La mujer se cruzó de piernas mientras observaba con seriedad el rostro inexpresivo de Jungkook. Llevaban aproximadamente 25 minutos en silencio desde que ella había cruzado la puerta de la habitación de hospital con una carpeta amarrilla en su mano y las gafas deslizándose por su nariz. Lo único que había conseguido de parte de Jungkook era una mirada vacía de emoción y que su cuerpo se irguiera desde la camilla.
.- Soy la doctora Ha Neul – se presentó pero Jungkook no mostró reacción alguna – De acuerdo, estoy aquí porque me han dicho que necesitas ayuda.
Los grandes ojos del menor dieron con la sonrisa ligeramente ladeada de la doctora mientras se mordía el labio. ¿Ayuda? ¿A caso se podía hacer algo por él? Se alzó de hombros como respuesta mientras volvía a clavar sus ojos en la pared tras la mujer, sin el menor ánimo de recibir su "ayuda".
.- No me importa si la quieres o no, Jungkook – abrió la carpeta con ligereza y con una pluma negro comenzó a escribir, el menor sólo volvió a dirigir su mirada sobre ella, sí no le importaba si él quería o no ayuda, ¿qué hacía ahí? – Estoy aquí porque tras esa puerta he hablado con seis chicos desesperados porque estés bien.
Entonces lo consiguió, obtuvo su atención. La postura de Jungkook se transformó por completo, se había encogido sobre su cuerpo, como sí tratasen de tocarlo y él sólo se resistiese. Se mordió con más fuerza aún el labio inferior y clavó sus ojos en la mirada penetrante tras las gafas. La mujer sólo ensanchó su sonrisa y siguió escribiendo.
.- Entonces, esto es lo que haremos – mencionó mientras se levantaba y se sentaba junto a él en la camilla, Jungkook sólo retrocedió un poco, evitando el contacto – Nos veremos una vez a la semana y superaremos todo esto en menos de lo que piensas. Y lo harás por esas personas afuera de esta habitación que sólo piensan en verte sonreír, ¿estamos de acuerdo?
¿Eso era lo que él quería? ¿Volver a sonreír? ¿Regresar a ellos? La voz grave de V inundó sus oídos de nuevo, trayendo consigo el pedido desesperado que le había hecho su hyung a través del teléfono. Y Jungkook no quería nada más que eso, llegar hasta ellos y que no lo abandonasen pero ¿lo merecía? ¿Merecía el amor de esas personas? ¿Podría ofrecerles algo más allá de un cuerpo roto y un alma desvalijada?
.- No importa si lo mereces o no, Jungkook – la mujer le sonrió, una sonrisa a las anteriores, una sonrisa cálida – Ellos no quieren al viejo Jungkook, quieren al Jungkook que es fuerte y pudo con esto. Están ahí para que te apoyes en ellos.
Las lágrimas se acumularon tras sus párpados mientras se encogía aún sobre sí mismo. Estaba seguro que él no merecía aquel amor, ni apoyo de parte de ninguno de ellos. Ellos no lo sabían, no tenían ni idea de lo que le había hecho, de lo que había tenido que callarse. Sí lo supieran no lo querrían. ¿Quién querría a un juguete sucio y usado?
.- A mí también me hirieron en el pasado, Jungkook – le contó ella con voz baja, como si fuese un secreto – Como a ti, me dañaron profundamente – se ladeó con ligereza mientras se bajaba la blusa a la altura del hombro derecho, mostrándole el tatuaje de un diente de león que pretendía esconder una cicatriz – Comprendo mejor que nadie el dolor y la rabia, más aún, el miedo que te carcome por dentro.
La mujer se sobresaltó al sentir la mano delicada del menor acariciar con la yema de los dedos el tatuaje sobre su hombro, como sí se tratase de algo extremadamente frágil. Jungkook dejó correr las lágrimas mientras observaba la imagen sobre la piel de la mujer. Siempre había amado los dientes de león pero en ese momento aquel dibujo de tinta negra pareció convertirse en su bote salvavidas.
.- Lo haremos juntos, ¿está bien? – Ella volvió a sonreír cuando alejó su mano sin ninguna intención de detener su llanto – No me interesa saber los detalles de lo que has pasado, a menos que tú desees contarme. Sólo me interesa lo que pasará a partir de este momento.
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Prueba de sonido.
RomanceJungkook ha sido herido incontables veces. Herido, humillado y maltratado. Le han obligado a desprenderse de todo. Incluida su voz. Pero ahora han venido a su rescate. Seis chicos. Uno de ellos, quiere también su corazón. Contenido sexual explícito...