Enamorados por Error.

3

Una caja de la nada se abrió dejándome ver a un lindo cachorro no se que raza es ya que no conozco mucho de perritos y jamás he tenido uno, lo tomó en mis manos y le acarició su cabezita, tiene un largó y fino pelaje, sigo acariciando al cachorrito en mis brazos, hasta que una voz irrumpe.

-¿Te gusta?- dice James mostrando una sonrisa al ver la escena en la que me encontraba.

-Sí, es adorable- dije mirando al pequeño animalito.

-Sabía que en estos momentos necesitarías compañía.

¿En estos momentos? que sabe el. ay Dios que no sepa nada, que no sepa nada.

-¿De qué momentos hablas?- dije yo un poco sería.

-Bueno Sarah me dijo que eres solitaria, así que decidí traerte un perrito, ¿Qué dices lo aceptas?. - Pregunto.

¿es para mí? claro tonta no lo escuchaste.

cállate conciencia.

-Si gracias, pero sólo con una condición- dije mirando a James y luego bajando mi mirada al suelo, se que lo que diré es tonto pero entiendanme.

-Claro, ¿Qué sería?.

-Bueno nunca he tenido un cachorro, ni siquiera se que raza es, y mucho menos que comen cuando son pequeños- dije mirándolo tímidamente, dirá que soy una tonta al no saber cuidar un animal.

-ya entendí. ¿Quieres que te ayude a cuidar al cocker spaniel ingles? ¿Verdad?.

-Al ¿Qué dijiste?.

-Cocker spaniel ingles. Eso dije, es la raza del cachorro que estas alzando, y con gusto te ayudaré.

Sacó de su bolso un paquete y una taza color rojo que tenía una huella de perrito, abrió el paquete y echó un poco de su contenido en la tacita, luego el cachorro se acercó y empezó a comer.

- Bueno a eso se le llama purina, es para cachorros, y especialmente para su raza.

-Gracias- le dije con una voz apenas audible.

Recordé los crepes rusos que estaba preparando y lo invite a comer, al terminar el agradeció y fue a su dormitorio. Yo lave los trastes de la cena y me dirigí a mi habitación, me deshice de mi ropa y me duché, salí de la habitación envuelta en una toalla, me puse la pijama y me acosté a dormir.

-Me encontraba fuera de casa con un bata Blanca y descalza sentada en la escalera esperando por su llegada, miraba mis pies chiquitos y flacuchos, sonreía y miraba al cielo, de pronto un señor vestido de negro me coge de la mano con brusquedad haciendo que me suba a un automóvil.

-¿Quién eres tú?- dice mi indefensa voz.

El señor de negro no me responde nada, sólo toma una venda y la coloca en mi boca amarrándola.

-¡MAMÁ!- Gritaba fuerte y nadie me escuchaba.

-¡PAPÁ!- Seguía gritando. ya entendí para que era la venda.

Lloré mucho hasta que todo se nublo, convirtiéndose en un negro total.

- Despierta. - decía una voz poco reconocible.

-Despierta. - abro lentamente mis ojos y me encuentro a un James muy asustado.

-¿Porqué lloras?.- me preguntó.

-No lose.

Entendió que no quise hablar más del tema, me abrazó y se fue, antes de cerrar la puerta me dijo:

-Faltan 30 minutos para entrar al Instituto.

Mierda.

Me levanté rápidamente tome una toalla, me duché en el menor tiempo posible que pude, salí del baño y fui a mi armario, me puse lo primero que encontré constaba de una blusa de mezclilla, un Jean negro y unas Converse blancas. Fui rápidamente a la cocina y tome cereal.

Salí de casa dirigiéndome al parqueadero del edificio. Subí a mi auto y me fui rumbo al Instituto. Después de 10 minutos llegué, a lo lejos note que James ya había llegado, su moto ya estaba parqueada. Bajo de mi auto y voy a la entrada principal del Instituto.

Me encontraba en mi taquilla sacando los respectivos cuadernos para la clase.

- Hola tonta - escuchó esa voz y volteó dirigiéndome a mi mejor amiga.

- Hola - digo firmemente- ¿Y Dave?.-Preguntó.-

- No puede venir, le dio varicela- dijo ella con tono burlón, en el fondo sabía que le dolía que el estuviese mal.

- Iremos a visitarlo después del Instituto.- Dije cerrando mi taquilla y empezando a caminar junto a mi amiga.-

Llegamos a la clase de literatura, bueno estudiantes dijo el profesor llamando la atención de todos. Mi nombre es Harry y soy su nuevo profesor de literatura.

- Esta bastante bueno.- dice Alexa en mi oído.

-Cállate pervertida- le digo y le abofeteo la espalda en son de burla.

La clase estuvo genial, el profesor explicaba demasiado bien, aparte de estar bueno como dijo mi amiga era robusto y de semblante serio. Al terminar la clase salimos a cafetería. Compramos nuestra comida y nos dirigimos a la mesa de siempre.

-¿Qué tal estuvo la Academia?.

-Excelente. Liam preguntó por ti, si eso era lo que querías saber.- dijo Alexa, a lo que le Di un golpe en su brazo.

Liam era un apuesto chico que me molestaba, era un excelente bailarín. Profesional diría yo. Me elegía siempre como pareja de baile, me invitaba a salir. pero nunca accedía.

No quiero enamorarme y terminar lastimada como la última vez.

-Ven vamos. Tenemos gimnasia.- dijo Alexa cambiando de tema, lo cual agradecía.

Tomé mi mochila y me dirigí a clase de gimnasia junto a mi amiga. Bueno muchachas me dan 10 vueltas a la cancha.

¿10 vueltas esta loca?

Me dirigí a la fila con Alexa ya todas las niñas estábamos cambiadas en un short no muy corto color azul oscuro, y un esqueleto blanco. Todas comenzamos a correr. El equipo de fútbol nos amordazada con la mirada, ellos estaban entrenando. Iba en la tercer vuelta y un balón chocó en mi brazo asiendo perder el equilibrio y golpeando mi cabeza con una grada. De pronto todo se tornó negro.

-Dios levántate.- me gritaba una profesora muy asustada.

Usted. El que le pego. va y la lleva inmediatamente a enfermería. Alcance a escuchar. Alguien me tomó en sus brazos mientras yo trataba de despertar, cuando abrí mis ojos. Lo vi. era el quién me había pegado.

Lo hizo de aposta. ¿O no?

Recapacité rápidamente y logré decir. ¿Porqué me pegaste James?.

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Buenas *'*

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♡En multimedia el hermoso cocker spaniel ingles♡

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bye.