6.Chad.

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Chad's POV:

Maldita sea.

-Todo estará bien, Chad. Sólo tienes que estar tranquilo- dijo River sobando mi espalda.

-No quiero, no quiero perderla... no de nuevo - dije sollozando.

-Eso no pasará

-¿Cómo estás tan seguro de eso?- lo miré.

-Ella ahora está con nosotros, no nos dejará- me miró por unos segundo y se retiró a su cuarto, sin más.

Suspiré frustrado y pasé mis manos por mi rostros. 

Subí lentamente las escaleras hasta que que llegué a mi habitación. Quité mi ropa de inmediato para ir a la cama rápidamente. No quería estar ni un minuto más en esta realidad. Solo quería dormir y olvidarme de todo por solo unas horas

Me sentía devastado.

Me recosté en mi cama solamente en boxers, miré el techo y quedé sumergido en mis pensamientos.

De repente  mi mirada se desvió hasta mi cadera y allí encontré una cicatriz, sentí como apuñalaron mi corazón. Recuerdos comenzaron a recorrer mi mente.

Ella, salía como la portada de mi libro. Me había costado tanto tenerla conmigo de nuevo y había sido tan jodida mente fácil arrancar de mis brazos.

-¿Siempre juntos?- susurró.

-Siempre juntos, nena- besé su frente.

Le prometí que estaríamos siempre juntos, pero estuve dos años sin ella. Es lo mejor que me ha pasado.

Sé que a ella le falta algo, y ese algo, soy yo.

¿Aún me recordará?

¿Me extrañará?

¿Quiere estar conmigo?

y sobre todo...

¿Me perdonará?

Preguntas inundaban mis cabeza sin parar.

Comencé a sollozar fuertemente, golpeé la almohada sin parar. 

Solo la quería ella, que con sus pequeñas manos me susurré : "Todo estará bien", aunque ella no tenga ni idea de lo que me sucedía.

Desperté agotado, mis ojos pesaban y me sentía devastado, solo quería caminar y olvidar. Me dirigí hasta el baño y mi imagen en el espejo no era la mejor, tenía unas grandes ojeras debajo de mis ojos, apenas se podía abrir y estaban hinchados.

 Suspiré agotado y me metí a la ducha, definitivamente necesitaba una ducha caliente. Luego de salir de la ducha comencé a secar mi cuerpo, me vestí con un buzo plomo ajustado, unas vans negras, una pollera simple ploma escura y un chaleco negro.

Bajé las escaleras y desde la cocina pude oír unos ruidos. April. Me encontraba en el marco de la puerta mientras veía a April en puntitas tratando de coger unas oreos.

-Yo te las alcanzo, enana- susurré y esta puso una cara de espanto.

-Me has asustado, imbécil- dijo sentándose en unas de las sillas. Estaba solamente con la pollera de Tayler que le quedaba a menos de la mitad de su muslo, pero tapaba lo suficiente.

Puse las galletas en un pequeño pote, saqué una taza y en ella preparé café caliente.

El día estaba jodida mente frío, amaba los días así.

-Gracias- susurró mientras tomaba de su café- ¿Qué haces tan temprano despierto?

-No se me apetecía dormir y estar encerrado, hoy no es un día de esos.

-Eso es raro en ti- rió- ¿Te sucede algo? no estás como los otros días, sonriendo, jugando, bromeando, estás así desde que tuviste aquella pelea en la fiesta.

Tensé mi mandíbula,

-No todos los días me verás sonriendo, nena. Habrán días que lo único que querré es estar en un parque solo viendo como la lluvia cae por la ciudad. Van a ver días que la tristeza se apoderará de mi, por que mi pasado y culpa no me lo permitirán.

-¿Qué ha pasado en tu pasado?- preguntó tomando de su café.

-Perdí una chica... La amaba, la amo y la amaré. Ella es todo para mi, si ella vuelve a desaparecer de mi vida mi mundo se derrumbará.

-O tranquilo, cariño. No la perderás, si ella volvió  es porque realmente te ama- susurró- ¿Sabes? Yo también perdí a una persona de mi vida, no lo veo hace tres años, lo amo, lo extraño- sollozó y sentí como mi corazón se partía en millones de pedasitos. Sabía perfectamente de quien estaba hablando- Maldita sea, se fue... y no lo volvía ver, me arrebataron de sus brazos, no sé como está ahora, si pudiera saber como está lo reconocería de inmediato. Daría mi mundo entero para que me abrace y que me diga está bien, que todo estará bien, que nos volveremos a encontrar, que me diga buenos días, pequeña, que me diga que me ama, ¡LO EXTRAÑO, MALDITA SEA!- rompió en llanto y sus  puños extrellaron contra la mesa.

No aguanté ni un segundo  más y corrí a abrazarla fuerte mente, yo también rompí en llanto.

No lo soportaba más... 

Sentí como su respiración agitada chocaba en mi cuello, rodó sus pequeños brazos en mi cuello. Segundos después tomó mi cabeza con sus manos y me miró directamente a los ojos.

-Te pareces tanto a el. 

Nota de autora:

¡HE ARREGLADO EL BENDITO CAPÍTULO! 

Okey, pido perdón por que el capítulo se actualizó solo y no puso la mitad se la historia y luego tuve otro problema. Que se tenía absolutamente todo el capítulo listo y de un de momento a otros se me ha borrado.

Lo sé soy una idiota.

El capítulo es bastante corto debido al corto tiempo que me dí de terminarlo que lo he acabo en solamente una tarde, y como hoy he despertado bastante tarde lo terminé ahora. 

eso, espero que les guste el cap.

Pd: casi lloro con el capítulo :c, quizás ustedes no entenderás el por que pero yo si e.e.

jejej Adiós, cuídense muchísimo. 

<3.

Adoptada por los ¡PlayBoys!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora