Capítulo 14

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Hay una persona en la que a pesar de nuestra diferencia de edad, confío mucho. Alguien que se ha ganado mi cariño a pulso siendo completamente ella. Alguien del quién no consigo hablar sin emocionarme y con la que he pasado grandes momentos. Esa persona es una chica, llamada Naia.
Antes de hablar de ella, hablaré de mi tío. La persona que hizo que la conociera. Mi tío ha hecho de padre durante la temporada que mi madre estuvo sola. Prácticamente desde siempre. Venía a visitarnos a mi hermana a mi madre y a mi muy a menudo. Siempre nos ha apoyado y ayudado con todo. Le quiero un montón, a pesar de que haya cosas que hace que no me gustan. Una de ellas, dejar escapar a una chica que no encontrará en ninguna parte del planeta.
Naia fue especial desde el primer día que la conocí. Quiso ser amable conmigo ayudándome a hacer una riquísima tarta. Y a partir de ahí, comenzamos a contar nuestras cosas y lo que más nos gusta hacer. Compartimos chistes, risas, vimos películas juntas, comidas familiares, momentos en los que podría describir de los más divertidos de mi vida. Adoro las fotos con ella, porque me basta solo con verlas para que me venga a la cabeza su dulzura. Todo lo que hace tiene su lógica, y es capaz de contarme historias de su vida que me dejan totalmente sin palabras.
Hoy en día, sé que ya a penas la volveré a ver. Y es algo que me está haciendo sufrir bastante... Ella para mi era una amiga, la tía más especial que podría tener nunca. De verdad creo que me ha marcado mucho y jamás me olvidaré de ella.
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Capítulo dedicado a una mujer luchadora, dulce y ciudadana ejemplar. Te quiero Naia ♡
Y también a mi tito Salva que le quiero un montón. Besos desde aquí!

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