sentamos juntos mientras comemos. Fernando se sienta junto de mi y del otro lado Yanira, Emanuel se coloca junto a Janet, y Elisa esta junto a Janet y Yanira.
-¿De qué quieren hablar chavos?- pregunta Janet.
-Hagamos preguntas de cualquier tema- sugiere Emanuel.
-¿Quién sigue siendo virgen?- pregunta Elisa.
Miro a tos los de mi alrededor y alzo mi mano un poco.
-Cintia, Yanira y Fernando- Janet come un poco mas de su hamburguesa y hace señas para que hagamos otra pregunta.
-¿A qué edad fue su primer beso?- Emanuel hace la pregunta.
Todos mencionan que fue en secundaria y cuando tengo todas las miradas en mi esperando mi respuesta, siento que mi cara empieza a calentarse.
-Bueno... Yo... No fue en la secundaria- me las arreglo para que mis palabras se oigan lo mas claras posibles.
-¿Fue en la primaria?- pregunta Janet.
-No.... Nunca he besado a nadie.
Hubo un minuto de silencio y de repente empezaron las preguntas incomodas.
-Cintia ¿nunca has tenido novio?- primera pregunta incomoda y la hizo Elisa.
-No.
-Yo no te creo- dice Yanira.
-Yo no necesito que me creas, con que yo lo sepa es mas que suficiente.
-Yanira no la hagas enojar- la regaña Elisa.
Llega el profesor y todos empezamos a tomar nuestros lugares. En la clase de matemáticas siempre tomo asiento en la parte de enfrente para no perderme nada y entender un poco mas la clase.
-Hola compañera- me saluda habigail.
-Hola.
-¿Y quien es el compañero?- me pregunta riendo.
¿Compañero?, volteo a ver quien esta detrás de mi y ahí está el niño enojon. ¿Que hace aquí? Si hace cinco minutos estaba sentado atrás con todas las demás y con Emanuel.
-¿Que haces aquí?- me ignora esta hablando con mi compañero ojitos azules.
Le toco el brazo para llamar su atención me sigue ignorando. Tomo mi cuaderno y lo golpeo en la cabeza.
-¡¿Por qué me pegas?!- dieces enojado mientras se frota con la mano la cebeza.
-¡Oye pedazo de animal a mi no me grites!- no se donde agarre el coraje para gritarle así.
Punto para mi. El niñito enojón parece que se ha quedado mudo.
-Compañera no golpe al compañero que tal si mata sus pocas neuronas- no aguanto la risa y empiezo a reír.
-¿Y tu quien eres?- pregunta Fernando con un tono muy sarcástico.
-Hola compañero mucho gusto. Me llamo Habigail, este que tiene cara de payaso es mi amigo Mario, aquí mi amiga Noelia y mi compañero George. Y tu nombre compañero ¿cual es?
-Fernando compañera.
Tomo mi cuaderno y mi mochila para cambiarme de lugar junto a mi compañero ojitos azules.
-¿Por qué te cambias de lugar compañera?- pregunta Habigail.
-Por que esta ahí Fernando compañera- le contesto.
-¿Apoco muerde compañera?- me río un poco entre dientes.
-No lo se. Y no quiero averiguarlo.
-Ustedes ya cállense- el profesor nos llama la antención.
Empieza el Profe hacer las maldita ecuaciones que no se de que carajos tratan pero bueno trato de descifrarlas. Siento que cada vez me voy haciendo para atrás y de repente caigo para enfrente.
-Habigail ¿Que haces?- volteo y ya no esta Habigail ya esta en su lugar el niño enojon.
-Compañera se confundió de persona- dice Fernando con una maldita sonrisa arrogante.
-¿Que carajo haces aquí?
-Cintia pon atención por que luego por eso no entiendes nada.
-A ti que te importa- me vuelvo a voltear hacia el pizarrón.
Durante el resto de la clase me la pase peleando con el. Habigail no paraba de reír junto con George y Noelia. Cuando oí la campana que anunciaba la salida tome lo más rápido que pude mis cosas y salí del salón.
-¿Por que caminamos tan rápido?- Fernando pregunta mientras camina a mi paso.
-Mas bien ¿por qué me sigues?- le digo molesta.
-No te estoy siguiendo, yo estoy camino a la salida.
Bajo la velocidad de mi caminata. El también lo hace.
-¿No crees que soy bonito?- dice él de repente.
-No, solo eres un niño desesperante.
-Lo que digas Jassiel.
-¡Cintia!- gritan todas desde atrás.
-Parece que te llaman tus amigas.
-Sigues aquí, pensé que ya te ibas a largar.
-Estoy esperando a Emanuel.
-Que bueno. Me largo de aquí por que en serio eres desesperante.
-Nos vemos mañana.
-Lo dudo- camino a la salida y esta vez Fernando no viene para molestarme.
No le cuento nada a mi mamá sobre Fernando, seguro que también creería que es un fastidio pero por suerte no estará en mi salón.
➰➰➰➰
Llego de nuevo con Yanira a la escuela. Vamos directo al salón, no han llegado muchos compañeros.
-Cintia vamos al baño.
-No. Ve tu prefiero quedarme aquí.
Parece un poco molesta por mi contestación pero no dice nada y se va sola. Entro al salón y me acero a Emanuel que esta sentado platicando con ojitos azules y Fernando.
-Hola ojitos cafés- me saluda ojitos azules.
-Hola niños- me siento con ellos.
-¿Llegaste sola?- pregunta Fernando, dejando el cuaderno en el que rayaba una hoja.
-No, Yanira fue al baño.
-Voy por un jugo- dice ojitos azules.
-Voy contigo- se le une Emanuel.
Ambos nos dejan solos. Hay un silencio incómodo. No se que decir. Piensa. Piensa.
-¿De que hablaban?- pregunto. No se que otra cosa decir.
- De videojuegos. No creo que te interese el tema- Fernando se levanta de la silla y veo que tiene la intención de salir afuera.
-A mi me gustan los videojuegos.
-Aja ¿y luego?- me estoy tratando de controlar para no voltearle un puñetazo. Ya ni mi papá me tacha de saber de poco de videojuegos. ¿Quién se cree este chulo?
-Aun que te parezca difícil de creer. Soy una gamer y tu no deberías poner esa actitud.
- Dime por lo menos tres nombre de videojuegos que no sean de niñas.
No Cintia. Contrólate no le des un puñetazo en esa cara de niño enojon.
-No necesito demostrarte nada. Yo se que juego videojuegos y con eso me basta- también me levanto pero yo si salgo al pasillo. Ese chulo me hizo enojar pensé que la discriminación hacia la mujer había acabado.
-¿Sabes que es un zombie?- me pregunta repentinamente detrás de mi.
Al sentirlo tan cerca de mi hace que tome mas distancia entre ambos.
-Si, es un muerto viviente.
-¿Haz jugando resident evil?
-Obvio niño- no puedo evitar sonreír.
-¿Cual es tu B.O.W favorita?
-La que enfrenta Chris al final en resident evil 6
Por unos pocos minutos mas seguimos hablando de videojuegos. Me gusto mucho encontrar a alguien que compartiera ese interés al igual que yo.
-¡Cintia, mi amor!- interrumpen nuestra platica Janet que llegaba junto con Elisa, Emanuel y ojitos zulúes.
-Hola, a todos-sacudo un poco mi mano.
Janet y Elisa se acercan y me saludan de beso en la mejilla. Después todos entramos al salón y cuando llega el profesor nos indica que de nuevo haremos trabajo en equipo.
-Espero que hayan hecho la tarea- empiezan decir el profesor.
Algunos se quejan, otros pregunta si había tarea y algunos solo dicen que si con la cabeza.
-Bueno quiero que hagan un cartel sobre el amor. Por eso les pedí que investigarán como se conocieron sus padres y sobre todo como se enamoraron. Reúnanse en parejas.
Janet y Emanuel hicieron equipo de inmediato, parece que tal vez ellos lleguen a tener algo. Pensé en hacer equipo con Elisa o Yanira pero las dos me apuñalaron por la espalda ya que hicieron equipo amabas.
-Cintia, no me hagas rogar. Ya me resigne seremos pareja solo el día de hoy, no te emociones.
Este se cree el rey de roma. Solo es para este maldito trabajo. Lo aguantare al menos hasta que mi puño termine en su cara.
-Tu mas bien no te ilusiones. Tu empiezas.
-¿Que?- pregunta con esa maldita sonrisa.
-Cuéntame como se conocieron tus papás. Ya sabes la tarea que dejó el Profe.
-No. Mejor tu comienza.
-Mira chulo, hoy no vengo de humor suficiente para aguantarte. Mejor conmienza de una buena vez.
-¿Siempre amenazas a todo el mundo, chula?- recoge un mechón de mi cabello y lo coloca detrás de mi oreja. Me alejo y amarro mi cabello en una coleta.
-Solo cuando es necesario- empiezo a sentir algo de frío y saco de mi mochila la chamarra de piel que me presto mi mamá.
-Y además de amenazadora eres mentirosa- me dice molesto. Se levanta y empieza hacer un margen a la hoja donde tenemos que hacer el cartel. ¿Que le pasa?. ¿Mentirosa?.
-¿Por qué estás enojado?- le pregunto.
-Por que eres una mentirosa por eso.
-Te hace falta un tornillo.
-¿Que? ¿Me esta diciendo loco?- tomo mi lápiz y empiezo hacer un corazón en la hoja.
-Si- me mira como si la loca aquí fuera yo.
-¿Pero por que lo dice?
-Por que me estas diciendo mentirosa y no tengo idea por que lo haces- saco mi lápiz color rojo y empiezo a colorear el maldito corazón.
-Por que dijiste que no tenias novio.
Este loco de donde saca que tengo novio. Confirmado le hace falta un tornillo.
- Y lo vuelvo a decir. NUNCA HE TENIDO UN JODIDO NOVIO.
-Y la chamarra que traes puesta ¿de quién es?- Acabo de darme cuenta. Quiere meterse en mi vida privada eso si que no.
-Que te importa. No seas metiche.
Parece que eso fue mas que suficiente para que me dejara de molestar. Ya que no hablamos por unos minutos.
-¿Por que nuca has tenido novio?- pregunta de repente mientras coloreamos a la pareja de enamorados.
Por que pienso que todos los hombre son idiotas. Calma no digas eso.
-No he encontrado al indicado.
- ¿Ni siquiera para un beso?- esas preguntas si son incomodas.
-Quiero que mi primer beso sea especial. Bueno o que al menos sea con alguien que quiera mucho.
-Es raro encontrar a alguien como tu- se aparta de mi y empieza a sacar mas colores de su lapicera.
-¿Como yo?- ¿me esta llamando rara?.
-Si. La mayoría de las niñas pierden su primer beso en secundaria. ¿Por qué tu no?
-Fernando ya te lo dije, no he encontrado a nadie especial a quien dárselo y no tengo ninguna prisa en encontrarlo.
-O tal vez alejas a las personas.
-No las alejo.
-Cintia no fue una pregunta, te estoy diciendo que alejas a las personas.
Tomo mi cuaderno y empiezo a escribir en la hoja, la historia de amor que he inventado.
-Claro que no. Yo no alejo a las personas- le digo en voz baja.
-Tienes razón mas bien eres una mustia.
Dejo de escribir y lo enfrento cara a cara. ¿Que le pasa?
-Repite lo que acabas de decir- le digo mirándolo a los ojos.
-Que eres mustia. Solo le hablas a las persona que quieres tratar. Y le haces un infierno a las que no tragas o ¿me equivoco?. Con esa carita de que no rompes ni un plato pero yo se que eres todo un infierno.
-¿Por qué me dices eso?.
- Por que me acabo de dar cuenta por que no tienes novio y por que nunca lo has tenido. Por que seria un pendejo el que se fije en ti.
¿Por qué me dice eso? ¿Por qué salió este maldito tema? ¿Que le pasa a este?
-Mira Fernando no tengo la mas mínima idea por que me dices todo esto, pero solo te digo una cosa si aquí se trata de jugar quien es el mejor doble cara te puedes ir haciendo a un lado por que aquí para chula yo.
-Jóvenes se termino el tiempo entrégueme sus trabajos- arranco el maldito cartel y se lo doy a Fernando para que el lo entregue.
-¿Que tienes Cintia?- me pregunta Janet cuando ya estamos sentada en nuestros lugares.
-Nada. Solo que Fernando me hizo enojar. No se que le pasa.
-Nena no le haga caso. Ahorita que se salga a la cafetería con Emanuel nos vengamos. Emanuel también me hizo enojar mucho.
Esperamos a que ambos salieran. Janet tomo ambas bancas donde ellos se sentaban y las arrastro hasta el pasillo. Salí con ella solo para ayudarla a dejarlas lo mas lejos del salón posible.
-¿Donde esta mi banca?- el primero en preguntar fue Fernando. Parecía molesto. Lo ignore igual que él me ignoro a mi ayer.
-Oye Janet ¿y mi banca?- esta vez pregunto Emanuel.
Janet empieza a sacudir sus bolsas y revisar su mochila. - Se me cayo de la bolsa.
Elisa empieza a reírse, saco mi iPhone y empiezo a revisar mis notas. Pero. Estas desaparecen, Fernando me a quitado mi iPhone.
-Dame eso- le digo con seriedad y estiro mi mano.
-Te lo daré cuando tu me regreses mi banca.
-Quédatelo, ya ni siquiera funciona bien.
-Quiero que me regresen mi maldita banca- no puedo creerlo. Por un momento me quedo mirando el espectáculo que se esta presentando frente a mi. Fernando pide una tras otra vez su banca pero como un niño pequeño. Esta haciendo un berrinche.
-No manches Fernando ya estas grande para hacer berrinches- menciona Elisa.
Fernando paro de hacer berrinche hasta que el profesor le indicó que saliera por una banca para que ya se quedara quieto. Me regreso mi iPhone y no me dijo nada.
El resto de la clase se la paso distante lo cual agradecí. Al llegar la clase de matemáticas corrí a mi lugar de adelante. Me senté y espere a que llegara el profesor.
-¿Seguirás evitándome?- menciona una voz detrás de mi. Tenía que ser él. Fernando.
-Yo note estoy evitando-le contesto con cierto sarcasmo.
-Ok lo que digas.
Oigo como cambia él de lugar. Suplico que se largue a la parte de atrás pero para mi desgracia, cambia el lugar con ojitos azules. Maldito traidor. Y ahora Fernando esta a mi lado.
El profesor empieza a explicar ciertas ecuaciones y para mi mal suerte deja un ejercicio.
-Estas mal-su maldita voz hace que me desconcentre.
Lo ignoro y continuo resolviendo a mi modo el maldito ejercicio.
-Cintia, todo tu procedimiento esta mal- arroja su cuaderno enfrente de mi.
-Casi me golpeas- le reclamo. Miro el cuaderno y ahí está la maldita respuesta al ejercicio.
-Cópiame. Si quieres- si quiero. Pero no le voy a dar el gusto de que me esté fastidiando solo por copiarle un maldito ejercicio.
-No, gracias. Yo lo quiero resolver- le doy su cuaderno y regreso a mi ejercicio. Borro todo el procedimiento pero mi goma se cae. Estiro mi mano para recogerla pero cuando logro recogerla Fernando toma mi mano. ¿Que diablos hace?
-Suéltame- le ordenó.
-No se me da la gana.
Hijo de tu madre. Por los siguientes segundos tiro de mi mano pero no obtengo liberarla de la de él.
-Haber ustedes dos, los novios- miro alrededor pero no veo a nadie.
-Señorita dije que a ustedes dos. Ya suéltense- el Profe me mira a mi.
-¿Me dice a mi?- pregunto ingenua .
-¿Me dice a mi?. Claro señorita que le digo a usted y a su novio. Ya suéltense de las manos- contesta el Profe divertido.
-El no es mi novio- le digo de mala gana. Jalo de nuevo mi mano y logró separarla de la de Fernando.
-¿Entonces?- pregunta el Profe. Además de él todo el maldito grupo esta divertido.
-Es mi amigo- siento como toda mi cara se calienta. ¡Que calor!
-No seas mentirosa Cintia- me dice ahora Fernando.
Lo miro y parece estar divertido. Aquí la única que no esta divertida soy yo. Odio que la maldita atención este en mi.
-Bueno amigo o novio ya esténse quietos los dos- afirmó con un leve movimiento de cabeza.
El Profe sigue con su clase y Fernando con su misión de molestarme. Termina la clase y no puedo estar mas feliz.
-¿Vienes mañana Cintia?- pregunta Elisa cuando me reúno con ellos.
-Si, mañana toca examen para finalizar el curso.
-No Cintia a lo que nos referimos es que como mañana salimos temprano por el examen, si te unes para irnos al parque.
-No puedo- mañana tengo una fiesta. Además seguro ira Fernando y para pasar un trago amargo mejor no.
-¿Por qué?- pregunta enojado Fernando. Enserio este quien se cree.
-Por que no quiero y punto- camino hacia la salida.
Siento como me rebasa y ahora esta delante de mi.
-Mañana vamos al parque. Jugáremos fútbol- menciona con esa sonrisa arrogante.
-Yo no juego fútbol.
Sólo dile que vas a una fiesta y punto.
Camino hacia la salida y me doy cuenta que esta lloviendo. Siento como algo cubre mi cabeza de repente. ¿Es un suéter?
-Te lo presto, para evitar que te mojes- dice Fernando sorpresiva mente detrás de mi.
Tomó el suéter con mi mano y lo arrojo a un charco de agua.
-¡Yo no te pedí que me prestarás nada!-le grito.
Emanuel se queda viendo el suéter que esta tirado en el charco.
-¿Por qué tiraron mi suéter?- dice con cierto desanimo.
Trágame tierra. El suéter no era de Fernando era de Emanuel. Que vergüenza.
-Parece que te has quedado sin suéter- se burla Fernando.
-Perdóname Emanuel pensé que era de este idiota- no esperó su contestación me largo a mi casa.
➰➰➰➰
Evito hablar de Fernando con mi mamá. Le cuento todo mi día excepto las partes en donde Fernando sale.
No se el por que pero empiezo a buscar a Fernando en Facebook. No hay resultados. Si no lo soporto por que me pone triste pensar que ya no estaremos juntos.
Un mensaje me saca de mis pensamientos. Es Margaret mi amiga.
Margaret: Hola ¿si vas a ir?
Yo: Claro. No me pierdo esa fiesta.
Margaret: Más te vale.
Cuando no aguanto más tener mis ojos abiertos me despido de Margaret y me duermo profundamente.
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Llego corriendo junto con Yanira a la escuela. Tenemos que esperar a que abran las puertas de la escuela así que empiezo a platicar con mis futuras compañeras Habigail y Noelia. Son simpáticas espero llevarme bien con ellas.
-¿Estudiaste?- esa voz sólo la tiene una persona y es la más insoportable en la tierra.
-Hola compañero- saluda Habigail.
-Hola Fer- también lo saluda Noelia.
Empiezan abrir las puertas y me escabullo dentro. Me siento en mi lugar de siempre. En la parte de atrás. Todos los demás entran en el salón y toman lugares específicos junto a los inteligentes o por lo menos con los que si estudiaron para el examen.
Janet toma asiento junto a mi y junto a Romeo que también es un nuevo amigo, ya que Janet empezó a hablar con el ayer antes de salir. A mi lado derecho se sienta Yanira pero para mi desgracia en la parte de atrás de mi es Fernando quien ocupa ese lugar.
El profesor nos indica que podemos empezar el examen en cuanto suene la campana. Espero a oír ese molesto sonido pero lo único que escucho es silencio. Quiero voltear atrás para mirar a Fernando pero no lo hago. ¿Por qué lo querría ver?.
Suena la campana y comienzo mi examen. Leo la parte de español y empiezo a contestar la preguntas mas sencillas. Todo va fantástico pero eso se va a la mierda cuando Fernando empieza hacer ruidos molestos junto con Yanira y Janet.
-Guarden silencio- le indica el Profe.
Paso a la parte de matemáticas. Todo es tan complicado y mas con el molesto ruido que hacen ellos tres.
-Ustedes tres. ¿Han terminado? Si no es así guarden silencio- vuelve a decir el profesor.
-Ya terminamos- dicen los tres al mismo tiempo.
-Entonces entréguenme sus exámenes y pueden retirarse- ni siquiera a terminado el profesor de hablar y Janet junto a Yanira ya están corriendo a su escritorio.
-¿Quieres mi examen?- me pregunta Fernando mientras balancea el examen frente a mi.
-Ya lárgate para que pueda seguir con mi examen.
-Ok. Tu ganas pero ese procedimiento esta mal.
En serio quiero romperle su maldito examen en la cara. Le entrega al Profesor su examen y antes de salir del salón junto con las otras, nuestras miradas se cruzan. Por un momento se mantienen fijas pero después el sale y se rompe el contacto visual.
Trato de resolver lo mejor que puedo la parte de matemáticas pero no lo logro así que le copio la mayor parte a Romeo. Termino mi examen y salgo junto a Elisa, Romeo y Emanuel.
-Ustedes si que tardan para un simple examen- alega Fernando.
-Bueno yo me voy que tengo planes, nos vemos el lunes- les digo a todos mientras me despido.
-Oye pero íbamos a ir al parque- se queja Fernando. Lo ignoro y también me despido de el.
-Repito nos vemos el lunes- camino hacia el metro pero mientras cruzo el parque siento como me jalan de un brazo. Quiero gritar pero se me ha ido la voz.
-Quita esa cara de horror- se burla de mi. Tenía que ser él.
-Fernando eres un idiota.
- No seas niña, vamos al parque un rato.
-Ya te dije que no. Tengo planes- empiezo a caminar de nuevo.
-¿Con quien? Si se supone que tu no tienes novio- me contesta con ira.
-Que te importa. Ya déjame en paz.
Retomo mi camino esta vez nadie me lo impide. Solo quiero llegar a mi casa y dejar de pensar en ese maldito. Seguro lo dejare de ver el lunes ya que conocerá a nuevas persona y se ve que es un prostituto con las mujeres. Seguro encontrara el mismo lunes una novia mas rápido de lo que imagino. Y se olvidara de mi y dejara de fastidiarme.
No se por que razón pero no quiero que sea lunes.