Vuelve a ver

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Que indolentes que somos,

crueles con nuestro corazón, alimentando  sentimientos nocivos,

nos empalagamos en la mugre del pecado,

conviviendo es sus entrañas, sin renunciar corrompiendo vidas,

ahí sentimos ser gratos consigo mismo buscando la felicidad egoístamente.

Levanta los ojos mira donde estas

que hay en tus manos,

solo dolor y lágrimas

ve los llantos de tu madre

que paso con tu corazón

encegueciste o te robaron.

Levántate no mires atrás

solo levántate y cruza las tinieblas,

veras la luz de tu salvación,

lava ahí todos tus trastes

que el pecado dañó

no te resistas a volver a ver

la gloria de Dios, se feliz y libre





CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora