Prologue

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Abrí los ojos de golpe, al hacerlo no reconocí el lugar, cosa que me puso un tanto nerviosa, de la poca visión que tenía trataba de descifrar donde estaba. Sinceramente, la resaca que tenía no ayudaba mucho, además del inquietante dolor abdominal que penetraba cada rincón de mi cuerpo.

Me encontraba recostada boca abajo, donde podía sentir toda la frigidez del blanco concreto. Sin embargo, algo me llamó la atención, saltaron a mí vista unas pequeñas manchas circulares semejantes al color de la sangre, que al parecer provenían de atrás mío, la posición en la que me encontraba dificultaba mi visión del lugar.

Las manchas que había, provocaban curiosidad y un poco de pánico en mí, pues las películas me habían enseñado que ver sangre esparcida sin razón aparente significaba todo menos tranquilidad. Decidí forzar un poco más mi visión de la zona y pude notar la claridad del cielo que daba paso al frío amanecer. Comencé poco a poco a recobrar mis sentidos, y caí en la cuenta de que mis manos estaban cubiertas por un líquido espeso, lo supe por los movimientos que realizaba con los dedos para sentir el contacto con los mismos en la mano izquierda, más no en la mano derecha, pues en esta sentí un objeto ligero.

Me apoyé en el piso, lo suficiente como para terminar arrodillada en él. Y entonces lo vi, un cuchillo de cocina, el cual aún guardaba ese amenazante filo bañado de sangre, al igual que la mano que lo sostenía. Lo solté inmediatamente mirándolo con los ojos bien abiertos. Asustada. Mi corazón latía de manera rápida e incesante, mientras una gota de frío sudor amenazaba con deslizarse sobre mi frente.

Pronto me di cuenta de que no solo mis manos estaban cubiertas de sangre, sino que también la ropa que traía. El pánico se apoderaba de mi y sabía que debía hacer algo, pero todo esto me había dejado en shock.

-¿Qué hice?- susurré mientras jadeada constantemente- ¿Qué es todo esto?- intenté recordar, pero eso solo provocaba que la jaqueca aumentara, de pronto recordé con terror. Una fiesta, eso fue.

Expediente BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora