Capítulo 6.

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¡APROBÉ CIUDADANÍA! TERMINÉ LAS CLASES Y YA PASÉ A 4TO. AHORA TENDRÉ MÁS TIEMPO PARA ACTUALIZAR, GGGGG (ok, me calmo).

Bueno, como lo prometí, aquí les traje el capítulo 6. Que lo disfruten♥...

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Estábamos en el auto, de camino al velorio del padrastro de Julianna. Steven iba conduciendo, Julianna iba en el asiento pasajero, y yo estaba en los asientos traseros, luchando por no dormirme, ya que el suave ronroneo del auto hacía que mis ojos se cerraran solos, como si tuvieran vida propia.

Mientras Steven conducía, le preguntó a Julianna cómo es que pasó lo de Robbert.

—Sufrió una muerte súbita, según mamá —dijo Julianna, y suspiró—.

—¿Cómo es posible? Estaba de lo mejor la última vez que lo vimos —decía Steven, todavía sin poder lo que Julianna le está diciendo—.

—La muerte súbita es así. A cualquiera le puede agarrar cuando menos se lo esperen.

—Dios mío... —Steven suspiró—. ¿Dónde es el velorio? Me olvidé.

—En la Sala de Velatorios del Centro —le respondió Julianna—. Todavía me parece raro que no hayan hecho el velorio en una iglesia. Todos allí son muy religiosos.

—Eso mismo me preguntaba —decía Steven—. ¿Llamaste a Jev?

Jev.

¡¿Quién diablos es Jev y por qué todos los conocen y no me dicen quién diablos es él?!

—Lo llamé unas tres veces, pero no responde —dijo Julianna—. Debe estar durmiendo o estudiando. Mañana tiene un examen importante y no puede reprobar.

—Cierto —respondió Steven—.

—¿Quién es Jev? —pregunté antes de que pudiera siquiera cerrar mi bocota—.

Steven estacionó a un lado de la acera, y miró a Julianna. Ésta asiente una vez, y me miran al mismo tiempo.

—Tu hermano —dijo Julianna—.

¿Así que ése tal Jev, del cual todos hablan y del cual aparece vagamente en mi mente, es mi hermano, del que Kim me habló, quien también es su "hermano-conocido-amigo"?

—Wau —sólo pude responder eso—.

—¿En serio? Después de lo que nos costó decírtelo, ¿sólo respondes eso? —pregunta Steven, medio sonriendo—.

—¿Qué quieren que responda? —dije entre risas, encogiéndome de hombros—.

—Ok, tendremos más tiempo de hablar otro día de eso. Mamá me está llamando —decía Julianna mientras rodaba sus ojos y salía del auto—.

Steven la siguió, y yo a ellos. Steven y yo dimos un portazo al mismo tiempo en que caminamos por un caminito de mármol que nos conducía hasta unas enormes puertas de cristal. El lugar estaba cubierto por enormes rectángulos de cristal, lo que se podía ver a todas las personas vestidas totalmente de negro que estaban allí dentro del lugar.

Julianna entró primera. Seguido de ella, entró Steven, y luego yo. Cerré con cuidado la puerta, y caminé rápido hacia Steven y Julianna al ver que ya estaban muy alejados de mí. Al momento en que ya estuve junto a ellos, Julianna se acerca hasta una mujer y la abraza, y la segunda se pone a sollozar en su hombro. Steven se acerca hacia ellas y acaricia el hombro de la mujer, murmurando un suave "Lo siento" con los labios, lo que ya pude sospechar que aquella mujer se trataba de la madre de Julianna.

Amnesia. «Muda 2».Donde viven las historias. Descúbrelo ahora