3. Limón y espinillas.

498 30 4
                                    

-¡Arde, arde, arde! ¡Saca el maldito limón de mis espinillas!- dije mientras pataleaba en la cama de Chad mientras mi padre y los tres chicos observaban mi desgracia.

-Para ser bella, hay que ver estrellas, nena- dice Chad con una mano en su cintura y su cara de diva.

-Estrellas te haré ver yo con el golpe que te te daré si no sacas este puto limón de mi puta cara- dije amenazándolo con mi dedo.

-Uy, yo te haré ver las estrellas de otra manera, nena- habla Felix.

¡OH, MALDITO!

-¡Que te den, Felix, que te den!

-¿Por dónde?- dice moviendo sus cejas.

-Calla, ¿sí?- digo mientras le muestro mi hermoso dedo del medio.

-Bien- roda sus ojos.

-No hagas eso- digo.

-¿Qué cosa, esto?- roda sus ojos.

-Sí eso- me estoy enfadando.

-¿Por qué no quieres que haga esto?- roda sus ojos, nuevamente.

Pesco un limón de la mesita y se lo arrojo haciendo que este caiga hacía tras en un mal movimiento tratando de evitar el limón

-¡AUCH!- se queja mientras se soba la parte lastimada- Esta bella cara no debe ser lastimada, nunca. Jamás.

-¿Bella? más bello es tu trasero, Felix- hago una mueca.

-¡¿SE LO HAZ VISTO?! ¡POR DIOS, APRIL! ...tu hormonas, joder- dice mi padre tocándose la frente y fingiendo desmallarse.

-¡LO ESTAMOS PERDIENDO! - dice River corriendo por toda la habitación haciendo ruidos de ambulancia.

Dios, por que no me trajiste a vivir con unos chicos normales.

-¿No haz pensando en sacarte las cejas?- dice Chad mientras me observa detenidamente.

Ni lo pienses, puto, ni lo pienses.

-Nope

-¿Te las saco? no dolerá- ¿¡kiee!?

Okey, April, ahora es cuando.

3

2

1

¡CORRE, GORDA LECHONA, CORRE!

-¡No te escaparás, cejona! ¡HIJA DE KING KONG!- quizás se le ha olvidado que mi padre está al lado de él.

Já, perra. Bueno, perro.

-¡NO TE ESCAPARAS, APRIL CON APELLIDO DE ZORRA!- dice Chad corriendo tras de mi.

-Igual al padre, que orgullo. ¿ZORRA? Ven maldito pendejo, ¡que te castro! ¡TE CASTRO!- ahora mi padre está tras de Chad.

(...)

-Me alegra que se lleven tan bien- dice mi padre desde mi puerta mientras nos veía desde la puerta.

- ¿Bien? ¡¿BIEN?! Tu crees que nos llevamos bien. ¡MIRA COMO ME TIENE! ¡lleno de plumas, joder!- dijo Tayler mientras escupía plumas. Sí, estábamos en una pequeña Guerra de almohadas.

-¿Quién comenzó?- achino mis ojos.

-Digamos que ambos- me guiña el ojo.

-No uses tu guiño conmigo, que no soy zorra- lo fulmino y gruñe por lo bajo.

-Ella,—Me apuntó—ella es toda una anti-zorras- dijo River guiñando un ojo apuntarnos con los dedos.

-April, ven, vamos a la sala- dijo mi padre llamando mi atención y la de los chicos.

Adoptada por los ¡PlayBoys!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora