Breves Historias Yaoi

Amor psicópata - Cap. 1

El reloj marca las 20:00 pm, llego al parque y ahí está él esperándome con una gran sonrisa en el rostro.

Mi nombre es Lucas Miller y hace unos meses conocí por internet a un chico, Gabriel. Durante este tiempo hemos estado charlando mucho y nos caímos tan bien el uno al otro que decidimos encontrarnos en un parque para conocernos en persona.

Él sabe casi todo de mí, casi, porque aún no le he contado que tengo una enfermedad mental un tanto extraña.

Narra Gabriel

Estoy sentado en un banco de madera y de repente veo llegar a un joven alto de cabello negro y ojos marrones, igual al de la foto que él mismo me había enviado hace unas semanas por chat.

Me levanto y corro hacia él para encontrarnos en un gran abrazo.

-Lucas, Dios mío, estaba loco por conocerte.

-Yo también mi amor.- Me responde él y nos besamos por primera vez, como hacía tanto tiempo queríamos hacerlo.

Nos quedamos charlando y abrazados en aquel banco por varios minutos, hasta que Lucas me pregunta algo

-¿Quieres venir a mi casa?

-Mmm...- Lo dudo un instante. -Si.- Respondo finalmente con alegría.

Él sonríe y me da otro beso. Nos subimos a su lujoso auto y vamos a su casa.

Narra Lucas

Llegamos y abro la puerta para que pase. Una vez adentro nos empezamos a besar y nos acostamos en uno de los sofás. De pronto siento como Gabriel comienza a desabotonar mi camisa.

-Espera amor, hay algo que debo decirte antes de eso.- Le digo mientras miro fijamente sus ojos verdes.

-Dime.- Dice él acariciando mi cabello.

-No te lo había dicho antes pero, tengo una enfermedad mental que es muy grave según los médicos. No puedo pasar mucho tiempo al lado de una persona, tengo ataques de ansiedad bastante seguido y no son nada buenos, eso sería muy peligroso para ti...

Gabriel solo me mira curioso mientras le cuento esto, pero parece no preocuparle en lo más mínimo.

-Tranquilo- Me habla con ternura. -yo te acepto con todas tus virtudes y defectos, pero si me dejas hacerlo, te prometo que te ayudaré en todo lo que necesites para superarlo.

-¿E-enserio?- Lo miro sorprendido.

-Por supuesto.

-Gracias.- Lo abrazo y beso otra vez. "Lástima que esta enfermedad no tenga cura", pienso un poco agobiado.

Comenzamos a quitarnos la ropa y dejarnos llevar por la necesidad de tener este encuentro que, a pesar de ser la primera vez que nos vemos, tanto deseamos los dos.