VIII

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Nunca creí poder amar así a alguien.
Tantos años, tantas noches, tantas lágrimas... He perdido la cuenta de todas las veces que sentí mi corazón desprenderse de su sitio, quedando pequeños pedazos de él regados por mi interior.

Estuve tan concentrada en aprender cómo amarte, que me olvide de amarme a mí

Pero eso ya no importa. Con lágrimas en los ojos, y mi corazón reventando, he decidido olvidarte.

Ya no quiero sentir que no me amas, ya no quiero sentir que aunque intente, nunca lograrás verme como yo te veo.

Egoísta. Esa es la palabra que te define. Ingenua, esa es la palabra que me describe a mí.

A partir de ahora, seré yo la primera persona en estar orgullosa de mi aspecto, de mis logros. Tu opinión no va a ser más que un susurro que se llevará el viento.

Porque he decidido olvidarte, quiero superarme.

Quiero ser, aquella persona que se fue desvaneciendo cuando tú entraste a mi vida.

Pero más que nada, quiero enamorarte. No por mi, quiero que veas la gran mujer en la cual me estoy convirtiendo. Y cuando lo sepas, me iré.

No será un castigo, será una lección de vida que te daré. Una, que te ayudará tanto en la vida, como me ayudaran las que me diste tu, egoístas y desalmadamente.

Para que por fin, de una vez por todas, entiendas que así se llora un corazón roto.

Así se llora un corazón rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora