Capítulo 29: Malas noticias.

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No supe como, pero desperté en una cama del hospital junto a mamá, con los médicos observándonos a ambas, lo cual era raro.

-¿Está todo bien?
-Señorita Presley, necesitamos que responda unas preguntas con la psicóloga.
-¿Yo, por qué?
-Creemos que puede sufrir algún trastorno mental.   
-¡ES IMPOSIBLE, YO ESTOY SANA!
-Cálmese, es por las dudas.
-Mmmh, esta bien, pero no quiero que mamá se entere.
-De acuerdo.

Deje a mamá dormir mientras fui a la sala donde la psicóloga atendía a sus pacientes, mi primer pensamiento fue "¿Aquí viene mamá 5 veces por semana? Que lugar más apagado" creía que los psicólogos te hacían sentir mejor, esta consulta no lo hacía muy bien su trabajo. Miré a la mujer sentada que asumí sería la psicóloga, seguramente había egresado de psicología como máximo hace 5 años.

-¿Eres la hija de la Señora Presley?
-¿Eres la psicóloga?
-Creí que eso era obvio.
-Cuando tienes como 5 años más que yo, no tanto.
-Siéntate por favor.

Sabía que había sido descortés con mi respuesta, pero algo en ella no me agradaba, me hizo alrededor de 100 preguntas donde de veían varios aspectos de mi personalidad, al finalizar comentó que sospechaba de una posible depresión, lo cual ponía en duda el diagnostico de mi madre y si su depresión era a causa del accidente y la perdida, que sería lo que yo tendría o que de todos modos ella tendría depresión con el transcurso de los años, lo cual convierte la enfermedad en hereditaria.

-En unas seis horas estarán los resultados, puede venir a buscarlos cuando quiera.
-Me quedaré aquí con mi madre.
-Esta bien, se los iré a dejar.
-Muchas gracias.

Fui al comedor por algo de comida para mi y mamá, tome dos tazas de chocolate caliente más algunos muffins, sabía que mamá era más de cosas saladas, pero no había nada aparte de ensalada, así que tome dos y fui a su habitación, pusimos un canal de películas y nos acostamos juntas. 

-¿Qué pasa bebé?
-Ni siquiera me ha llamado...
-Es un idiota.
-Creí que era el indicado...
-Mi niña, aún no llegas ni a los 25, a tu padre lo conocí después de la universidad y antes de él creí haber tenido dos muchachos que creía eran el indicado.

Era la primera vez en años que mamá hablaba de papá sin desmoronarse y romper en llanto, era un gran logro.

-Quizás tengas razón.
-Quizás la tenga.

Seguimos viendo películas al azar hasta que sentí a mamá roncar, estaba cansada así que me di unos minutos a mi misma para dormir, no sabía cuanto tiempo había pasado, pero sentía alguien hablarme mientras movía mi brazo.

-¡¿QUÉ?!
-Emm, señorita Presley la psicóloga viene hablar con usted.
-¿Qué paso?
-Alison, ¿Alguna vez has actuado de manera agresiva ante situaciones normales?

Pensé en las veces que mujeres se le acercaban a Zedd, como destruí el casillero de la pobre mamá soltera, como la eche de mi apartamento al verla en mi sofá con mi novio, como calle a cada compañera de instituto que me llamaba zorra solo por conseguir lo que ellas no... y sí, quizás si lo hacía.

-Quizás, ¿Por qué? 
-Tienes trastorno de la agresividad y algunos síntomas de bipolaridad aunque no es seguro.
¿Bipolar, yo, era broma, cierto? Jamás me he comportado de tal manera como para demostrar ser bipolar, lo de agresividad realmente era inútil negarlo, sabía que era casi cierto.
-Necesita tratamiento.
-¡TRATAMIENTO MIS PELOTAS, ESTOY SANA! No tomaré medicina innecesaria, ahora me voy, sigan cuidando a mi madre.

Tomé mi bolso y las llaves de mi auto, me dirigí al apartamento con la esperanza de ver a Zedd en él, las cuales murieron en el momento que entre y estaba completamente vació... al igual que yo. Fui a la cocina y preparé café con unos waffles, mientras cambiaba mis ropas por una camisa de Zedd que tanto amaba, aún tenía su olor, me recosté y pensé.

Busqué mi teléfono y supe por que no había recibido las llamadas de Zedd, estaba sin batería, lo cargué y cuando prendió pude ver 100 llamadas perdidas, 56 eran de Brook, 39 eran de Theo, 3 de Ambar y las ultimas dos eran de compañeros del instituto que necesitaban alguna tarea, Zedd ni siquiera llamo y había desaparecido por 3 días, fui a Whats App y la mayoría de los mensajes era de Brook, comencé a leerlos.

"¡Hey chica! Vi a Zedd con mamá solitaria, ¿Está todo bien?"

"¿Por qué no has venido a clase?"

"¿Tú y Zedd están bien, es normal verlo con ella otra vez?

No había necesidad de preguntar quien era ella, sabía que hablaba de la mamita indefensa, seguí leyendo.

"¿Han terminado o debo matarlo por engañarte delante de todos?"

"Chica, han pasado dos días y no se nada de ti, ¿Estás bien, por qué Zedd me evita y pasa tiempo con ella, es su nueva obra de caridad?

Sabía que la situación no era la adecuada, pero reí, Brook era mi mejor amiga hace pocos meses y aún así hizo exactamente el mismo comentario cruel que yo sobre Zedd y la bruja esa.

"Dime por favor que han roto o lo mataré"

"Chica este es el tercer día que no vienes y Zedd esta de la mano mientras carga el bolso de bebé y ella al pequeño ¿Qué se supone que está pasando?

"¿Lo mato por ti?"

"He ido a tu apartamento todos estos días y no respondes, si estas ahí, sal."

"Acabo de terminar mi ultimo periodo de clases, Zedd va en su auto con mami indefensa a quizás donde y yo donde ti, espero hoy si estés"

Zedd había pasado sus días con ella y ni siquiera se preocupo por mi, no llamo y no supo lo mal que lo he pasado, sabía que llorar no era la solución, pero también sabía que esta era la segunda vez que mi corazón se rompía y por la razón más idiota, amor juvenil, yo elegí esto, por algo invente las reglas, para evitar esto, vi a mis ex mejores amigas en esta situación y quería evitarlo, creí que Zedd era diferente y al parecer era igual que todos, me quede en cama, llorando por el hombre que amé y me dejo, esperando que mi mejor amiga llegará.

Broken rules ¡CANCELADA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora