Lo difícil de decir adiós. Nunca podré hacer algo para lograr que un "adiós" no duela, toda despedida duele, en el corazón, en el alma, saber que te despides de una persona con la que se te hizo cotidiano ver, y que diga "adiós", capaz para no volver nunca más y la pierdas. No importa las circunstancias despedirte de una persona que era parte de tu vida es doloroso, y ni saben lo que se siente cuando se toma cariño con la persona que se despide, apreciar y hasta amar a la persona que se va, es doloroso, saber que ya no va a ocupar el lugar que ocupa, que capaz nunca nada vuelva hacer como era antes, ese capaz es más un nunca. Pero nunca se pierden las esperanzas que el que se va vuelva e intente a volver a ser lo que era antes, pero nada es igual, seguro habla algo que falte que se fue cuando esa persona dijo "adiós" y que nunca jamás volverá por más que intentemos, nunca volverá.
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Lo Que No Nos Animamos A Decir.
De TodoSon frases sin relación alguna la una con la otras, pero que todas dicen lo que a veces no nos animamos a decir.