Capítulo 8. "Running circles again"

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-¡¿Que haces?! -Pregunta confundido. -¡Por Dios! ¡Que brazo tienes!. -Exclama sorprendido.

Ruedo los ojos algo irritada. Me agarro la muñeca disimulando el dolor que empiezo a sentir. Lo mejor es que me marche, me doy media vuelta y empiezo a caminar de nuevo.

-Espera.

-Dejame en paz. -Suelto irritada.

-Espera. -Repite.

Lo ignoro y sigo caminando.

-Te dije que te esperes. -Me toma por el brazo. -¿Qué te ocurre Christine?

-Te fuiste, me abandonaste. -Escupo rápidamente. -Me dejaste sola. -Le reclamo. -Ademas, lo mereces, tú mismo me diste la aprobación para hacerlo. ¿No recuerdas? -Lo fulminó con la mirada mientras le veo una estúpida risita dibujarse en su boca. -Me dejaste con John, permitiste que me llevará de nuevo al reformatorio...

-¿Cómo? ¿Reformatorio? -Adam frunce el ceño. -¿Cómo que al reformatorio?

-Si. Reformatorio. -Le repito. -El mismo día que me prometiste que nunca me dejarías sola te fuiste. No me dejaste una explicación solo desapareciste sin dejarme alguna señal. Él apareció después y ya lo demás lo acabas de saber.

-Espera, espera. -Sacude la cabeza algo confundido. -No puede ser. -Murmura en voz baja.

Lo observo algo confundida. ¿Por qué se coloca así?

-¿No puede ser que?

-Ese maldito te llevó al reformatorio. -Sigue murmurando en voz muy baja. -Me engaño, el maldito lo hizo. ¡Dios que estúpido! ¡Estúpido! -Camina hasta el capo de carro y lo golpea fuertemente con sus manos haciéndole una abolladura.

Salto de repente por la impresión. ¿por qué reacciona así? Camino hacia él, esta Despaldas a mi, sus manos están cerradas en puños y tiene la cabeza baja.

-¿Por que reaccionas así? -Le murmuro algo desconcertada.

No puedo entenderlo, Adam acaba de reaccionar como si no supiera nada del asunto. Él tubo que saber que me fuy al reformatorio, fue él quién me entrego a John y permitió que me llevaran a ese lugar.

-¿Cuanto tiempo estuviste allí? -Pregunta en voz baja.

-Una año y medio. -Respondo. -El tiempo que tienes de haberte ido. -Adam frunce el ceño.

-¡Maldicion! -Espeta. -¡Maldito! -El rostro se le crispa de rabia.

Lo observo detenidamente, no se que decirle. ¡Dios mio! ¿Qué es esto? Adam me esta dando a entender que no sabia nada de lo que me ocurrió después de su partida.

-¿Tu... No... Lo... sabías? -Titubeo.

¿Debo de sentirme bien por que estoy comprobando que Adam no tubo nada que ver con lo que paso? Sin embargo algo me hace sentir mal, y es el echo de saber que paso todo este tiempo con él y por que lo hizo tomar la decisión de marcharse.

-Responde. -Hablo de nuevo con urgencia. Adam sigue con su postura de hace unos minutos, su rostro denota ira y desconcierto.

-Ya lo sabes... ¿No? -Dice mientras deja de apoyar sus puños en el capo del Audi negro. -Ya sabes la verdad.

Los ojos empiezan a arderme de pura rabia, rabia contra la situación, contra John. Lo detesto, me ha echó la vida imposible toda la vida. No puedo creerlo, me separó de Adam lo único "bueno" que me quedaba. Me separo de Stefan y Charlie y por si fuera poco me mando de nuevo a ese maldito lugar.

-¿No puede ser? -Murmuro aún desconcertada por la noticia.

-¿No puede ser? -Murmuro aún desconcertada por la noticia

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