Memory ➵. Taeyeon

I

—Una vez —Dijo ChanYeol con furia mientras abría la puerta de su auto—. Te pedí que te comportaras una vez, y así es como me pagas

—¿Me estás intentando decir que jamás me comporto? —Espetó TaeYeon furiosa, y entró en el auto

—Pues nunca lo haces con BaekHyun

—Ya te he dicho cientos de veces que odio a ese enano, ¡no me lo aguanto!

—¡Pero es mi mejor amigo, TaeYeon!—Encendió el auto y se dispuso a abandonar el lugar donde se encontraban—. Y tenías que dejarlo en ridículo frente a todo el mundo el día de su cumpleaños. ¿Ya es costumbre tuya, no? Hacer quedar mal a las personas que no te agradan. Claro, solo piensas en ti

—Ahora la culpable de todo esto soy yo, ¡perfecto! —TaeYeon miraba a su novio con furia, quién al parecer, la ignoraba por completo mientras conducía—. ¿Entonces tenía que aguantarme todas las burlas estúpidas que él me hacía? ¿Solo porque es el cumpleaños del niño de papi?

ChanYeol no contestaba. Seguía mirando inexpresivo a través del parabrisas, viendo cómo las gotas caían lentamente en el vidrio. De repente, cada gota se tornaba más agresiva, convirtiéndose en una tormenta. TaeYeon, aún expectante por una respuesta, empujó a su novio bruscamente. Esperaba que de esa manera se fijara en ella.

—¡Contéstame, imbécil!

—¡Tranquilízate, mujer! —Contestó iracundo con su voz gruesa y severa—. ¿No ves que estoy conduciendo?

—Siempre lo supe... Lo prefieres a él que a mi, ¿no es así? —Solo consiguió otro silencio incómodo por parte de su novio. Su paciencia se estaba agotando—. ¡Lo prefieres a él!

—No he dicho nada de eso —Contraatacó ChanYeol mientras, inconscientemente, aumentaba la velocidad del auto cada vez más—. Deja de hacerte la dramática, ¡siempre es un problema contigo!

—¡El problema siempre ha sido BaekHyun, y nunca haz hecho algo al respecto!

El joven encendió la radio y subió el volumen. Estaba cansado de oír los gritos de su novia y necesitaba un poco de distracción si no quería problemas.

—Escucha lo que te estoy diciendo —TaeYeon bajó el volumen de la música sin el permiso del conductor y se dispuso a reiniciar la discusión

ChanYeol ignoró sus palabras y subió el volumen al máximo. La muchacha tapó sus oídos y gritó en señal de dolor; la música estaba demasiado fuerte. Los ojos de él se tornaron fríos e inexpresivos y la vena de su frente se brotó por completo.

—¡Yeol, compórtate! —Lloró ella mientras bajaba un poco el volumen.

—¡NO ME PIDAS QUE ME COMPORTE! —Despegó la vista de la carretera y miró a su novia con lágrimas en los ojos—. Tú fuiste la que empezaste con todo esto! ¡Te pedí que te calmaras y no lo hiciste! ¡ESTAS SON LAS CONSECUENCIAS!

—ChanYeol! —Advirtió TaeYeon

—¡NO ME INTERRUMPAS...!

—¡ChanYeol, el árbol!

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—¡Ya está despertando! —Una voz masculina se escuchaba a lo lejos de la habitación—. Está abriendo los ojos

TaeYeon seguía sin ver. Intentaba despegar sus párpados, pero lo único que lograba era pestañear. Ninguno de sus músculos respondían aún, y no entendía el por qué. En cuestión de segundos, sus ojos se abrieron lentamente, y lo primero que vio fueron las brillantes luces de color blanco junto con la pared del mismo tono. El pitido del electrocardiograma hizo que se despertara por completo.