Capítulo VI.

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Ya me encontraba a un par de metros del auto cuando veo a Alonso recargado en el carro, besándose con una chica rubia mientras la tenia tomada por la cintura. Realmente esa escena era algo incómoda y no pensaba interrumpirlos ya que se veían muy concentrados en lo que hacían así que decidí alejarme del lugar.

Caminé sin rumbo fijo, quería distraerme un poco y contemplar lo hermosa que era España, es un lugar increíblemente fascinante y su arquitectura es perfecta, por eso siempre quise viajar a este país, aunque en mis planes no estaba venirme a vivir aquí, pero creo que valdrá la pena. Llegue a un amplio parque solitario, estaba repleto de grandes árboles y se podía escuchar el melodioso canto de los pájaros, me senté en una banca pero al poco tiempo decidí irme pues cuando saque mi celular me percaté de que ya había estado demasiadas horas fuera de casa, así que sin muchos ánimos decidí regresar.

|Alonso|

Paso casi una hora y ____ aun no regresaba, yo ya estaba demasiado aburrido pues Miriam, mi novia, se tuvo que ir porque tenia que llegar temprano a su casa, yo la quería acompañar pero todo por la culpa y la tardanza de____no pude hacerlo.

Seguí esperando, hasta que ya verdademente fastidiado decidí entrar a buscarla, recorrí todos los pasillos del instituto pero no apareció por ninguna parte, no sabia si ya se había ido o que ocurría pero yo ya no esperaría ni un segundo más, me monte en mi auto y conduje a casa.

En el camino, el insistente sonido de mi celular no cesaba, obviamente no contestaría ya que iba manejando pero no dejaba de insistir, tome en mis manos el celular pero al momento de querer contestar este resbalo de mis manos, intente alcanzarlo sin despegar la vista del camino pero no lograba agarrarlo así que rápidamente me agache para poder recogerlo; en definitiva esa no fue la mejor opción.

Escuché un fuerte golpe y sentí un gran impacto contra mi auto, regrese la mirada al frente y me sentí muy culpable al ver que había atropellado a alguien, muerto de miedo suspire pesadamente y baje a ver como estaba la situación, en ese momento mis ojos podían observar algo que nunca imagine, que jamás pasaría por mi cabeza, y es que esa persona era...era____.

La castaña estaba tirada a mitad de la calle, muy ensangrentada y con su cabello alborotado tapando su cara. El miedo, los nervios, la culpa, la impotencia y todos las emociones negativas que existan invadieron mi cuerpo completamente. Corrí a mi carro para luego tomar mi celular y teclear el número de una ambulancia, en cuanto me dijeron que vendrían para acá colgué e inmediatamente fui a donde ____ se encontraba tirada, por más que me cayera mal, no soportaba verla así, no por mi culpa. Me agache para quedar más cerca de ella y retire el cabello que estorbaba en su rostro.

- Todo estará bien- sollozé- te lo prometo- Deje escapar una lágrima, no podía con esto, ella estaba muy lastimada, ¿ y si le pasaba algo malo? No, no que estoy pensando, eso no pasará, quedaría en mi conciencia y no me lo perdonaría NUNCA.

Escuche la sirena de la ambulancia aproximarse, en cuanto llego hasta nosotros me quite para que pudieran cargarla y recostarla en una camilla y llevársela, en cuanto la ambulancia comenzó a avanzar, yo conduje tras ella. Al llegar al hospital bajaron a ____ y rápidamente la adentraron en el lugar, caminé tras la camilla hasta que entraron a una sala, cerrando la puerta en mis narices y prohibiendome el paso.

Caminé a la sala de espera decidido a llamar a sus padres, para avisarles sobre el accidente, no quería ni imaginar como reaccionarían en cuanto les dijera que su hija, a la cual me pidieron que cuidara, fue atropellada y el que la atropelló fui precisamente yo, pero ahg ¡quien la manda a irse sola y sin avisarme! , solo me dejo esperando como idiota, pienso que por una parte fue su culpa...

Me encontraba sentado junto a sus padres, que ya habían llegado, esperábamos noticias pero no conseguíamos ninguna, solo observaba a doctores y enfermeras pasando de sala en sala, pero ninguno se detenía a explicarnos algo.

Eran las doce de la noche cuando alguien se digno a darnos noticias, un doctor salió de la habitación donde se encontraba ____ y llamo a sus familiares, obviamente yo no estaba incluido, pero me interesaba mucho el estado de ____, yo al igual que los señores Picard nos levantamos de nuestros asientos y nos dirigimos hacia el doctor para que luego este comenzara a hablar.

- Ustedes son los padres de la señorita Picard ¿Cierto? -preguntó el hombre.

- Así es doctor, ¿que tiene mi hija? dijo la madre de ____ en un tono de desesperación.

- Pues ahorita ____ ya esta estable- explicó un poco preocupado, yo suspire con alivio.____ estaba bien!

- Eso es excelente, ¿cuando podemos llevarnosla?-hablo Marco, el padre de ____ .

- Escuche...- respiró pesadamente el doctor al mismo tiempo en el que veía su tabla con los resultados de los pacientes- a pesar de que ella ya esta estable...- volvió a parar, ahora ya miraba a los señores a los ojos, esto estaba comenzando a asustarme.

- ¿Qué ocurre? ¡No se quede callado!- lo presionó su padre.

- Bueno pues...____ no volverá a caminar...no en un largo tiempo- me quede en shock, ____ no caminaría más... por mi culpa!!...

La misma chica (Alonso & tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora