-SARAAA VEN A DESAYUNAR!!!-Grito mi madre desde la cocina.
-DAME UN MINUTO Y YA BAJO-Le respondí mientras miraba el reloj eran las 9:30 AM aun no entendía porque mi madre me despertaba tan temprano un domingo, se supone que ese día es sagrado, me levante de mi cama y al mirar en donde había dormido me di cuenta que estaba un tanto desordenado digamos que no es que yo duerma muy bien, me estire como suelo hacerlo todos los día apenas me despierto o más bien que alguien me despierta y baje a desayunar con mi madre.
-Dios, mama para el próximo fin de semana despiérteme mas tarde recuerda, que esos días son sagrados para mí- le dije mientras bajaba las escaleras con un tono de sonámbula tanto que casi me estrello contra la pared.
-Pues perdón por preocuparme que mi hija se alimente al horario adecuado- Me respondió en un tono de exageración.
-Ahh y ya empezaste- Dije mientras me sentaba en la mesa a desayunar pero me encontré con un plato de comida que se veía exquisitamente delicioso, el desayuno era panqueques con queso derretido, miel y mi malteada preferida vainilla- Mmm creo que me estoy arrepintiendo de lo que acabo de decir- Dije riéndome mientras saboreaba mentalmente el desayuno.
Después de devorar mi plato y mi malteada subí a mi habitación con ganas de vomitar de lo llena que me sentía porque siendo sincera mi madre a veces exagera en la porción del plato- cuando llegue a mi habitación me acosté nuevamente en la cama que por cierto estaba hecha un desastre a esperar que se me pasaran las nauseas.
Cuando había terminado mi reposo entre a la ducha y me di un baño de agua tibia para poder calentarme un poco, porque estamos en temporada de invierno y hace muuucho frió, cuando termine mi ducha me dirija hacia el armario a cambiarme y decidí ponerme algo sencillo cuando termine de vestirme fui al espejo y tenía puesto una camisa de tiras negra con una chaqueta de cuero por el invierno, unos jean un poco ajustado unos converse blancos y para finalizar decidí hacerme una coleta con una liga blanca. Me dispuse a organizar mi habitación porque no me gusta caminar entre montones de ropa sucia, mientras organizaba coloque una canción para que no fuera tan aburrida mi mañana, busque mi teléfono que se encontraba en mi mesita de dormir y coloque la canción Thinking out loud de Ed Sheeran, cantaba feo pero con sentimiento, pero a medida que limpiaba mi habitación me encontraba con cosas que pensé que las había perdido, definitivamente tenía que organizar mi cuarto muy seguido.
-AL FIN TERMINE!!!- Grite exhausta cuando mi habitación había quedado completamente organizada, mire el reloj eran las 11:50 AM y decidí bajar a la cocina a tomar un poco de yogurt para reponer energías perdidas después de limpiar mi habitación. Cuando estoy a punto de abrir el refrigerador me di cuenta que no estaba el yogurt, que no estaba MI yogurt.
-MAMAAAA EL YOGURT SE ACABO- Le grite desde la cocina, ella se encontraba en la sala trabajando en su computador.
-Pues vez y compra otro en la tienda, el dinero está en la mesa al lado de la piña de plástico y deja de gritar o quedaras afónica - Me respondió mi madre.
-Está bien- Le respondí a regaña dientes porque no tenía ni las mas mínimas intenciones de salir hoy, pero Salí por mi hermoso y queridísimo yogurt.
Tome las llaves de la casa, mi teléfono, abrí la puerta y me fui a la entienda mientras pensaba que iba hacer después
-Qué te parece si salimos al parque- Me dijo mi subconsciente
-No hace frió y además con quien sabes que Juliana está de vacaciones en México- Le respondí a mi subconsciente
-Tienes razon pero si fueras un poco más mmm como decirlo SOCIABLE con las personas pudieras invitar a cualquier otra persona- Me dijo mi patético subconsciente
-Otra vez con lo mismo ya sabes que no necesito a una persona a mi lado para poder vivir, con Juliana estoy bien ella me entiende, me apoya y en especial es sincera no como la mayoría de amistades además no se ni porque estoy peleando contigo- y de un momento a otro caigo al suelo sin saber quién o como sucedió.
-Perdón señorita, está bien- Me pregunta un desconocido que acabo de tropezar en toda la entrada de la tienda por estar hablando con mi subconsciente
-Ehh, si eh l- lo siento mu-mucho- le respondo aun tirada en el suelo
-Lo lamento donde están mis modales- Me dice el desconocido y me ayuda a levantarme
-Muchas gracias- le contesto y me doy media vuelta sonrojada por lo que acaba de pasar, me sentía tan apenada con ese chico y todo por estar hablando sola, después de la escena tan horrible y vergonzosa que acabo de pasar me dirijo al pasillo de comida y empiezo a buscar mi yogurt
Holaaaa habitantes de este extraño mundo que respiran
queria decirles que los quiero mucho, pueden ver poco a poco como es Sara
yeii estoy muy contenta porque YOLO los amoo
no olviden comentary votar
chau
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¿Siempre juntos?
RandomSara Stone es una adolescente de 17 años, ojos marrones, cabello castaño ondulado y con una hermosa sonrisa, Sara no tiene una vida activa o llena de aventuras alocadas como cualquier adolescente, hasta la llegada de un enigmático chico llamado Alex...