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- Na-nada - dijo la rubia temblando de miedo.
Sí Aquario era terrible sin enfadarse, enfadada era aún peor si cabía.
- ¡No me engañes niña! - dijo la profesora golpeando una de las mesas de la primera fila. Parecía un demonio.
Todos los presentes miraban atónitos la escena que se desarrollaba ante sus ojos.
Aquario se acercó al pupitre de Heartfilia. El corazón de Erza y Lucy iba a mil por hora; en cambio Juvia seguía dibujando feliz en su mundo lleno de Grays sin enterarse de nada.
- Parece que por primera vez que están implicadas Scarlett y Heartfilia Loxar no tiene nada que ver - dijo Aquario con una malvada sonrisa.
Juvia no prestó atención a su comentario y siguió dibujando.
- ¡Juvia Loxar deja de dibujar! - gritó la profesora.
Rápidamente se acercó a Juvia y le quitó el papel en el que estaba pintando.
Se lo enseñó a toda la clase mientras lo observaba detenidamente.
- ¿Qué te pasa con la palabra Gray? -preguntó la profesora.
Lucy, Erza y Juvia palidecieron, sobre todo ésta última. Se oía alguna risa contenida, pero en general todas las miraban estupefactos.
- Eh.. Pues - comenzó a balbucear Juvia.
Aquario arqueó una ceja pidiendo una explicación.
- Juvia no sabía como escribir gris en inglés así que copió la palabra para aprendérsela.
Toda la clase estalló a carcajadas. Todos conocían la relación de Gray y Juvia y lo obsesionada que estaba la de pelo azul con su novio.
Al oír las risas de los alumnos Aquario montó en cólera y mandó a Juvia al despacho del director, nadie se reía de ella y salía de rositas. La peliazul obedeció rápidamente y las risas empezaron a desaparecer.
- En cuanto a vosotras - dijo Aquario de forma amenazadora con un aura oscura al su alrededor señalando con el dedo a Lucy y a Erza.
La rubia y la pelirroja tragaron saliva a la vez. ¿Qué las haría a ellas?
- Dame el papel Scarlett - dijo de forma temible la profesora.
Erza ni se inmutó y no movió ni un sólo músculo pese a que no dejaba de mirar sus ojos.
- ¿Prefieres una visita a dirección y un sms a tus padres? - dijo burlonamente Aquario.
Ante tal amenaza la pelirroja reaccionó enseguida y le tendió el papel. Ese era el único punto débil de Erza, al contrario que sus amigos, ella odiaba llevar notificaciones a casa. Y no por sus padres, sino por su reputación académica.
- Veamos - dijo con una media sonrisa de triunfo Aquario desenrollando el papel.
Lucy y Erza se agarraron de las manos. ¿Esto sería capaz de arruinar su gran plan? ¿Alguien las descubriría?
- "¿Cuándo empezamos la operación GaLe?" - leyó.
La profesora se quedó mirando el papel sin saber a que se referían. La clase se quedó callada sin comprender la clave de Erza y Lucy. Las dos suspiraron, por suerte nadie se había dado cuenta de que "Ga" era de "Gajeel" y "Le" de "Levy"
- ¡¿A qué os referís con vendaval?! -gritó Aquario golpeando la mesa de Juvia. (Gale significa vendaval en inglés).
Erza y Lucy saltaron de su sitio del susto pero ninguna dijo nada. Aquario decidió leer la contestación, para ver si así se aclaraba un poco.
- "Primero debemos conseguir la llave de Cana"
En cuanto terminó de leer la clase explotó en carcajadas. Todos sabían que era la llave de Cana. Este preciado objeto era una llave, y era de Cana, no había que ser muy listo para saberlo, pero lo que tenía de especial es que abría una habitación del instituto donde iban las parejas a hacer sus cosas sin ser descubiertos durante las horas de clases. Cana era la única que poseía esta llave y para poder utilizar ese espacio había que pagarla con alcohol. Cana se encontraba en último año, así que, a menos que repitiera debería pasar ese gran honor a una persona de primero y esa persona decidiría con que había que pagarle y la cantidad.
- ¿Que es eso? - preguntó Aquario.
Las dos chicas palidecieron y la clase entera también, ese era el secreto más preciado del alumnado y quien se atreviese a revelarlo a algún adulto sería castigado duramente por los populares.

Juvia caminaba por los pasillos del instituto, claramente no iría al despacho, sino que buscaría a Gray y a Natsu que andarían por ahí.
Vio una cabellera azabache a lo lejos acompañada de otra rosa y corrió hacia ellas con corazones en lo ojos y gritando "Gray-sama".
Gray la paró en seco y la tapó la boca con la mano de forma algo brusca. La obligó a esconderse con él y Natsu detrás de unos casilleros. Gray soltó la boca de Juvia cuando notó que ésta le mordía.
- Juvia quiere saber lo que ocurre Gray-sama - dijo la peliazul cruzada de brazos y molesta.
"Esa pose es que Juvia está enfadada y cuando ella se enfada es peor que Lucy, aunque no que Erza" pensó Gray mientras un escalofrío recorría su espina dorsal.
- Shhh - dijo Natsu llevándose el dedo índice a los labios.
Juvia miró enfadada a Natsu. ¡Él era siempre al que tenían que mandar callar y ahora le estaba ordenando cerrar la boca a ella!
- Hay alguien dentro de la Habitación Secreta - dijo Gray excusándose.
Juvia enseguida se quedó callada y junto a los otros dos chicos se quedó observando la puerta de la sala.

Tras varios minutos de silencio oyendo gemidos y varias cosas más, Natsu rompió el hielo.
- ¿Y Luce y Erza?
- Estaban en clase cuando Juvia salió. Aquario-sensei las había pillado pasándose una nota.
- ¿Y por qué te han echado? - preguntó Gray con curiosidad.
Pocas veces echaban de clase a Juvia.
- Aquario-sensei pilló a Juvia dibujando el nombre de Gray-sama en un papel - dijo ella sonrojada.
Gray también se sonrojó bastante. Natsu puso los ojos en blanco y suspiró ¿Por qué tenía que estar él a solas con la parejita? Odiaba ser un sujeta velas.
- ¿Te puedo pedir un favor Juvia? -dijo Gray desviando la mirada, su cara era roja, de un rojo brillante que se veía hasta en la oscuridad.
Juvia asintió enérgicamente con corazones en los ojos.
- ¿Podrías dibujar mi nombre como si fuese hielo?
- ¡Por supuesto Gray-sama! - gritó Juvia exaltada.
Natsu se giró y les mandó callar. Pornuna vez no era él quien estaba montando el escándalo. Gray iba a pelear con Natsu, pero Juvia le detuvo.

Unos instantes después los tres observaron a Laxus salir de la Habitación Secreta. Natsu, Gray y Juvia se decepcionaron bastante. Ver a Laxus con Mirajane salir de allí después de haber tenido sexo salvaje no era nada emocionante. No era un cotilleo jugoso.

Laxus indicó a Mirajane que permaneciera dentro y ella le hizo caso sin rechistar.
- Voy a comprobar que no haya nadie por aquí - dijo.
Juvia, Gray y Natsu temblaron de miedo. ¿Qué les haría Laxus si les encontraba? ¿Y por qué el rubio miraba los alrededores para asegurarse de que no había nadie?, es decir, todo el instituto sabía su relación con la mayor de los Strauss, no tenía nada que perder.
"A menos que con quien está Laxus no es Mirajane" pensaron los tres, incluido Natsu.
- ¿Qué hacéis aquí? - preguntó Laxus con su voz amenazadora y con una aterradora aura negra.
Los tres amigos ahogaron un grito, el rubio les había dado un susto de muerte.

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