Capitulo uno.

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Narra Justin

Otro día más en mi miserable vida. Bueno, no tan miserable; tengo un buen empleo, tengo el suficiente dinero para mantenerme y tengo buena salud. A lo que me refiero con el término "Miserable" es por ___. Tengo que soportar cada día sin su compañía y eso me está hartando. Cuanto desearía tenerla de vuelta. ¿Pueden creer que aun no supero su pérdida?

Cada vez que despierto, abro mis ojos con la esperanza de que ___ esté a mi lado. Algo en mi interior me dice que esto es solo una horrible pesadilla y que, cuando despierte, ____ me regalará una hermosa sonrisa, diciéndome que todo estará bien.

Revisé algunos mensajes en mi buzón de voz.

"Hola, Justin. Tengo un problema con cuidar a mi sobrina esta semana, ¿Podrías cuidarla por mí? No te será ninguna molestia. Si aceptas llámame."

"¡Bro! No podré ir a trabajar hoy, dile a señor jefecito que me dio una fuerte diarrea y también que tengo pedacitos de choclos atorados en el culo. ¡Gracias! Nos vemos."

Jaja, que estúpido.

Me dirigía hacia la puerta cuando otro mensaje llamó mi atención.

"Hola, Hijo. Quería decirte que este sábado organizaremos una junta por el aniversario de ___. Sé que aun se te hace difícil, créeme que a mí también. Pero tienes que dar vuelta la página, ¿no crees? No te pido que te olvides de ___, pero que dejes de pensar todo el tiempo en ella. Tu futuro aun está en juego, preocúpate más en eso. Ah, espero que puedas venir esta vez. No te hemos visto hace mucho tiempo, desde que te fuiste a Los Ángeles, y jamás has venido a una de estas juntas. Espero verte esta vez, si no quieres hacerlo por ___, hazlo por tu familia. Si, seguimos existiendo. Cuídate mucho. Te amo"

Mh, esta vez estaba dudando en ir. Mi madre tenía razón.

Desde que ___ falleció, me puse demasiado distante con mi familia. Sé que estuvo mal, pero mi humor era horrible en ese tiempo. Al terminar la escuela mi madre me obligó a entrar a la universidad, pero yo solo tenía un camino. Entrar a la FBI. Y lo logré. Hace dos años que trabajo en esto y me ha resultado de maravilla. A mi madre no le gustó mucho la idea de que me aleje de mi familia por tanto tiempo, pero era mi vida y no podía desperdiciar esta oportunidad.

Tomé las llaves de mi coche y salí de mi apartamento.

- Hola, Justin.

- Hola, Nicole. – Saludé a "Hormonas alborotadas" del apartamento de al lado.

- ¿Cómo dormiste, guapo?

- Bien. – Forcé una sonrisa y corrí hacia el ascensor.

Esa chica era frustrante.

Narra Derek

"- Tiene una amnesia temporal. No sé en cuanto tiempo recordará; podrían ser meses o años. Podrías hacerle preguntas frecuentemente de su pasado, para que ejercites su memoria."

Sé que esto empezó como un gran plan, pero últimamente me estoy enamorando cada vez de ___, digo, Mackenzie.

Odiaría la idea de que empezara a recordar. De seguro me mandaría a la mierda y se alejaría de mí para siempre. No lo soportaría.

- Hey, amigo. ¿Por qué esa cara?

Miré a Dylan negando con la cabeza.

- Nada, no te preocupes. ¿Hay noticias de Mac?

- Están de regreso. Todo fue un éxito. – Me respondió con una sonrisa de orgullo.

Asentí y me dirigí a mi habitación.

Últimamente me ha preguntado sobre nuestro pasado. Supuesto pasado.

Hay días en que me ahoga de tantas preguntas como: ¿Por qué no tenemos ninguna foto juntos? ¿Cómo nos conocimos? ¿Cómo era antes?

Preguntas que me ponen nervioso y no sé cómo responderlas. Ya han pasado como cuatro años... Pronto recordará.

- ¿Quién es este chico tan sexy? – Sentí una corriente eléctrica recorrer todo mi cuerpo ante su tacto.

- Hola, nena. – Le di un beso en la frente.

- ¿Todo bien? – Acarició mi rostro. – Dylan me dijo que andabas raro.

- Estoy bien. No te preocupes. – Le regalé una sonrisa. – ¿Les pateaste el culo a esos imbéciles?

- Oh, claro que sí. Lloraban como bebés. – Soltó una gran carcajada.

- Esa es mi chica. – Acerqué su rostro al mío y le di un apasionante beso.

- ¿Correrás esta noche?

- Claro que sí.

(...)

- ¡Suerte, amor!

- ¡Te amo! – Grité antes de encender los motores.

Tres.

Dos.

Uno.

¡Que comience la carrera!

Narra Justin

- ¡Tenía las medias tetas!

- Jaja, en lo que te fijas, Ethan.

- Como si tú no te fijaras, sucio.

- ¡No lo hago!

- Calla. Me están llamando de la estación.

Tomé un sorbo de mi café.

- Mierda. De nuevo con las carreras ilegales. ¿Me acompañas a patear culos?

- Encantado, amigo.

Nos subimos a su coche de policía y nos dirigimos a ese lugar.

- Como odio a esos infelices. – Murmuró con el ceño fruncido.

- Antes yo también corría. – Confesé.

- ¿Tú? ¿Justin Bieber? Claro. – Se burló.

- De verdad. – Ethan alzó una ceja.

- ¡Pero si eres amante del orden! Eres el mejor policía de la FBI que conozco.

- Cuando era un puberto fui muy rebelde. Otsea.

- Eres un chico con muchas sorpresas. – Encendió las sirenas. – Ya llegamos.

Al sentir las sirenas, demasiados coches arrancaron a gran velocidad.

- Quédate aquí. – Asentí.

Empecé a observar como corrían todos esos chicos. Pensar que yo fui uno de ellos antes, que recuerdos.

- ¡Mac! ¿¡Dónde estás!? – Esos gritos llamaron mi atención.

La chica, la cual gritaba, se acercó rápidamente a otra chica, esta estaba herida. Pensaba bajarme del coche, pero Ethan ya se estaba acercando.

- Otros policías se harán cargo. – Informó.

Quedé mirando a la chica lastimada. Mi mirada subió a su rostro.

No puede ser. Debe ser una ilusión.




I  need you «JB» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora