Intenta experimentar sus propios deseos más allá del estrecho círculo de las relaciones familiares y para ello necesita imaginarse reprimido por los padres, lo esté o no. La fantasía de represión de sus iniciativas es estructurante para su afectividad, que obtiene una base firme para iniciar experiencias adultas. La represión real, por el contrario, coloca al adolescente en una situación de desequilibrio, que puede precipitar prematuramente los talentos del joven en el mundo de los adultos, o bien - operando en sentido contrario - desacreditándolos por completo.
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Adolescencia
NouvellesA partir de este momento, el conflicto se desplaza desde la ambivalencia afectiva a la reivindicación de ciertos derechos personales entre los que destacan las exigencias de libertad e independencia, la libre elección de amistades, aficiones,etc.