C: Rocío... —Le miro a los ojos — Prometeme que siempre me querrás.
R: Ah sí, de eso te quería hablar...
C: Prometemelo, por favor, necesito que me digas la verdad, dime que siempre me querrás. —Le cojo de las manos —
Nos miramos cara a cara.
R: Sería muy gilipollas para no quererte, o mejor dicho, amarte. —Sonríe —
C: Pero si esque eres demasiado preciosa —Me resbalo del sofá y me caigo al suelo—
R: Anda tonta... —Se ríe — Levanta. —Me da la mano —
C: Ahora me quedo en el suelo. —Retira su mano y antes de que la retire la tengo en la mía agarrada — Tu mano es mía. —Le miro de reojo sonriendo —
R: ¿A que me siento yo también en el suelo? —Dice levantándose del sofá —
C: Nah, no te molestes. —Suelto su mano delicadamente —
R: ¿Me haces levantarme del sofá para nada? —Me mira y se va a la cocina —
Me levanto.
C: Pero no te vayas... Bueno chao —Me río —
S: ¡Hola!
C: Ay Sonia, lo siento, estaba hablando con Ro.
S: Mejor dicho, tonteando, ¿no?
C: Bueno, tampoco eso...
S: Uy que no...
R: ¿Hola chicas, de que habláis?
S: ¡Ay Ro! ¡Pero qué susto me has dado hija mía! —Da un bote —
Nos reímos.
C: Ay ay ay, siempre andando como un fantasma —Le toco la espalda —
R: ¡Que soy un fantasma, no puedes tocarme! —Nos reímos todas —
S: Qué tontas sois... x'D
C: Nosotras siempre, por eso nos queremos. x'D
R: Anda que... x'D
S: Bueno chicas yo me voy, os dejo solas con vuestras tonterías. ¡Chao guapas! —Se va —
R: Y voló de aquí. x'D
C: Ay Ro, para ya que me pegas la risa. x'D
Al momento vuelve Sonia.
S: ¡Chicas, se me olvidaba, nos vamos en una hora al concierto, preparaos! —Dice cansada — Os espero en mi casa con Alba, ¡bye! —Se va otra vez—
R: ¡Ay madre, qué cabeza! ¡Vamos corriendo a vestirnos! —Subimos —
C: Tranquila, que queda una hora.
R: Lo sé, pero esa hora pasa rápido, así que vamos. —Me coge del brazo —
C: Va...
Nos vestimos y bajamos.
Nos vamos.