Dioses Mitológicos III (Mitología Celta)

Ceridwen

Diosa de la inspiración y la sabiduría. Diosa de la brujería en la mitología irlandesa.

Ceridwen estaba casada con Tegid Foel y tenía tres hijos: Crearwy, Morvan y Afagduu.

Crearwy era la doncella más hermosa de toda la tierra. Morvan era feo pero fuerte y astuto en la batalla. Afagduu era horriblemente feo y no era aceptado en la sociedad. Para compensar la fealdad de su último hijo, Ceridwen lo volvería el más fuerte de los bardos galeses, esto lo lograría preparando una poción, cuyas primeras tres gotas serían mágicas, y el resto del líquido sería un veneno letal. La poción debía prepararse durante un año y un día. Para vigilar el caldero, Ceridwen tenía dos sirvientes: el anciano y ciego Morda y el joven Gwyon. Tenian la orden de no tocar el caldero, pues su castigo sería letal.

Un día, cuando Gwyon estaba revolviendo la solución, tres gotas cayeron en su mano, la cual llevó a su boca, recibiendo los poderes destinados a Afagduu. Cuando Ceridwen se enteró de lo sucedido, persiguió a Gwyon para matarlo, quien, haciendo uso de sus nuevos poderes, se convirtió en liebre, pero Ceridwen se convirtió en perro. Gwyon saltó a un río y se convirtió en pez, Ceridwen se convirtió en nutria y también se lanzó al río. Gwyon se convirtió en gorrión y Ceridwen en águila. Finalmente, Gwyon se convirtió en grano de trigo, pero Ceridwen se convirtió en gallina y se lo comió.

Cuando Ceridwen volvió a su forma humana, se dio cuenta de que estaba embarazada, el fruto de su vientre era Gwyon. Decidió entonces matarlo cuando naciera, pero cuando nació era tan hermoso que no pudo hacerlo, por lo que lo envolvió en piel de foca y lo lanzó al mar. El bebé sobrevivió y fue recogido por el príncipe Elphin, quien lo adoptó al infante y lo llamó Taliesin. Con el pasar de los años, Taliesin se volvió el acordeonista del rey Arturo y su consejero.