El Diario De Un Nadador

Capítulo III

Íbamos en su auto... Un Audi, dios era el que salió este año... Nada comparado con el humilde pero significativo bocho que tiene mi tío, yo iba como copiloto y en eso...

*Flash Back*

Íbamos mi tío y yo en su auto un viejo bochito su mama se lo había regalado, íbamos a la comercial a hacer el mandado... Se hizo a un lado y se estacionó

-Porque te paras- pregunté, se me hacía muy rara aquella acción que había realizado hace unos segundos

-Quiero probar algo nuevo-Dijo, me empezó a besar el cuello, eso hizo que me estremeciera, gemí en voz baja... Y empezar a desabrochar su camisa... Él era salvaje, creo que a los dos nos excitaba hacerlo en el carro...
*Fin del Flash Back*

-¿Que tienes Dabit?- me preguntó  Andrés, el detective ya que habíamos llegado a su apartamento y yo estaba en otro lado

-No, nada solo recordaba- respondí, baje del auto y junto con el subimos a su apartamento. Una vez dentro el ambiente se puso tensó. Él se acerco a mi y lentamente comenzó a besarme...

-¿Te gusta?-preguntó el en un tono bastante seductor. Ni siquiera pude responder porque estaba demasiado excitado. Volvió a besarme y el beso pasó de ser tierno y dulce a ser algo feroz y apasionante. Dejó de besar mis labios y lentamente bajo a mi cuello, no lo pude evitar y un gemido salió de mi boca. Me cargo y enrolle mis piernas al rededor de su cintura y me pegó contra la pared. Rápidamente nos deshicimos de nuestras prendas y en un momento de placer nuestros cuerpos se unieron en uno solo.

Cuando nuestro acto termino no pude dejar de sentirme culpable, digo, claro que lo disfrute pero tengo que aceptar que lo que me excito fue imaginar que él era mi tío. Demonios, ahora me siento sucio y desagradable, yo debía venir aquí y comportarme como un adulto y descubrir si mi tío me es infiel no hacerle lo mismo.