Capitulo 3
" La chica misteriosa al descubierto"
Los días siguientes en la escuela fueron una lenta tortura. A comparación de las primeras semanas en las que casi nunca lo veía, ahora me cruzaba con Leon en todo momento. Podía sentir su inquietante mirada mientras caminaba a través del comedor o paseaba por el pasillo.
Era sábado por la mañana y hubo un suave toqué. Mi padre había salido muy temprano y Paul dormía porque se había acostado tarde.
Era Leon sosteniendo la puerta con un enorme ramo de rosas negras. Me lo puso en las manos antes de que pudiera cerrarle la puerta.
~ Empecemos de nuevo~ Extendió la mano. ~ Hola, soy Leon Dowson. ¿ Y tu eres?
Me quede mirándolo seriamente.
~ Vamos esta es la parte sencilla. Soy Celen Miller y vengo de inglaterra ~ Se puso en un acento tan ridiculo que sentí parte de mi reticencia desdoblarse bajo el impulso de reirme.
~ Yo no hablo así.
~ Claro que lo haces. Adelante dilo.
~ Hola, Soy Celen de Richmond , Inglaterra. Y quiero que te vayas.
~ Ahora tú dices, Guau que bellas flores. ¿ Que tal si pasas para una confortable taza de té?
Ese asentó tenía que irse.
~ No me gustan las flores, lo siento ~ Me quite del paso ~ ¿ coca cola?
~ Si tú insistes ~ sonrió algo nervioso para lo que suele ser y entro.
Caminamos hacía el salón.
~ siéntate ~ le dije y camine hacía la cocina para sacar dos latas de coca cola.
Regresé hacía el salón y encontre a Leon sentado con sus codos apoyados en sus rodillas.
Le dí la coca cola.
~ Así que dime algo sobre ti. Yo tocó la guitarra y la batería. ¿ Qué me dices ti.?
~ Casi nada~ dije tomando mi refresco.
~ Enserio estas muy cambiada. ¿ Cómo esta tu padre?
~ Él esta bien ~ me encogí de hombros.
~ ¿ Y tu madre?~ casi me ahogo.
~ Mi mama... am... falleció ~ Balbucee. Sentí los ojos aguados. Las lagrimas amenazaban con salir. A cinco años de su muerte. Aún dolía.
El rostro de Leon se tornó serio.
~ Lo siento mucho ~ Dijo casi en un susrro.
~ No importa ~ Si importaba.
~ Bien, me tengo que ir, no quiero malgastar mi suerte ~ Se levantó~ Un gusto conocerte otra vez, Celen.
Cuando creí que me daría la lata vacía. Me dio un beso fugaz en la mejilla.
Mi piel se erizó y me puse nervisa... ¿ Por qué?
~ Adios ~ Me susurro en e oído y se marchó.
El lunes en receso me senté en la mesa más oculta del comedor, el día estaba nublado y hacía combinación con mi actitud de ese día. No andaba de buen humor, a causa de mis pesadillas.
Esta vez fue casi el mismo sueño... solo que ahora el recuerdo del abuso había regresado a mí.
Leon estaba al otro lado del comedor, con sus amigos quienes al verme susurraron algo a Leon y él levantó la vista hacía mí.
A los quince minutos se me acercó.
~ Hola Celen ~ Yo solo me quedé mirándolo con la ceja alzada.
~ Alejate Leon ~ le dije friamente.
Leon sacó la silla de mi derecha y la giro de modo que se quedase frente a mí.
~ ¿ Me regalas un beso? ~ Soltó de repente. Abrí los ojos como omoplatos.
~ ¿ Qué? ~ Dije incrédula ~
~ Así esta la cosa ~ Dijo Leon~ Si no puedo besarte para el final del almuerzo, entonces tengo que dejar que Samuel lleve a Katia , la chica de Denver al baile de bienvenida y ya ha hecho recervaciones para cenar en su restaurante favorito.
~ Estas loco~ Me reí ~ Y además ¿ Por qué yo?
~ Te has convertido en la chica misteriosa ~
¿ Cuando había obtenido un nombre en la sociedad?
~ Bueno, no me interesa
~ Oh, vamos, Celen. No significará nada. Te lo deberé. ~ Dijo suplicante ~
~ ¿ A cambio de que? ~ Lo mire. Leon suspiro.
~ Un dolar ~ ofreció.
~ Diez~ Le dije levantando una ceja.
~ Hecho ~ Me dijo.
~ Muy Bien~ Dije con un suspiro.~ Haz lo que te de la gana.
Me senté hacía atrás y me cruce de brazos.
~ En realidad ~ Dijo encogiéndose ~, tienes que darme tu el beso o no cuenta.
Fruncí el ceño.
~ No tienes que fingir que te gusta.~ Dijo sonando un poco desesperado por primera vez ¿ Por favor?
No dije nada. Solo miré sobre su hombro y vi a sus amigos observándonos. Luego me incline y presione mis labios sobre los de Leon.
Hará poco más de un año.
Hará poco mas de un año desde que había sufrido los maltratos de mi ex ex novio. Y fue lo que me convirtió en quien era. Y odiaba admitirlo, pero no había besado a un chico desde que había cambiado.
No había verdaderas chispas fisicas, pero algo paso a través de mí y fue hacía Leon. Yo solo quería solo rozar sus labios, pero en el instante en que conectamos Perdí todo mi autocontrol.
Tiré mi boca contra la suya con tanta fuerza que casi se cayó de su silla. ~ No parecía preocuparse ~ La siguiente cosa que supe es que estaba sentada sobre su regazo con mis manos alrededor de su cuello.
Todo el mundo en la cafetería se quedó en silencio, o al menos para mí el sonido se desvaneció y fui entonces cuando me di cuenta de lo que estaba sucediendo. Me limite a besarlo hasta que mis emociones estuvieran bajo control
