Capítulo 1: ¿Esto es una broma?

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-Aún sigo sin saber por que estás aquí.- dice el chico mirándome de arriba a abajo.- Ni tampoco por que aún no has caído rendida ante mi belleza.

-Mi novio es más guapo que tú y, ¿es tú historia?- niega con la cabeza.- Pues déjame explicar o te meto mi zapato en la boca.

-Per...

-¡Calla!- algunas personas nos miran.- Como decía...

FLASHBACK DE NUEVO:

Me desperté genial como siempre.

Con el cabello alborotado, mi almohada con saliva, mi manta en el suelo y todo desordenado, como dije yo, me desperté genial.

Aunque había algo diferente.

-¿Ryan?- pregunté. No estaba acostado conmigo.

Giré mi cabeza y vi que estaba en una habitación con tres camas más, en las cuáles una estaba vacía.

-¿¡Dónde estoy!?- grité.

-¡Robert Pattinson no te vayas, bésame!- sollozó una de las chicas, vaya sueño que tiene.

-Déjala, cada noche sueña con un famoso diferente.- miré a la otra chica y sonríe como pude.

Rápidamente me levanté para coger aire.- Riley, tranquila, tus padres nunca harían esto, creo yo, pero seguro que es una broma.

-¿Qué le pasa a esta? ¿Está loca?- preguntó la chica que estaba soñando, era morena de cabello.

-¡Yo no soy la que sueño fantasías con famosos! Por favor, dime que es el día de los inocentes.

-No, no lo es... Si mal no recuerdo.

-Yo no puedo estar aquí, ¡no he hecho nada malo para estar aquí! ¡Dejar a mi hermano con la pierna rota fue un accidente!- vi una carta en la mesita de noche, mientras recordaba cuando le rompí la pierna por saltar encima suyo.

-Oye, que tampoco es una cárcel.- susurró la chica de cabellera muy oscura.

-Pues ya me dirás que es, porque estoy encerrada sin escapatoria alguna. Por cierto... ¿¡Dónde estoy!?- puse mis manos en mi cabeza.

-En un interna...

-¡Qué! No, no, no, no...

Cogí la carta que había en la mesa, esperaba que no fuera de mis padres, o si no, nunca más les hablaba.

-¿Por qué te pones así?- me preguntó la de cabellera oscura.

-Yo no debo estar aquí, juro que me suicido y sin nota, para hacerlo más trágico.- respondí abriendo la carta.

"Hola, Riley, seguro que me recuerdas, la vieja de los gatos, sinceramente no me gustó que me dijeras así, y aún peor como te portaste, así que, he decidido dejarte aquí, en una historia la cuál hasta que no termine, no podrás regresar a tu vida normal. Espero que te pasen cosas malas, soy rencorosa. Besos a sabor gatuno."

-¿Qué es esa carta?- preguntó la de cabello moreno.

-Antes dije que me mataría, ¿sabéis qué? Mejor me muero ya...

Mis ojos se cerraron poco a poco, me estaba desmayando.

(...)

-No se despierta... ¿habrá muerto?

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⏰ Última actualización: Aug 17, 2016 ⏰

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