Dime que me amas [ bysTaXx ] ADAPTADA**

Capitulo 30

Ya en posición, miro a Nina que es la encargada en tira la bola. ¡Genial! Mi vida estaba terminada.
Test cerrado era la opción más favorable, que tendría al terminar la clase. ¿Es posible morir por un golpe en la cabeza? Si. Goliat murió así, cuando David le tiro una piedra en la cabella… Bueno prácticamente lo aturdió y lo mato cortándole la cabeza.
Pero Nina con el odio que sentía hacia mí, era capaz de seguir el ejemplo de David o hacerme algo peor.
_ ¿Lista? – me pregunta Frank
_ No – digo negando – No quiero Jugar… Frank por favor.
_ Pareces como si te estuviera obligando a ser algo horrible – dice sonriendo – Es solo un Juego. Nada de otro mundo.
_ No se Batear, no sé nada… – suspiro – En verdad no soy buena con los deportes.
_ Inténtalo. No pierdes nada, __(tn) – me extiende el bate – Solo cuando veas la bola venir hacia ti… dale un fuerte golpe.
_ Te odio… - Mis palabras le causaron gracia, ya que comenzó reír.
_ Me lo has dicho muchas veces. Creo que me estoy acostumbrando – me vuelve a extender el bate y esta vez lo acepto – Suerte – se gira y se va a su posición.
La entrenadora toca el silbato y Nina da unas señales con las manos a un chico de su equipo. Y lanza… Falle.
_ Estrai uno – dice el receptor detrás de mí.
_ Demonios – murmuro y vuelvo a levantar el bate.
Nina hace el mismo movimiento con las manos al chico de su equipo. Y lanza.
Ahí estaba frente a mí, a toda velocidad. Cierro los ojos y Bum...
Los gritos de los chicos “Corre __(tn), Corre” hizo darme cuenta que había golpeado la bola.
Dejo caer el bate en mis pies y comienzo a correr… todo el mundo gritaba y yo era la causante. Eso me hizo sentir bien, Ahora entendía como se sentían los artistas bien famosos.
Comienzo a llegar a la última base: ¿Con que pie tengo que pisar primero? ¿Derecho o izquierdo? Me lanzo.
La entrenadora toca nuevamente el silbara y dice;
_ Punto para el equipo Rojo
Al escuchar eso me hizo sentir que no corrí por nada, eso era bueno… me quedo ahí tratando de recuperar mi respiración. La adrenalina era algo que deja agotada. Mi corazón latía fuertemente, mi respiración estaba agitada… estaba agotada y recién habiamos comenzado. Pff… esto apesta.
_ Necesitas ayuda – abro los ojos y veo a Frank extendiéndo la mano, mano que acepto – No estuviste mal.
_ Eso fue suerte…
_ Esperemos que la suerte, siga de tu lado.

Ultima ronda y a mí me tocaba batear por última vez. Quizás estaba un poco confiada, ya que no me había lastimado – aun – pero eso no significaba estaba segura de mis capacidades deportivas.
Nuevamente la entrenadora toca el silbato y Nina hace unas señales con las manos a un chico de su equipo. Y lanza.
Bien, humillación pública. Justo en mi frente y la caída al piso fue lo peor.
La humillación era lo que más me dolía, no tanto el fuerte golpe en la frente, ni la caída en el piso.
_ ¡Oh Por Dios! – escuche de lejos y de ahí no supe mas.

Los murmuros y algo frío en mi frente hizo que despertara. Una mujer de media edad, con una bata de laboratorio estaba al frente de mí y apoyaba algo en mi frente - ¿Hielo, gel frío para inflamaciones? - ella tenía el ceño fruncido y miraba hacia el lado de la puerta.
Al voltear la vista hacia mí y percatarse que estaba despierta sonríe, sacando eso frío de mi frente.
_ Bienvenida a la vida – me dice sonriendo.
Frunzo el ceño y eso dolió bastante.
¿Qué hacía en la enfermería? No lo sabía ¿Qué me había pasado? Ni idea.
_ Quédate recostada unos segundos más – mira encima de su hombro – Que no se ponga de pie ¿ok? Yo iré a ver qué es lo que quiere el inspector. Cuídala por mí.
Normal mente hubiera preguntado con quien mierda hablaba o porque estaba yo aquí. Pero no me sentía bien. Con mucha suerte podía ver a la enfermera con claridad. Me dolía la cabeza y tenía un gran mareo.
Cierro los ojos nuevamente para tratar de sacar el mareo o solo de reponerme.
Unas caricias en mi cabello me hizo abrir mis ojos otra vez. Cabello negro y ojos castaños que me miraban con preocupación, me hizo llevarme una gran sorpresa.
_ ¿Cómo te sientes? – me pregunta Frank.
Los recuerdos volvieron. Nina había lanzado la bola y me había caído en la frente. Tuve que haber quedado inconsciente ya que no recordaba cómo había llegado a la enfermería.
_ ¿A qué te refieres con “Como me siento”? ¿Me preguntas por la humillación o por el golpe en la cabeza?
_ No creo que sea mucha la humillación. Todos vieron que Nina no lanzo bien la bola.
_ ¿Lo hizo a propósito? – Bufo - ¿Por qué no me sorprende?
_ No lo diría así… pero fue un accidente – Una de mis manos viajan hacia mi frente. Algo que no tenía antes, ahora estaba ahí.
_ Si pero el accidente me dejo un huevo en la frente –frunzo el ceño pero el dolor agudo, hizo entender que no era buena idea hacerlo.
_ Veamos el lado positivo de las cosas – me dice – no podrás fruncir el ceño y eso te evitara que las arrugas se vean muy pronto, en tu rostro.
_ Idiota – trato de sentarme pero un fuerte mareo hizo que toda la pequeña enfermería diera vuelta fuertemente.
_ Deberías quedarte recostada como lo dijo la enfermera.
_ ¿Eras tú, a quien ella la hablaba?
_ No pensaste que hablaba sola ¿verdad? – me levanta una ceja.
_ Como sea. ¿Tú qué haces aquí?
_ ¿Qué hago aquí? – Dice pensativo – Cuidando tu trasero – me contesta después de unos segundos – Yo cumplo mi palabra. Tu eres la que debería entender eso mejor que nadie – pongo los ojos en blanco.
_ ¿Cómo llegue acá? ¿Dónde están Chloe? y… ¿Qué demonios quieres decir con “. Tu eres la que debería entender eso mejor que nadie”? – Frank comenzo a reír
_ Un pregunta a la vez – sonríe – Bien ¿Cómo llegaste aquí? Te traje yo ¿Sabes que hablas dormida?
_ ¡Eso no es cierto!
_ Si lo es. Y no diré lo que dijiste, porque eso te daría mucha pena – le doy una mirada glaciar – A tu otra pregunta de donde esta Chloe… ella sigue en la clase de Deporte. Solo me dejaron venir a mí y eso hizo que quedara una Chloe no muy contenta – hace una mueca – y por ultimo ¿A que me refiero con que; tu eres la que debería entender mejor que nadie? Bueno es sencillo… tu eres de las pocas que me conoce realmente.