Mi pequeño Oiran (Yaoi)

Compromiso.

-Ya entiendo un poco a mis hermanos y mi padre. - La respiración del menor no dejaba de ser agitada, me levante yendo hacia donde guardaban cosas que no muchos decían, sabía que tenía un tipo de puñal, al ver que lo sacaba Goten se puso en alerta. -Tr-Trunks, ¿Qué haces con eso?, no lo debes de traer. - Solo había recortado un poco mi cabello que no me agradaba del todo largo, luego lo acomodaría como era debido pero no había quedado tan mal viéndome al espejo, el pequeño Oiran soltó un suspiro audible de alivio luego de sonreír.

-Pensé ibas a hacer algo extraño, no me asustes de tal manera. - Me dijo tirándose en el futon de nueva cuenta, me recosté a su lado al verlo. -No puede durar la magia toda la noche, ¿verdad? - El negaba alzando la mano y ver aquel anillo que le había dado de pequeño.

-No...Por desgracia, mis hermanos tienen que ver que tal lo hice. - Se me quedo viendo en aquellos instantes lo cual hice un ademan con mi dedo pulgar como diciendo "mal", lo cual hizo que se levantara. -Oye si te di todo lo que querías, casi...Casi yo...- Se teñía de rojo sus mejillas haciendo movimientos infantiles como negando todo lo sucedido, lo calme dándole un beso lo cual hizo que se detuviera.

-No lo hiciste mal, obvio nunca lo vas hacer de tal forma. - Soltaba un largo suspiro luego de abrazarme. -No lo sé, me a gustado estar contigo esta primera vez pero no sé cuánto va durar, quizás alguna vez tenga que hacerlo con un viejo asqueroso, solo desearía pensar que eres tu...Siendo el príncipe puedes venir cada que te den ganas. -

Acariciaba su cabello después de aquello. -Pues a mí también me gusto Goten, pero yo no quiero regresar más. -No era exactamente lo que tenía que decir pues no de esta forma no de venir a follarlo. -Quieres decir que esta va ser la primera y la última...Esta bien, no te preocupes creo que no puede ser lo mismo. - Su tono de voz había cambiado lo cual no me preocupo pero notaba que se había molestado.

-Idiota serás, me refiero que prefiero regresar pero sin ocultar la promesa, te dije que voy a ser rey, según se por parte de papá es que me tengo que casar a cierta edad, eso va ser en febrero antes que los cerezos se pongan y bueno tengo planeado esposarte, la próxima vez no va ser como un oiran...Eso quiero decir. - Me apenaba un poco mientras el menor se echaba a llorar, luego de eso se quedó de golpe dormido, igual trate de descansar.

Al abrir mis ojos ya era muy tarde, muy tarde lo cual solo puse una carta diciendo que lo vería dentro de una semana, con eso de las guerras tenía que ir con cuidado al igual de ocultarme en lugares que no fuesen el castillo, aquellas calles que frecuentaba estaban terribles con habitantes que no comían mucho, niños abandonados mientras que los adultos iban a las guerras era un panorama terrible.

"Deprimente", dije para mí mismo mientras estaba por entrar a palacio, en él se encontraba mi orgulloso padre vistiendo aquella armadura de saiyano, se sentía como pavorreal por su última victoria en tierras, me arrodillaba ante el para que supiera la lealtad que tenía aun siendo su hijo.

-Llegas un poco tarde Trunks; bueno no me puedo quejar al menos has llegado sin daño alguno, supe que la zona por la que llegabas estaba siendo atacada. - Afirmaba antes de contestar. -Sí; padre tuve que defender a mis hombres antes de venir, pero sé que ya es hora de que regresara heme aquí. -

Se notaba que algo no le estaba pareciendo, viendo su cara estaba pensando algo. -Trunks...¿Qué edad tienes actualmente? - Trague saliva ante el cuestionamiento, ¿Qué pensaba? -Tengo la suficiente edad para saber gobernar el país que me heredas, al igual que la madurez para tomar acciones rápidas y seguras como me lo enseñaste de niño. -

El aplaudía ante la respuesta, parecía que justamente eso quería escuchar. -Exacto Trunks, pero repetiré ya que no tengo las intenciones de hacerte rey, oh espera...Creo que puedes serlo de las regiones vecinas ya que estamos conquistando las tierras de Freezer. - Dijo con soberbia lo cual hizo que yo me levantase de golpe.

-¿Lo dice en serio padre mío? - Mi ojos mostraban un brillo sublime al solo escuchar que era como lo planeaba, exactamente mi padre me afirmaba pero las tierras del rey Freezer aún no las teníamos en mano así que no podía confiarme. -Tendrás que irte al campo a dirigir a nuestros hombres, estoy seguro que con tus inventos y tu gran inteligencia vas a poder hacer que desistan. -

Se levantaba de golpe lo cual extendí mi brazo para simular o no querer que se alejara. -Haremos un gran banquete, no te preocupes no morirás también quizás mande a unos soldados de clase baja ya que no hay muchos, se por lenguas de Kakarotto que su hijo mayor tiene mucho poder pero es muy flojo. - Hice una pequeña mueca de impotencia esperaba que no posara su vista en Goten.

-Ah sí...Eso parece excelente idea papá...- Lo cual hizo que Vegeta diera un golpe en uno de los pilares que sostenían el palacio. -Tu carácter tan blando como quien te procreo, no eres bueno fingiendo sobre estas cosas, pero te lo doy por advertido. - Parece que no había marcha atrás sobre ello, lo cual no hice más que retirarme iba a comer pero no de momento ya que sabía que si me veía iba a causar un mal entendido.

Unas horas después Salí a buscar un poco de comida, mi padre estaba aún comiendo de su festín por suerte no estaba ebrio y se debía aquella visita poco esperada, me puse en guardia pues era Freezer y su hijo Zarbon.

-¿Qué hacen ellos aquí? - Dije mientras Freezer solo dejaba salir un ki amenazante, Zarbon hizo intercesión. -Qué bueno que regresas Trunks, voy a hacerte el comunicado que el siguiente año serás comprometido con el hijo del señor Freezer, solo es un acuerdo momentáneo pues la guerra está en su curso. -Mencionaba mientras tomaba unas copas, Zarbon era atractivo pero mi plan estaba teniendo un giro inesperado.