Apunte la cámara a nosotros mismos, como rara vez hacia, sonreí y saque la caja donde guardaba las fotos mientras la vieja Polaroid sacaba la foto impresa lentamente. Ed sonrió.
-me gusta que salgas en las fotos.- dijo con su particular voz. Desde que Ed y yo salíamos él insistía en que tuviéramos fotos juntos. "En las fotos no pasa el tiempo" me explico cuando le pregunté la razón. "Allí no pasa nada, el mundo sigue intacto, eso es lo que más me gusta"
-a mí no.- dije mientras guardaba la foto en la caja donde abundaban más las fotos de él solo que de los dos juntos. Noté que su cabello negro resaltaba con el mío zanahoria.
-América.- dijo él fingiendo el tono de regaño.- mereces salir en todas las fotos del planeta. Así de simple.
Reí. Ojalá hubiera reído así siempre, como en una foto.
•••
Ed y yo terminamos en ese mismo parque seis meses después. Solo recuerdo a ambos gritando y recriminando todo. Primero me decía a mí misma con seguridad que él vendría y volveríamos a ser felices otra vez. Pero pasó un largo mes, y yo perdía esa confianza.
No llore, al menos no demasiado, no llame a mi mejor amiga para decirle lo patan que era Ed. Solo tome un luto de la fotografía.
