Te protegere

CAPÍTULO TREINTAICUATRO

Natsu miro a Zeref con enojo, pero no era solo enojo con el chico al que alguna vez había llamado hermano, también era enojo con sigo mismo al ser débil, al no siquiera poder hacerse cargo del pelinegro, al saber que era cierto lo que Zeref habia dijo, que el no podía proteger a nadie.

Cerro los ojos mientras recordaba el rostro alegre de Lucy, al menos moriría pensando en ella, sabiendo que estaba a salvo junto a su familia, sabía que Fairy Tail no dejaría que Zeref se quedara con ella, sabía que podía confiar en ellos.

-Supongo que esta es la despedida...hasta nunca, hermanito-escucho Natsu a Zeref antes de escuchar un disparo.

Natsu abrió sus ojos al entender que no había sido a el a quien habian disparado, sus ojos miraron como Zeref hacia una mueca de dolor mientras sostenía su estómago que poco a poco se marchaba de sangre, mientras buscaba con la mirada a quien le había salvado la vida; Lucy estaba en la entrada sosteniendo un arma, el arma que estaba seguro era la que había herido a su hermano.

-Lucy...-susurro Natsu alejándose lentamente del pelinegro, la rubia se acerco a el y vio sus heridas mientras le ayudaba a alejarse del chico.

-Mira como estas-le dijo Lucy apretando el cabello de su frente.

-¿Que haces aquí?-pregunto Natsu-no deberías de estar aquí.

-Pero estoy aquí y te he salvado la vida-dijo Lucy sonriendo con dulzura-eso es más importante.

-Para mi no-susurro Natsu olvidándose por completo de su hermano que les miraba con odio.

-Pero para mi si-susurro Lucy, sus ojos miraban a Natsu como a lo más importante de su vida, como si fuera lo más hermoso del mundo-mi vida no tendría sentido sin ti.

-Luce...-susurro Natsu mirando a la rubia.

-Pero tenemos cosas pendientes, después hablaremos más, primero tenemos que ir a buscar a los demás-le dijo Lucy regalandole una sonrisa.

Lucy se levantó y ayudo al pelirosa, los dos pasaron al lado de Zeref que estaba segura Lucy moriría sin remedio gracias a la gran cantidad de sangre que estaba perdiendo.

Los dos caminaron hacia la entrada, Natsu caminaba con la ayuda de Lucy; Zeref miro la espalda de los dos, su sonrisa se torno siniestra al ver que los dos ignoraban totalmente su presencia, su mano se movio lentamente hasta la pistola que tenia a tan solo unos centímetros, sus ojos miraron a la rubia y solo un pensamiento cruzó su mente en ese momento "Si no es mía, ni será fe nadie", apuntó hacia la chica y disparo, Lucy sintió como su tibia sangre salia, sus ojos se abrieron de golpe, Natsu miro con terror como la chica llevaba su mano al estómago y al levantarla había sangre.

-Natsu...-susurro Lucy mientras las lagrimas se agrupaban en sus ojos, miró los pocos pasos que faltaban para terminar de subir y continuó hasta estar arriba para cayó en el suelo.

-Lucy resiste-dijo Natsu viendo como la rubia lloraba y apretaba los puños aguantando el dolor-estaras bien.

-Lo siento Natsu...te dejare solo de nuevo-susurro Lucy.

-No digas tonterías, estarás bien, se que lo estaras-dijo Natsu apretando una de las manos de la rubia-vamos a estar juntos ¿bien?

Lucy sonrió mientras miraba los profundos ojos de Natsu, la tristeza en ellos, pensaba en todo lo que se perdería.

-Busca a una chica que te ame Natsu-susurro Lucy.

-Tu eres la única Lucy-dijo Natsu mientras sus lagrimas caian-tu eres la única que se fijaría en este idiota, eres la única que podrá tener mi corazón en sus manos.

-No...duele Natsu...poco a poco pierdo los sentidos....no...poder estar a tu lado...por mucho...

Lucy se desmayo y Natsu miro el cadáver de si hermano con furia, tenía que salvar a la rubia.