Narra Mía
Mía: ¿Que está pasando afuera, Christina?-estaba preocupada, ya que Chris me llevó a la fuerza adentro y cerró la puerta con todos los seguros asustada.
Chris: Dylan escuchó un ruido y me hizo una seña de que viniera.-me dijo mientras seguía mirando por la ventana, aunque estaba muy oscuro para poder ver algo.- Le avisé a las chicas para que no la dejaran sola, parece que hay alguien asechando.- se levantó del suelo y se sentó junto a mi abrazandome.
Mía: Crees que les pueda pasar algo malo.- pregunté con algo de miedo por las chicas.
Chris: No creo pequeña, ellas saben defenderse muy bien, lo sabes.-me dijo con una sonrisa tranquilizadora, aunque ésta no llegó a sus ojos. Le sonreí de vuelta y miré hacia la entrada, esperando por las chicas.
Luego de casi media hora esperando, las chicas entraron con el resto de las cajas, mientras volvían a cerrar la puerta con los seguros.
Alex: No es seguro salir, no encontramos nada más que un venado corriendo, no sabía que en Montana habían venados, pero se veía muy asustado.- Alex frunció el seño mientras veía a Dylan observando por la ventana.- Tal vez, eran algunos cazadores.- dijo quitandole importancia.
Sam: ¿No crees que si fueran cazadores se escucharían los disparos?- preguntó con obviedad.
Alex: No ayudas cariño, gracias.- se nota que Alex lo decía para no preocuparme, pero no lo lograría, ya estaba demasiado preocupada.
Sam: Sinceramente, fue algo raro, ya que se detuvo al vernos y se nos quedó mirando fijamente por un largo rato, hasta que escuchó, creo que a los cazadores, y siguió corriendo.- dijo Sam algo extrañada.
Alex: Sí, fue raro, pero luego decidimos entrar antes de encontrarnos con los cazadores.- seguía observando cada movimiento de Dylan con el ceño fruncido.
Ésta ya se había movido de la ventana para seguir subiendo las cajas a la segunda planta, donde estaban las habitaciones.
Chris: Vamos, ayudemos a Dyl a subir las cosas, y mañana temprano organizaremos todo.- dijo Chris quien, raramente, había estado callada todo el rato, ella sospechaba algo y no nos quería decir nada.
Alex: Cierto, estamos algo estresadas por el viaje, vamos a dormir y mañana organizamos las cosas.- apoyó Alex para comenzar a subir las escaleras, las cuales chirriaban con cada paso, con sus cajas.- Espero que ésto no ceda hasta que se puedan arreglar.- dijo mientras subía con más cuidado.
Sam: Espero que cuando lo haga seas tu quien esté en ellas.- se burló Sam mirandola.
Alex: Idiota, recuerda que el karma it's a bitch, cariño.- dijo ésta giñandole un ojo y perdiendose al final de las escaleras en forma de caracol.
Sam sonrió y nos ayudó a subir las demás cajas. Yo me encaminé hacia mi nueva habitación la cual estaba en medio de la de Alex y la de Dylan.
Al subir las escaleras, te encuentras con la de Alex a mano derecha, luego va la mía y al final la de Dylan, la cual queda junto a la puerta para subir al ático. A mano izquierda se encuentra la de Sam, luego la de Chris y al final, frente a la de Dylan, está el baño.
En la primera planta están la cocina, el comedor, la sala, un pequeño cuarto de almacen, otro baño y la puerta que da a la parte trasera de la casa, donde hay una pequeña terraza que da hacia un hermoso lago.
Me había tomado la molestia de revisar toda la casa al llegar. Menos el hueco que se encuentra bajo las escaleras, en donde habían varias cajas que no eran nuestras, mañana revisaría que había en estas.
Ahora, me iría a dormir.Llegue a mi habitación, me puse la ropa que mayormente uso para dormir, que cuenta con una camicilla gris, larga hasta medio muslo, unos shorts de medias lunas en blanco y negro, y mis medias de colores.
Me acosté en la mullida cama, pero no podía dejar de dar vueltas, sentía que me estaban vigilando. Me voltee hacia la ventana y sólo se veían las ramas de los árboles moverse por el frío viento de la noche.
Escuché pisadas por la casa y de inmediato supe que no dormiría esta noche en mi habitación...
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Hola, nuevo capítulo. Espero que les guste, comenten y denme opiniones e ideas. No l@s defraudaré.

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Dangerous Demon
Random-¿Por qué nos tratan así, qué les hicimos?- solloza la chica mientras sus hermanas seguían en shock. -Enamorarse de nosotros, cuando les dejamos muy en claro que no les podríamos dar lo mismo a cambio. Recuerden, los demonios no tienen corazón.- dij...