Fight For Your Life (Carl Grimes y Tú)

#11

°Allison°

No confío de Brenda y Nathaniel. Sé que quiero humanidad y todo eso, pero ellos no son nada confiables. No los conozco, lo sé, pero en su mirada veo algo raro o tal vez sea el miedo en sus miradas que yo no puedo descifrar. 

Y finalmente luego de mucho caminar encontramos un pueblo completamente vacío. Es algo así cómo un pueblo fantasma. Entramos a una casa pequeña de un piso. Por afuera es blanca y por dentro las paredes son de un color crema. 

La sala de estar está algo destruida, el sofá está rasguñado al igual que las paredes llenas de sangre. Hay una sola habitación de una cama matrimonial algo vieja y con una pata rota pero Carl la arregló para que allí puedan dormir Brenda y Nathaniel. 

Jacob dormirá en el sofá y Carl y yo vamos a hacer vigilancia. Mientras que Carl se quedaba con Jacob en la sala de estar fui a la cocina para ver si hay algo de comer. Esta está con las cosas tiradas en el suelo, entre ellas cajas de cereales cerradas, frutas podridas, sangre en el suelo y cubiertos esparcidos por todos lados. 

Agarré las cojas de cereales, que son una tres, y las llevé a la sala de estar para mostrárselas a Carl. Él está jugando con el pequeño Jacob a las escondidas. Carl se esconde detrás de la cortina y Jacob lo tiene que encontrar. Y lo encontró. 

_Mira lo que encontré_ dije sonriente y algo divertida por la escena que acabo de ver. 

_Genial ____, ve a llevarle una caja a los nuevos_ dijo Carl. Tragué duro y asentí. 

Dejé dos cajas de cereales en la mesa de centro y fui al cuarto donde se encuentran los hermanos. Toqué la puerta tres veces y se oyó un pase de parte de Brenda. Suspiré y abrí la puerta temblorosa. Allí estaban los dos, admirando el cuarto todo roto. 

_Les traje algo de cereal_ dije mostrando les la caja.  

_Muchas gracias_ dijo Nathaniel sonriente. Le di la caja de cereal y se quedó mirándome un poco de tiempo.

_Bueno... los dejo solos_ dije nerviosa y salí de la habitación cerrando la puerta con rapidez. 

Caminé con rapidez a la sala de estar donde Carl y Jacob están ahora sentados en el sofá. Los dos están cruzados de piernas -cómo mujer- y mirándome interrogativamente. Con mis labios formé una línea recta y abrí mis ojos cómo platos. 

Los ojos de los dos se parecen mucho pero los del pequeño Jacob son aún más claros que los del castaño. Me acerqué a ellos y traté de sentarme en el sofá pero Carl estaba ocupando todo el lugar, así que sin más vueltas empujé a Carl y me senté en el sofá. 

_Eres fuerte_ dijo Carl entre risas_. ¿Enserio no quieres que te enseñe a matar un caminante?

Lo dudé. Quiero pero tengo miedo. Sé que algún día voy a estar sola sin Stephan, ni Carl, ni nadie que mate caminadores por mí. Me conviene que Carl me enseñe a matar caminadores, o mejor dicho ''caminantes'' por los del grupo. 

_Si, por favor_ dije y Carl sonrió. 

Se levantó y buscó en un bolso que él anteriormente llevaba y lo abrió con rapidez. De allí sacó un cuchillo muy afilado y una pistola con varias balas. Me miró sonriente y con su vista señaló los dos objetos que lleva en su mano. 

_Las clases comienzan ahora_ dijo y se acercó a la ventana para observar todo_. Hay varios caminantes, podemos practicar con ellos. 

Tragué duro y asentí. Alcé al pequeño Jacob, que obviamente no lo voy a dejar con dos extraños aquí, y salimos no sin antes avisarles a Brenda y Nathaniel que íbamos a ir a afuera un rato a matar unos cuantos caminadores. 

_¿Con cual de las dos armas quieres empezar?_ Preguntó Carl señalando las armas en su mano. 

_Con..._ miré a las dos y por fin me decidí_, con el cuchillo. 

_Bien, mira lo que hago_ dijo y lo miré atenta. Llamó la atención de un caminante y este se le acercó. Carl dio unos pequeños pasos y le clavó el cuchillo en su cabeza para luego sacarlo y dármelo a mí_. Te toca, has lo que hice ¿si? No es muy difícil. 

Asentí e hice lo mismo que Carl. Llamé a un caminante y este se me acercó a mí provocando que los nervios se apoderaran de mí. Oigo cómo Carl dice que agarre bien el mando del cuchillo y que por nada en el mundo deje que el caminante acerque su boca a mí más de lo necesario. 

Respiré profundo y di unos pequeños pasos hacia el caminante. Miré sus ojos claramente destruidos y sin más, le clavé el cuchillo en la sien haciendo que caiga al suelo muerto. Le saqué el cuchillo y un pequeño chorro de sangre salió del agujero que formé en su sien. 

_Bien ___, lo hiciste muy bien_ dijo Carl acercándose a mí con Jacob de la mano_. Mira lo que hago ahora. 

Asentí y tomé la mano de Jacob pero el me pidió que lo alce, y eso hice. Carl miró a un caminante que estaba algo lejos de él y fijó bien su puntería. Miró al caminador y luego lanzó su cuchillo con fuerza dándole al caminador en la sien. Luego corrió hasta el caminador y le sacó el cuchillo de la sien. 

*

_Gracias Carl_ susurré ya que estaban todos dormidos menos nosotros dos_. Si no fuera por ti yo en cualquier momento podría morir. 

Él se dio la vuelta ya que me estaba dando la espalda y sus ojos se conectaron con los míos. Azul y miel. Él sonrió y cada vez se acercaba más y más a mí. Nuestras respiraciones se mezclaron y nuestras narices se rozaban. 

Cerré mis ojos luego de que él lo hiciera y pude sentir como sus labios chocaron con los míos haciendo que mil emociones se juntaran. Tardé un poco en seguir el beso pero lo seguí luego de unos segundos. 

Sus labios saben tan bien. Nuestros labios danzan juntos y luego de que el aire se nos acabara, no tuve el valor suficiente de mirarlo a los ojos. Con lentitud abrí mis ojos y pude ver su azul clavado en mí. 

Carl sonrió y lo imité. Me di la vuelta y sentí sus brazos rodear mi cintura con delicadeza pura. Mi corazón late a mil por hora y no creo poder calmarme. ¡Acabo de dar mi primer beso! Cerré mis ojos y mi sonrisa no pudo borrarse de mi rostro. 

Hoy fue un día grandioso, quitando la parte en la que encontramos a los nuevos y estamos alejados del grupo a quien sabe cuantos kilómetros de distancia. La respiración de Carl es completamente tranquila, eso hace que yo misma me tranquilice. 

Y sin más dormí con Carl rodeando mi espalda y con su respiración chocando mi cuello.