Corro por el pasillo haciendo caso omiso a Patricia y a Rafael, qué corren detras de mi.Patricia se para en su clase.
2A.
- ¡ Adios, Cerda! - Me grita.
Le sonrío y sigo corriendo con Rafael detrás.
Llamo a la puerta con ímpetu.
- ¡ Adelante! - Oigo gritar con una voz grave.
- Ya tengo miedo de cual será nuestro tutor. - Me susurra Rafael, que está detrás de mi.
Asiento con la cabeza y abro la puerta. Tube que contener la risa, el tutor era bajo, gordinflón y el poco pelo que le quedaba en la cabeza era muy blanco. Además tenia la piel muy roja, como si se la hubiera quemado. Solo le faltaba la barba blanca y gritar " ¡ FELIZ NAVIDAD! " para ser Santa Claus. Bueno, también le hacía falta sonreír más.
- Llegáis tarde. - Dice secamente.
No tenía mucha pinta de repartir regalos a los niños en su tiempo libre.
- Fue su culpa - señalé a Rafael. Toda la clase se empezó a reír. Rafael se puso rojo.
Yo no.
Yo nunca me pongo colorada.
- Se acabó. Venga. Elegir asientos.
Miré a mi alrededor en busca de Ámber y la encontré justo delante de Rubén y Óscar. Me acerqué a ella y sonrió. Escogí el asiento al lado suya. Justo delante de Rubén.
- Bueno, lo que estaba diciendo antes de que vuestros compañeros nos interrumpieran, olvidar todo lo que creíais conocer del instituto del año pasado.
- ¿ Que? - Dijimos todos a la vez.
- Este curso será más complicado. No por los estudios, porque este es el año en que entraréis en la adolescencia. Empezareis a salir unos con los otros.
Todos me miran y me rio. Yo el año pasado saliera con Nico, y ahora estoy saliendo con Jaime. Supongo que la adolescencia me llegó antes que los demás. Aunque no soy la única. Elia, está saliendo con Daniel, desde hace 6 meses pero al parecer cogi yo la fama de que sali con todo dios.
- A las mujeres os vendrá la regla.
Oh, genial. Tenía que sacar el tema. Toda la clase comienza a reírse. Yo espero que no me venga este año, la verdad.
-Y solo os vais a centrar en eso. En fiesta. En fiesta. En fiesta. Y los estudios quedarán en segundo plano. Y eso no lo podreis permitir. Os aviso ahora antes de que sea demasiado tarde.
-Tú no tienes problemas-Le susurro a Ámber.
-Ya lo sé. -Responde.
-Ámber. Está bien que estudies y eso pero deberías intentar conocer a alguien. Ya sabes. Para hacerte feliz.
-Ya soy feliz. No necesito a nadie para serlo. Y además así me centraré en sacar buenas notas y no me despistaré con temas amorosos.
-Vale. - Respondo. Dándome por vencida.- ¿Pero hoy bajas a dar una vuelta?
-No.
Suspiro.
Suena el timbre para la hora siguiente y el tutor gordinflón sale de clase. Y todos empiezan a chillar como locos.
Yo estoy mirando a Ámber con aire crítico. Ya estoy harta que no quiera salir de casa. Ámber es una de mis mejores amigas. Despues de Elia, que es mi mejor amiga. Ella y yo salimos muchísimas veces y lo pasamos genial hasta la noche. Mientras que Ámber se queda en casa. O estudiando o mirando para la pared. No lo se. Pero siempre que le pedimos que quede con nosotras se niega y cuando lo conseguimos. Está deprimida. En una esquina, sin hablar con nadie salvo con nosotras. A Elia y a mi nos da mucha rabia porque si la conoces es muy divertida y es una pena que nadie llegue a saber como es. Pero bueno, si le obligamos a bajar con nosotras va a estar deprimida asi que no se lo que podemos hacer con ella.
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¡BIPOLARES!
RomansaBueno, para los adolescentes de catorce años es normal ser bipolar pero, ¿tanto? Te sorprenderás con esta historia de tantos giros, amores, engaños, enemistades, lo que, los adolescentes pueden llegar a ser. OJO! : Dependiendo de el nombre del tit...