Mi hermano gemelo (Kaname Kuran)

Sangre, Estupida sangre!!

Estaba escondiendo mi rostro en el hombro de Zero no quería verlos, no se que iba a pensar de mi Kaname, levante un poco la cabeza y me encontré con todas las miradas rojas de toda la clase nocturna, sus colmillos sobresalían, esperen ¿por que demonios sacaron su lado vampiro?, mire confusamente a todos, después levante la vista para mirar a Zero que también me veía con aquellos ojos y colmillos sobresalientes, ¿que demonios pasa aquí?, estaba confundida, sus miradas era de deseo, pero ¿deseo a que?, mientras un lío se amarba en mi mente no me di cuenta de que Yagaito se había acercado hasta Zero y a mi, me bajo de la espalda de mi amigo, después me tomó del antebrazo y me jaló apurado hasta mi habitación, cuando llegamos cerro la puerta con seguro soltando un suspiro de pesadez ¿que le pasa?

- estuvo cerca - no entendía y la mirada que le dirigía se lo decía

- ¿de que hablas Yagaito?

- Mine, tu sangre, tienes muchas cortadas por todos lados, tu sangre para ellos a de ser irresistible

-No me importaría darles un poco de mi sangre

-estas loca!! Mine ellos son vampiros, ellos cuando empiecen a tomar no pararan - suspiro - Mine ellos desde hace 1 hora ya habían a empezado a olfatear tu sangre, ¿tu crees que lo que realmente estaban tomando era té? - asentí - pues te equívocas, ellos estaban tomando sus pastillas de sangre, no podían controlar su sed, incluso el chupasangre Kuran que suele ser el más controlador con respecto a eso se estaba descontrolando

Guarde silencio ¿como le haré para evitar que todos los vampiros de esta casa no me encajen sus colmillos?, miedo no me daba, aunque el dolor era demasiado cuando lo  hacían , las únicas veces que han tomado de mi fue a los pocos días que llegue a la academia y la vez que me atacaron esos Vampiros nivel E fuera de la casa de campo de Kaname.

Camine al baño de mi nueva habitación, mire pare enfrente del espejo Encontrándome con muchos rasguños en mis brazos, hombros y unos cuantos en mi cara,  la sangre se había secado.

- Yagaito sal!

- okey Mine

Me despoje de toda mi ropa, me metí a la ducha para después abrí la regadera, mi cuerpo era mojado por esa lluvia artificial, mientras ordenaba mis ideas sentí un fuerte dolor en mi cadera, me sostuve de la pared y mire al suelo

-Aaahh!!!

Esto era malo, muy malo, justo ahora en cerio, mi ciclo menstrual se había adelantado, mi parte íntima desprendía sangre, esto no podía salir peor, de pronto oí como pasos se acercaban a mi habitación para después escuchar como la puerta del cuarto de abría de golpe, segundos después oía como tocaban la puerta del baño

-Mine!! Mine!! ¿estas bien?

Podía oír la voz de Zero desde el otro lado de la puerta, no salía palabra alguna de mi boca, estaba shokeada, demonios, ahora si todos van a encajarme los colmillos

-Mine responde!! Mine que pasa!?! Mine por que huele mucho a sangre!!?, Joder!! Responde o tiro la puerta!!

- No Zero!!, estoy bien!!

Dije despertando de aquel transe

-por que huele mucho a sangre!!?

-Etto....

- responde o si no tiro esta maldita puerta!!

-No te puedo decir Zero!!

-entonces abre paso por que yo averiguaré que te pasa!!!

- Ñoo!!

-no me dejas otra opción Mine!!

-Menstruación!!!!!

Grite a todo pulmón, Coño!! Esto si me daba vergüenza, mis mejillas se tiñeron de rojo, en ese momento nada se podía oír,

-Que dijiste Mine?

Dijo Zero hablándome ya sin gritar

-Que estoy en menstruación Coño!!, Me llegó la regla!!

Okey me quería morir en ese momento, sabía que detrás de esa puerta estaban toda la clase nocturna, el director, Yagaito y Zero

-¿quieres que te dejemos sola Mine?

Esta vez hablo Kaname, okey Jesús Matarme por favor

-Si... Po...r.. Por favor.... - mi lengua se trababa mucho, estaba tartamudeando

Oi muchos pasos salir de mi habitación, me termine de bañar, me puse mi ropa de dormir, no sin antes colocar mi toalla sanitaria, me hecho en mi cama, mis ojos empezaban cerrar mientras los brazos de morfeo me envolvían en un muy dulce abrazo

Me dolía el cuerpo, no podía más, deje caer mi cuerpo en unos costales que estaban arruinados en una esquina de la habitación, veía como Herika mi mejor amiga seguía luchando con esos Vampiros nivel E, detrás parada en la puerta al lado de un enmascarado estaba ella, esa maldita purasangre que acabó con mi mejor amigo y toda su familia hace algunos años, Shizuka Hio, me miraba divirtiéndose con la imagen que yo le proporcionaba, una adolescente de sólo 16 años con ropa rasgada, sangrando demasiado, con un cuerpo débil según ella, estaba cansada, mi cuerpo necesitaba descanso, pero no me lo podía permitir, me levante con mucho esfuerzo y me dirigí a pelear nuevamente con esos Vampiros, cuando por fin acabamos con todos ellos Herika me abrazo, le Sonreí, sentí como alguien me tomaba de los brazos, trataba de zafar, más no podía, Shizuka se acerco a Herika, la tomó del cuello y rápidamente le encajó los colmillos, succionaba toda la sangre que mi amiga poseía, me sentí inutil,  seguí intentando escapar de aquel que me sostenía, pero por más que pude no lo lograba, mis heridas recién y mi pérdida de sangre no me ayudaban en aquel momento. El cuerpo de mi amiga cayó al suelo, un cuerpo sólo sin vida, me deje caer de rodillas al suelo, mientras mis lágrimas se deslizaban por mis mejillas, la mató, Shizuka mató a mi mejor amiga, la rabia inundó mi mentó, no pensaba con claridad, quite mi collar por primera vez en años, dejando ver mi lado vampiro, me acerque a esa maldita purasangre, tome su cuello, lo apretaba fuertemente, la aventé contra el muro donde recibió un fuerte golpe, me acerque corriendo a velocidad vampiro, en rápido movimiento le encaje mis colmillos en su cuello, succione su sangre que a decir verdad estaba algo deliciosa, seguía succionando, estaba apuntó de dejarla muerta cuando siento como me disparaban con un arma anti-vampiros, deje a Shizuka a un lado, caí rendida al suelo, me volví a colocar mi collar, mientras veía como la purasangre desaparecía de mi vista

Me levante sobresaltada, de mis mejillas caían por montones lágrimas saladas, odio cuando sueño esto, pero a la vez me sirve, no volveré a dejar que nadie se sacrifique por mi, Prefiero ser mil veces el príncipe protector que la princesa protegida.