Capítulo veinticuatro.

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;Tú.


Abrí mis ojos de repente cuando sentí un dolor conocido en mi espalda. Grité. Si no me hubiera dolido tanto hubiera explotado en el partido a golpear a la niña que me había dado ese horrible golpe. Lentamente me levanté, me dí cuenta que era tarde, éso quería decir que había descansado mucho. Caminé despacio sintiendo que el dolor en mi espalda ya no era tanto comparado con el de ayer. Bajé las escaleras con cuidado, me dirigí hacia la cocina para ver una ya típica nota de mis padres como siempre en el refrigerador, de seguro se habían ido urgentemente por el trabajo o a ver a mi hermano. No me molesté en leerla.

Saqué algunos huevos y tocino del refrigerador y me hice de desayunar. Desayuné sola hasta que revisé mi teléfono y me dí cuenta de que tenía 3 llamadas perdidas, dos de estas eran de Yixing, y la otra era de un numero privado. Decidí llamarle a Yixing.

— ¿Hola? —Me contestó él.

— ¡Hey Xing! Lo siento, estaba desayunando.

— No te preocupes, todos necesitamos estar en privado solo con nuestra comida. —Me dijo haciéndome reír y provocando que mi estomago me doliera un poco por el esfuerzo.— ¿Cómo está tu espalda?

— Mejor que ayer, creo que me estoy recuperando.

— Te va a doler muchísimo, no podrás jugar fútbol en un rato.

— Ugh, no me lo recuerdes.

— Mmhmm... Espero no tardes en recuperarte, tu equipo no será lo mismo sin ti.

— Por lo menos creo que necesitaré una semana, creo. —En ese momento me asomé por la ventana, había un auto negro estacionado afuera.- Te veo luego, Xing.

Colgamos y bajé las escaleras con cuidado, me dirigí hacia la puerta y me detuve. No era el auto de Yixing, era un viejo coche negro que no reconocía. Fui hacia la cocina y miré hacia afuera por la ventana, habían unos hombres revisando por mi jardín, y esta vez no eran policías como la vez anterior que estuvieron buscando en mi casa. Hice lo que KyungSoo había hecho hace tiempo, cerré las cortinas de todas las ventanas y eché un vistazo con precaución desde mi habitación. ¿Qué estaba pasando? Los estuve mirando y desaparecieron en su auto. Dejé salir un suspiro.  Recuerdo cuando KyungSoo me mantuvo a salvo cuando aquellos sujetos estaban en mi casa. Sacudí mi cabeza, no quería pensar en él. Bajé las escaleras de nuevo pero... algo no estaba bien. Mi perro Leo había estado ladrando afuera pero ahora, todo estaba en silencio, Leo no pudo dejar de ladrar tan rápido. Me asomé hacia afuera, y no vi a mi perro. Caminé alrededor de mi casa buscándolo y también me asomé por las ventanas, no lo vi. Así que decidí salir a mi jardín trasero para buscarlo, lentamente abrí la puerta, tomé un viejo bate de metal que mi hermano usaba para jugar cuando él estaba en el equipo de baseball, caminé lentamente, Leo hubiera salido de la nada corriendo hacia mí para lamerme la cara, pero no había rastros de él. Di vuelta en una pared para escuchar a mi perro sollozar. Lo vi echado sollozando como si alguien lo hubiera golpeado, corrí hacia él y lo acaricié.

Leo miró detrás mío, y yo tomé el bate. Golpeé algo solido, me di vuelta y vi a un chico vestido todo de negro tratando de mantenerse de pie, traía puesta una mascara obscura. Corrí hacia la casa cerrándola con seguro y corrí hacia el teléfono más próximo que tenía y me dirigí hacia la cocina.

- ¡¡Mmmmphmm!!

De repente, alguien había cubierto mi boca y me cargó por detrás.

Sentí un dolor en mi espalda que apenas y pude controlar ya que la presionaron y me torcieron. Traté de patearlo y golpearlo pero no podía respirar ya que me golpeó en el estomago, me dolió mucho. Lo vi sostener algo en sus manos, traía una aguja, forcejeaba más y lo golpeé en la cara, pero él ni siquiera hizo muecas de dolor. Rompí algunos platos y tazas, cerca del estante enviándolos volando por toda la cocina.  La aguja quedó clavada a través de mi cuello, en mi piel, me dolió hasta el alma. Continuaba tratando de golpearlo hasta que mis ojos se cerraban fuera de mi voluntad y mi cuerpo dejó de responder. Sentí un hormigueo caliente en mi cuerpo, cerré mis ojos y todo se volvió obscuro.

Enamorada de un asesino [KyungSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora