Once (Final).

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Viajar en un tren popularmente es catalogado como ''incomodo'' y ''desagradable'', sin embargo, viajar con Yeray había vuelto amena la situación. Eso me recordaba que en cada estación las personas se aglomeraban para así brindar más espacio a las que entraban. Aunque sentir esa respiración en mi cuello proveniente de un desconocido le causaba gracia a Yeray, olvidaba como podía comportarse tan fuera de lugar, supongo que eso es algo que me gusta de él.

Estación a estación íbamos escalando por las vías subterráneas esperando a nuestro destino, el cual en este momento no sabía cuál era. Sin darme cuenta de lo ocurrido tomé en tren de la línea dos, en vez de montarme en el de la línea ocho, no obstante, Yeray de igual manera había tomado el equivocado, ¿No?

—Yeray, ¿A dónde va este tren? —pregunté con cierto titubeo en mi voz, era la primera vez que me equivocaba en el tren.

—Los dos nos equivocamos de tren —respondió con una pequeña risita.

El cambio de línea había sucedido hoy, y efectivamente este tren iba a un sitio desconocido de la ciudad por los dos, espectacular.

—Muy buenos días tengan señores pasajeros, el día de hoy les vengo a vender unos collares artesanales por un módico precio —decía el vendedor ambulante.

Pensándolo bien, en cada estación un vendedor ambulante se hacía presente, unos vendían comestibles, otros rosas y ahora collares. No le tomé importancia como el resto de los pasajeros y seguí admirando los rostros amargados.

—Para ti —Yeray depositó uno de esos collares artesanales en mi mano.

Para visualizarlo mejor no me costó mucho a Yeray, con tan solo admirarlo se dio cuenta que era Plutón, su favorito.

Lo coloqué en mi cuello justo cuando la última estación se anunció, nos bajamos con rapidez dejando el vagón vacío.

—¿Y ahora? —resoplé mirando a varias direcciones en busca de la salida.

—Te traje algo —soltó de repente atrayendo mi atención.

De su bolso sacó dos libros, estaban en perfectas condiciones y sus portadas brillaban como nunca. El primero tenía como nombre ''Visto'', y el segundo ''200%''

Me extrañó totalmente ver aquello, ya que nunca había oído de ellos, deslicé mi manos sobre los dos, me decidí por ojear ''Visto''. Visualicé la primera página, y al no esperármelo, una serie de mensajes aparecieron en la misma.

Los personajes tenían nuestros nombres, y si lograbas ver más adelante, también el de nuestros amigos en común, reí al ver algunos de nuestros mensajes incluidos allí.

Tomé asiento en el piso de la estación disponiéndome a leerlo, tampoco es que fuera tan largo. Como ya lo había mencionado, varios de nuestros mensajes estaban presentes allí, pero del resto no tenía consciencia de haberlos escritos, el vaivén que suponía cada mensaje me llevó al final en cuestión de minutos. ¿A quién se le ocurre terminar un libro así?, cerré el libro con indignación.

—Si quieres la segunda parte —me ofreció ''200%''.

Sin dudarlo dos veces, se lo arranqué de las manos. Estremecerme fue lo poco que pude hacer cuando algunas nuestras cartas se fijaron en las hojas para nunca abandonarlas, ¡Qué vergüenza leer aquello!

Haciéndole gala a mi vergüenza, seguí hasta llegar a la última página, una carta que recuerdo muy bien, donde él me había pedido noviazgo.

Estaba absorta de la situación, y él lo había captado cuando sus labios chocaron los míos, aún producía la misma sensación del primer día pues, todavía me abochornaba que él tuviera que tomar mi rostro entre sus manos para evitar que yo saliera corriendo del beso.

—¿Por qué este aún no tiene un final? —señalé el libro que acababa de leer.

—Porque sigues siendo mi novia —afirmó.

Tardé en comprenderlo, pero él terminaría 200% al mismo tiempo en que nosotros termináramos nuestra relación. Qué curioso, ¿no?, él había fabricado cada palabrita para que tomara sentido con nuestra relación como amigos y novios.

Tal vez Yeray no es tan tonto como se ve, al menos aprendió a escribir ''en serio''.


N/A:

El primero que escriba ''no entiendo'' es al primero que voy a banear, ahque.

No creo que sea muy complicado de entender, pero vengo a pedir disculpas (nuevamente) por la tardanza, seguiré y espero que me sigan leyendo en mis otras historias.

Hasta luego:)

200%Donde viven las historias. Descúbrelo ahora