VII

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—¿Lo ves? Te dije que mi plan funcionaría —Decía KyungSoo con una sonrisa en el rostro—. Menos mal me hiciste caso

—Si, la verdad pensé que iba a ser una completa estupidez, pero supongo que todo va yendo demasiado bien

Ambos amigos se encontraban en una de las mesas de la cafetería de la facultad, comiendo su almuerzo tranquilamente. BaekHyun le contaba con todo detalle como había salido su plan de haber visitado a TaeYeon en la cafetería el día anterior, mientras el pequeño de ojos enormes lo escuchaba atentamente.

—La verdad pensé que me iba a pegar con la bandeja o algo por el estilo —Comentaba BaekHyun—, pero en vez de eso ella solo tomó mi orden y se ruborizó por completo

—Awh, que linda —Rió KyungSoo—. Seguro no se lo esperaba

—Pero claro que no; ella pensó que con sus gritos y ese gran portazo ya me había ahuyentado de su vida. Pero no señor. Nadie se libra tan fácil del gran Byun BaekHyun.

—¿Siempre eres así de fastidioso?

—Si, supongo

—Con razón ella siempre te odió

••

"Persiguiendo, siempre persiguiendo sueños,
¿por qué te quedas
¿por qué estas conmigo?
¿Por qué finges?"

••

La campanilla de la puerta sonó nuevamente, indicando la entrada de un nuevo cliente en Café Saluti. TaeYeon, quien estaba dando la espalda a la puerta, volteó rápidamente hacia la entrada y rápidamente cerró sus ojos.

—Chen, ¿podrías ir a atender al cliente esta vez? —Le preguntó a su compañero, casi que rogándole

Chen se inclinó en el mostrador y dejó escapar una leve sonrisa al ver a BaekHyun sentándose en una de las mesas.

—Eres astuta –Le dijo mientras se reía

Rápidamente, el chico salió de la cocina mientras dejaba a TaeYeon preparando un mocaccino de uno de los tantos pedidos. Al cabo de unos segundos, Chen volvió a la cocina con una sonrisa de medio lado.

—¿Y bien? —Preguntó TaeYeon—. ¿Qué decidió ordenar?

—No quiso ordenar nada —Contestó mientras se adentraba en la cocina

—¿Qué? —Preguntó consternada

—Así es. Se negó a ordenar si no eras tú la que le atendieras. Osea que mejor te vale que salgas a tomar su orden antes de que el jefe se enoje.

—¡Está demente! —Gritó TaeYeon mientras ponía sus ojos en blanco—. Me niego. No iré a tomarle la orden a ese lunático.

—¿Oyes eso? —Dijo Chen sarcásticamente—. Puedo escuchar el grito del señor Choi mientras te despide

TaeYeon se cruzó de brazos, mientras una mueca de preocupación se formaba lentamente en su rostro. Delicadamente volteó su mirada hacia la mesa donde el joven se encontraba plácidamente sentado con una sonrisa. Ella suspiró fuertemente, tomó una libreta y un lapicero, y salió de la cocina.

Al llegar a la mesa, BaekHyun la recibió con una sonrisa de oreja a oreja, pero ella no.

—¿Qué es lo que quieres? —Preguntó furiosa

Memory      ➵. TaeyeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora