Entre Sueños (Concurso P.U.B.E.)

Cap. 04 ♚El Bosque de los Guardianes♚

10 horas.

Según Matt había dormido solo 10 horas, aún no entendía como se tomaba el tiempo en este lugar, "Tendría que anotar ese dato para preguntar después"

Antes de emprender nuestro viaje nos asegurábamos de llevar lo necesario por si se presentaba cualquier percance en el recorrido. Podía notar claramente que este chico sabía lo que hacía y poseía experiencia, no era la primera vez que salía de viaje con algún acompañante.

Aún nos encontrábamos dentro de la casa verificando que no nos faltara nada de importancia –"No sea que nos arrepintamos luego"-, así que aproveche el momento para hablar un poco.

-Hey capitán –Llame su atención-. ¿Cuál será nuestro primer destino?

-El bosque de los Guardianes –Contesto seguro de lo que decía

-¿Y sabes dónde está el espejo que nos llevara hasta ahí? –Pregunte curiosa mientras lo observaba meter algunas cosas en los bolsos que llevaríamos.

-Por supuesto –Sonrió-. ¿Crees que no conozco el lugar donde vivo?

-Pe-perdón –Tartamudee algo apenada-. No quería ofender ni nada por el estilo, es que yo... bueno...

-Descuida –Rió Matthew por mi reacción-. Era una broma.

-Ah... de acuerdo.

-Eres muy seria –Observo tendiéndome una de las mochilas la cual tome colgándomela de inmediato en los hombros-. Deberías relajarte más, al menos conmigo –Añadió mientras se colgaba la otra mochila.

A ver, sí, llevaba razón en lo de ser seria pero siempre era así con las personas que apenas conocía, no lo era porque quisiera solo era parte de mi timidez actuando.

Ya listos para salir llegaba la hora del reto que suponía para mí: caminar sobre las nubes. ¿La razón?, simple, le tengo miedo a las alturas y de vez en cuando podía ver entre las nubes un gran barranco el cual no se veía para nada amistoso y la sola idea de caer por algún error y encontrarme con eso no era para nada placentera. Como quien no quiere la cosa, al notar mi indecisión de poner un pie fuera de la casa, Matthew se acercó a mí con expresión confusa.

-Oye, ¿Pasa algo malo? –Cuestiono algo preocupado.

-Es que... le tengo miedo a las alturas –Murmure lo suficientemente alto para que el escuchara.

-¿Le tienes miedo a las alturas o a caer?

"A las dos" –Pensé tragando fuerte.

Debido a mi silencio la expresión confusa de mi compañero paso a ser unas de... ¿compasión? De repente, extendió su mano hacía mí, acto que tarde en comprender hasta que capte cuál era su idea. Tome su mano al momento en que cerré mis ojos escuchando como su voz me daba ánimos con el fin de calmar  mis nervios y sí, lo sé; este no era el comportamiento que se esperaba de una chica de 18 años pero ¿Saben qué?, guárdense sus comentarios y muérdanse la lengua. Cualquier edad que tuviese siempre me comportaba así en cuanto algo me daba miedo y era normal, era la naturaleza humana, cerrarse o actuar ante sus temores y en mi caso lo que hacía era cerrarme y sepultarme veinte metros bajo tierra.

-Hey Kat –Habló Matthew después de un rato-. ¿No piensas abrir los ojos? –Negué rápidamente ante su pregunta, sabía que llevaba un tiempo caminando sobre las benditas nubes pero seguía asustada. Simplemente no quería saber.

Pero la curiosidad siempre fue más fuerte en mí y sin poder soportar un minuto más entreabrí mis ojos fijándome en aquellos ojos azules que no dejaban de sonreírme.