Epílogo

15 0 0
                                    

Pienso que cuando todo termina todo vuelve en flashes, ¿sabes?. Es como un caleidoscopio de recuerdos, siempre todo vuelve, pero él nunca lo hace.
Creo que una parte de mí supo en el momento en que lo vi que esto pasaría.
< -¿Estás loca o algo parecido? ¡Te podría haber matado!- me dijo mirándome con esos ojos azules que recién conocía, pero que sin duda los volvería a ver en algún momento.
- ¿Ahora soy yo la que tiene la culpa? -dije mirándolo enojada- si tu no sabes conducir como gente normal no es mi problema.
El rubio me miró enfadado y se subió a su coche y se fue, sin decir mas nada, dejándome una vista del océano en Santa Bárbara.>
No es algo que dijo o algo que hizo.
Era la sensación que lo acompañaba,  y, la cosa más loca es que no sé si me voy a volver a sentir de esa manera.
<Niall me tiró al sillón y siguió haciéndome cosquillas.
-Para de una puta vez James! -dije riéndome fuerte.
-¿Cómo me llamaste? -dijo sonriendo mostrándome sus hermosos y blancos dientes- no te atrevas a llamarme así nuevamente. Sabes que no me gusta.
-James -dije sonriendo y desafiándolo- James James James.
-Tu decidiste esto -mira mis labios y luego estira una pequeña sonrisa.
Niall posa mis labios contra los suyos, hundiéndonos en un romántico y pasional beso, y haciendo que mi estómago diera incontables vueltas.>
Pero no sé si me convendría.
Sabía que su mundo se movía demasiado rápido y que quemaba demasiado, pero simplemente pensé, ¿cómo puede el diablo empujarte a alguien que se parece tanto a un ángel cuando te sonríe? Quizás él lo sabía cuando me vio.
<-Soy tu puta novia ¡tendrías que confiar en mi!
-Si eres mi puta novia tú tendrías que confiar en mi y saber que no haré nada que te lastime -Niall patea la pequeña mesa de madera que teníamos en nuestro nuevo departamento.
-¡Te odio! Eres un maldito dolor en el culo -lo empujo contra la pared más cercana a la puerta.
Niall sonríe derritiéndome por dentro y me agarra de la cintura, acercándome a el- parece que mi muñeca ahora sabe pegar.
-Eres un idiota -abro la puerta y me voy del departamento, dejándolo solo a el y a todas sus mierdas atrás.>
Supongo que simplemente perdí el equilibrio. Creo que la peor parte de todo no fue perderlo a el, si no fue perderme a mí misma.
<-Mañana me voy- entra a mi habitación hablando en voz baja.
-A donde te iras? -lo miro con un nudo en mi garganta, y en mi corazón.
-Lejos de toda esta mierda, de ti, de nosotros -me mira con sus ojos azules tristes.
Asiento, dejándole saber que no tenía palabras para decir. Las lágrimas comenzaban a caer por mi rostro, dejándome saber que mi mundo también acababa de caer.>

{everybody needs someone around} nh.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora