Me daban ganas de llorar, pero no conseguí averiguar nada. Era una especie de enfermedad triste, de tristeza enferma, en que llega un momento en que ya no te puedes sentir peor. Creó que sabes lo que quiero decir. Creó que todo el mundo lo siente de vez en cuando. Pero yo lo he sentido muy a menudo, demasiado a menudo.