Broken rules ¡CANCELADA!

Capitulo 2: El chico nerd.

Estábamos por cerrar el año, quedaba solo un mes y la semana entrante serían los exámenes finales, luego solo iríamos por nuestros amigos y la graduación.
El viernes por la tarde al salir de la escuela vi a Zedd es mi compañero en Matemáticas, tiene sobresaliente en todo, mis notas están en segundo lugar por el, usa lentes y camisas dentro de los pantalones más unos suspensores, creo que lo más sexy sería ese gran trasero, quizás, solo quizás sería bueno en la cama... Después de todo sin esas gafas era bastante guapo...
-¡Hola Zedd!
-Eh... hola, Alison. -su nerviosismo se notaba a kilometros de distancia-
-Quería saber si podrías ayudarme para el examen final, ¿Puedes venir hoy a mi casa? Estaré sola...
-¿A que hora quieres que este po-po-por ahí? -dios esto era increíblemente tierno y divertido-
-Te espero a las 7 en mi casa, es en el condominio nuevo, la última casa. -le guiñe el ojo y me fui-
Sabía que llegaría puntualmente a las 7 seguramente estaba bastante impresionado por mi invitación, el sabia que mis calificaciones eran excelentes, pero si algo íbamos a estudiar era la anatomía, llegue a las 4:45pm a mi casa, me duche, me prepare mental y físicamente para lo que se vendría esta noche, busque una blusa escotada y una falda de pretina alta y vuelo suelto, unos tacones negros y un poco de rimel. ¡Zedd se volvería loco! Mientras pasaba la hora hice una pequeña cena para dos, Lomo dorado con espagueti y salsa de tomate en su alrededor, no era nada sofisticado pero me gustaba, tome un libro de mi estantería y así pase el rato hasta que el timbre sonó.
-¡Hey viniste!-dije mientras le daba un casto beso en los labios-
-¡Woouh! Eso fue... Fabuloso.
-Vamos pasa.
Me senté a su lado y el comenzó a sacar libros de su mochila, ¿De verdad creía que esrudiariamos? Era más que obvio que tenía otras intenciones... A menos que... Quizás si sea virgen, vamos a tener que enseñarle un poco.
-Bueno, empezaremos con funciones cuadraticas.
Cerré el libro en sus narices y lo mire seductivamente y se puso nervioso, lo veía en su mirada. No sabía como tratar con el, los vírgenes solían ser algo lentos y torpes, aun peor hace años que no trataba con uno, pero Zedd lo valía.
-¿Que tal si comemos algo primero?
-Esta bien.
Traje dos platos y serví la comida, al parecer estaba buena pues Zedd se la devoró en menos de 10 minutos, yo por mi parte me tome mi tiempo comiendo sexymente cada bocado de pasta que ponía en mi boca, por debajo de la mesa comencé a acariciar la pierna de Zedd con la mía, amaba la mirada que tenía cuando estaba apunto de acariciar su intimidad, hasta que lo hice y si que me sorprendió, estaba erecto y se notaba un gran bulto lo que me motivo aun mas.
-¿Qué...qué... Estás, estamos haciendo?
-Hablas mucho, no creerás que realmente íbamos a estudiar ¿O si?
-Eso dijiste. -quise reír pero sería muy cruel y arruinaría el momento-
Me levante de mi silla y me acerque hasta su lugar, comencé hacer caricias en su cabello y luego lo bese, jugue, mordisquee, succione, hice de todo con sus labios, pero el no hacia absolutamente ¡Nada! Tome sus manos y las puse en mi trasero.
-Tócame niño bonito, se que quieres hacerlo.
Y mágicamente sus manos se movieron velozmente en mi trasero, tenía una habilidad increíble, solo había una persona que me tocaba así, corrí la silla hacia atras y me senté en su regazo. ¡Dios, sentía toda su erección en mi intimidad! Estaba dura y quería verla. Hice pequeños movimientos sobre el y comenzó hacer una especie de ronroneo que solo me éxito mas, inesperadamente bajo su bajo hasta mis bragas y introdujo un dedo en mi intimidad, acaricio con temor de ser reprimido, pero al ver que no me opuse, masajeo mi clítoris en circulos, luego le dio unas pequeñas palmadas lo que me hizo gemir, introdujo uno de sus dedos sin el mínimo aviso y con bastante brusquedad, pero me fascino, me gustaba que el sexo fuera duro.
-¡Oh mi dios, eres increible! -gemí sin discreción alguna-
Ya no podía más necesitaba tenerlo dentro, con fuerza de voluntad salí de su regazo y corrí su silla hacía un lado, me agache y tome el cierre de sus pantalones, lo hice levantarse y los baje con máxima rapidez, usaba boxer ajustados, y se veía un gran bulto, como esperaba, los baje y  fue tal como lo esperé, gigante, grande y muy duro, sabía que era primerizo pero no me contuve y lo introduje en mi boca, era dulce, exquisito, al principio se sorprendió pero luego movía mi cabeza más y más a fondo, para que entrará completamente, sabía que si seguía se iría en mi boca y eso nos fascinaría a ambos, lami, mordí, succione, hice todo con su delicioso pene, cuando sentí sus piernas endurecer sabía que vendría, abrí aun mas mi boca y cuando eyaculo saboreé hasta la ultima gota y luego trague.
-Eso fue...¡Wooouh! Nunca me había sentido así.
-Ahora sientate.
Hizo lo que ordene, volví a su regazo ahora sin bragas ni falda y hice sexys movimientos sobre su grandioso pene, que en menos de 1 minuto volvió a estar erecto, lo masaje con las manos y lo mire a los ojos
-¿Quieres hacer esto? -No sabía por que se lo había preguntado normalmente solo lo hacía y ya, pero quizás el guardaba su virginidad a alguien especial.
-¡Seguro como el demonio, solo hazlo!
Y caí sobre el, sintiéndolo completamente, fue increíble, comencé con movimientos lentos y luego el tomo el control de la situación, me sostuvo en su brazos y me coloco en la mesa, ahí fue donde comenzó la acción, se movía como un Dios, cada vez con más rapidez, era increible.
-¡Oh nena esto es asombroso!
-¡Más duro, más duro, Zedd!
-Como tu quieras.
Y hizo exactamente lo que le pedí, cada vez con movimientos más duros y fuertes, iba a volverme loca, esto si era estupendo. Iba a correrme, estaba a punto, pero quería más y quería que nos fuéramos juntos. Comencé a temblar, quizás el no sabía lo que pasaría ahora, nunca había visto a una mujer tener un orgasmo y menos provocado por él mismo. En menos de 5 minutos ambos estábamos llenos de sudor, temblando a punto de tener un orgasmo místico.
-¡Zeeeedd!
-¡Si nena, si! -gritamos al mismo tiempo, habíamos tenido un orgasmo juntos-

Luego de ese grandioso sexo, lo repetimos tres veces más, le enseñe el placer que podía darle a una mujer con solo tocar y lamer sus pechos, lo que fue increible, jugo tanto con mis pechos que llego a dejarlos sensibles y provocó otro orgasmo en mi, también tuvimos sexo en mi cama, luego le mostré una que otra postura que otorgan más placer y aproximadamente a las 5 de la mañana caímos en un cansancio extremo luego de 5 orgasmos, ambos dormimos plácidamente hasta la mañana siguente. Al despertar él ni estaba en mi cama, lo que por un momento me alegro, se había ido, me ahorraría bastante charla, pero cuando baje lo vi preparándome el desayuno, lo que fue un completo desastre, esto fue algo de una vez, no podía tener sentimientos hacía mi, pero había preparado Waffles, tocino y café con leche, no podría rechazarlo, aunque anteriormente si lo había echo.
-Hola, pensé en darte el desayuno antes de irme, mamá me matará por no llegar, pero valió la pena. -Sonrió de oreja a oreja-
-Muchas gracias, huele delicioso.
-De nada, espero te guste.
Tomamos desayuno en silencio, luego lave los platos sucios mientras en tomaba una ducha y se arreglaba, quería entrar a la ducha con él y repetir lo de anoche pero eso seguramente empeoraría todo, debía mantener mi mente ocupada para evitar pensar en el Dios griego que tenía en mi habitación. Ordene el comedor, cambie el mantel, ya que sería bastante poco higiénico mantenerlo ahí, aunque me traería estupendos recuerdos, sabía que este nerd tenía potencial pero no creí que tanto.
-Bueno es hora de irme.
-Hasta luego, Zedd. Debo admitir que estuvo increible, pero fue algo de una noche, ¿Lo sabes verdad?
-Lo supuse, pero si quieres repetirlo, sabes donde buscarme, adiós, Alison.
-Adiós, Zedd.