Capítulo 3

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Abro la puerta y me encuentro con Camila sentada en su cama usando su computadora y escuchando música a todo volumen en sus audífonos. No se da cuenta de que entro a su habitación así que me acerco a ella, cuando estoy de frente a ella noto que tiene un ojo morado, le sale un poco de sangre del labio y tiene un gran golpe en la cien derecha el cual no alcanzaba a ver porque su pelo se la tapaba al verla de perfil. 

- ¡Camila! ¡Que demonios te paso?! – Le grito.

Camila se asusta y casi tira la laptop de la cama, al verme su mirada parece horrorizada, se quita los audífonos y baja la mirada un momento, luego me vuelve a ver y veo que sus ojos están llorosos.

- ¡Qué te pasó Camila! – le exijo una explicación.

- Nada Lauren lo de siempre, que quieres que te diga... – Me dice triste.

Noto que tiene un nudo en la garganta y esta apunto de llorar lo cual no quiero que pase por lo cual decido acercarme a ella cuidadosamente y sentarme frente a ella en su cama. Levanto una mano para acariciarle el golpe en la sien.

- Quiero que me digas quien te hace todo esto Camila, no puedes dejar que te sigan maltratando así, antes solo te tiraban comida pero los golpes... ya es mucho. – Le digo.

- No puedo Lauren, ya te lo he dicho. – Me dice apenada.

Bajo la mano de golpe y siento la ira recorrer mi cuerpo. ¿¡Porque no me puede decir simplemente quien es!?

- Lauren por favor no te enojes... Te estas poniendo roja... – Me suplica.

Al verla a los ojos noto el temor y la tristeza en su mirada y me trago mi enojo y las palabras que le quiero gritar. Suspiro.

- Solo quiero que todo esto pare. – Le tomo una mano – No me gusta verte sufrir.

- Yo también quiero que pare pero que le voy a hacer.

- Decirle a alguien. – Digo intentando aun que se abra a mi.

Camila se queda en silencio.

- ¿Como esta tu trasero? – Le pregunto recordando su salida de la escuela.

Mila me mira confundida y en shock.

- Te vi saliendo de la escuela, vi que te caíste, quería ver si estabas bien, por eso vine. – Le informo.

- ¡AY NOOO! ¿¡Viste eso!? – Asiento y me dan ganas de reír al recordar su caída pero noto como poco a poco se ruboriza y se cubre la cara con las manos por lo cual intento contener mi risa. – Estoy bien gracias. – Dice, noto que esta incomoda y apenada y ya no me puedo contener, me ataco de la risa.

- ¡No te rías! – Me dice mientras me golpea juguetónamente en el brazo.

- Lo siento. – Le digo una vez que logro contenerme de nuevo. Me levanto y camino hacia la puerta. Al llegar a la puerta volteo hacia ella y sigue sentada mirando sus manos en su regazo, piensa que ya me voy. – Ven. - Le digo y levanta la vista.

- ¿A donde? – Dice confundida.

- Al baño, vamos a curarte esas heridas. – Le digo.

- Ahh eso. – Chasquea la lengua. – Ya lo hice. Esto es lo mejor que pude hacer.

- ¿A siii? – Levanto una ceja – Y porque tienes sangre seca en la comisura de tu boca? – Camila enrojece de nuevo.

- ¡¿Enserio?! – Se levanta rápido y camina casi trotando hacia el baño, llego justo detrás de ella. Río al ver como intenta limpiarse lo mas rápido posible. – Ahhh no sale.... – Veo como se vuelve a ruborizar e intenta descontroladamente sacarse la mancha de sangre.

- Déjame – La volteo y le quito el trapo húmedo que tiene en la mano. Me acerco mas a ella, la tomo delicadamente por el mentón para que no se mueva y empiezo a limpiarle la herida. – ¿Estas bien Camila? – le pregunto porque no se si se esta ahogando de lo roja que esta.

- Ss..... ssi – Tartamudea.

- Listo – Pongo el trapo en el lavabo detrás de Camila pero al regresar a mirarla noto que estamos muy cerca. Veo como un mechón de pelo se le queda pegado a su labio húmedo por haber sido recién limpiado así que sin poder contenerme le acomodo el mechón de pelo detrás de su oreja y no puedo evitar mirarle los labios sin el pelo estorbando. Con mucho esfuerzo logro levantar la vista a sus ojos.

Siento como mi corazón empieza a latir rápido y fuertemente. No es la primera vez que me pasa esto, siempre que la veo a los ojos es lo mismo... Es que es tan bonitaaa.... ¡No que estas pensando ella es tu amiga Lauren y tienes un novio que te ama! Le devuelvo el trapo y ella suspira.

- Bueno tengo que ir a comer. – Le digo y me alejo un paso de ella para poder respirar y calmar mi corazón. - Por cierto tu mamá quiere que aprendas a cocinar.

- Naaaah - Camila sacude la cabeza pero pronto para y se toca un poco la frente, me preocupo pero ella continua antes de que le diga algo. - Para que aprender a cocinar cuando existe el pedido a domicilio, los restaurantes y las amas de casa que te hacen la comida, aparte tengo a mi madre cocina excelente. 

Me río de su lógica. 

- Pero si tu cocinaras me podrías hacer algo de comer alguna vez me encantaría saber como cocinas. - Suelto sin pensar.

Veo como a Camila se le iluminan los ojos cuando digo eso y no puedo evitar que mi corazón vuelva a latir fuertemente de nuevo. 

Camila asiente sin apartar su vista de mis ojos.

- Gracias – Me dice. - Po... Por a... ayudarme a... a limpiar... - Dice mientras tímidamente y señala la comisura de su labio ya limpio. Hago todo lo posible por no quedarme viendo su labios de nuevo.

- De nada. – Le sonrío. –  Nos vemos al rato. - Ella asiente.

Sin poder controlarme le acaricio los costados de su cara y me inclino para darle un beso en la frente. Después de un momento me doy cuenta de lo que estoy haciendo y me separo de ella. Salgo rápidamente del baño y bajo las escaleras.




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⏰ Última actualización: Jan 06, 2016 ⏰

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