capítulo 1

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Era una mañana muy helada, en aquella temporada ya se trataba el día en oscurecer, en la tarde el calor era irritante, detrás de esas nubes brillaba el sol radiante

Fernando, recién había llegado y no tenía muchos amigos, así que yo era de los pocos que tenía.
Por la mañana, Fer salía de casa al colegio, en las tardes trabajaba de mesero y el resto de la noche hacia sus tareas, para el esa era una vida normal, a pesar de no tener tiempo para el, creía que su vida era estable.
Mientras estaba en clase de historia el profesor hablo sobre una plática después de clases, Fer sin pensarlo dos veces se decidió ir.
-¿De qué crees que sea la plática?- le pregunté
- no lo sé, pero estoy dispuesto a hacer un espacio en mi agenda, casi nunca nos dan puntos extra.-

- Es verdad, pero ¿Qué hay de tu tiempo libre?, necesitas ya descansar un poco.-
- ¡claro que tengo tiempo para mi!, en la hora del almuerzo pero igual y ¿Para qué tener tiempo para mi? Es un desperdicio de tiempo ¿Y tú no irás?, u ocupadas ese tiempo "para ti"- Dijo en tono burlón.
-Pues igual y tengo que salvar el semestre-le dije.

-uy si te preocupas por mi tiempo pero ¿Qué hay del tuyo? Llevas malas calificaciones, dime ¿Qué hiciste todo el semestre?-me dijo riéndose

-realmente nada, solo planeo cómo será mi vida cuando tenga dinero-

- pues así como vas, tendrás que ir pensando en que basurero dormiras-

-¡Hey, se vale soñar, no me juzgues!-le respondí

-Pero eso también implica trabajar, sino, ¿De que otra forma lograrás lo que planeas?-

-No se, pero ni en sueños quiero un empleo, pero tampoco quiero vivir en un basurero, ni me lo quiero imaginar.-

-Pero no hay necesidad de que lo imagines, simplemente mira tu habitación, será ya algo normal para ti- Dijo burlándose
-ah pero mira quién me habla, el orden de mi cuarto no me afecta, pero ¿Qué me dices de tu vida? ¡Esa si que es un desorden!-

-¡Silencio!- nos gritó el profesor y las miradas apuntaron a nosotros
-a ver, aquella parejita se me separa-
No faltaron las típicas bullas que hacen con objeto de burla.
El le cambió el lugar a Eduardo, el cual tuvo que sentarse al lado mío, y sólo a la persona más intolerante como yo, le toca estar sentada al lado del más inútil de la clase, aquel típico chistosito de la escuela.

-Por favor no empieces con tus payasadas- le dije
-uy si, ya te enojaste porque nadie te puede ganar en eso de de hacer"payasadas", según tu no te llegó ni a los talones, pero tú eres la que no me llega ni a los talones, literalmente, es más, ni al hombro jajaja-

-¡Basta! Odio ese tipo de chistesitos que sólo a ti te
Dan gracia , mi sentido del humor es distinto al tuyo, y mi altura sólo es un problema para gente como tú- dije desesperada

-calmate, sólo era una broma ¡Lo ves! Te lo tomas todo muy a pecho, eres una agua fiestas-

-¡Y tú siempre estás diciendo puras pendeja...
-¡Señorita! Creo que tendrás un castigo- interrumpió el profesor
-Pero el me provocó-
-No me interesa quien comenzó señorita, tendrá que ir a la plática sin obtener puntos, y si falta le quitare uno.-
-Pero...
-Nada, debe aprender a hacerse responsable de sus acciones, ahora vallan a desayunar.-

Salí guardando mis cosas de mala gana dirigiendo aquella mirada perturbadoramente fría hacia Eduardo
-Ya calmate ¿Ya ves como eres un desastre?- me dijo fer.

-sabes que el comenzó y que no puedo callar ante algo que me molesta.-

-eres un desastre, no se cómo logras meterte en problemas.-
-bueno, pero de no ser así, creo que no te hubiera conocido.-

-tal vez , de hecho, deberías agradecerle a Eduardo por que gracias a él nos conocimos al elegirnos en el mismo equipo hace tiempo.-

-¡Mh! Como olvidarlo, llevo al equipo por sorpresa a mi casa cuando estaba enferma y mi casa era un desorden.-

-Si, me di cuenta, o quise decir, nos dimos cuenta.-

-y entonces tu eras bastante tímido con migo, y ahora abres tu bocota hasta para heructar en frente de mi-

-Jajaja, me lo dice la chiquita pero picosa.-

-¡ash ya!, no puedo ocultar casi todo lo que siento-

-¿casi todo?¿Me estás ocultando algo? ¿Por fin declarars tu amor secreto por Eduardo?-

-No menso, mejor callarte que me vas a conocer-

-sabes que soy la única persona que no haz podido dejar callada en una pelea, siempre tengo la última palabra.-

-bueno ya, ayúdame a cerrar mi mochila, se caballeroso.- le respondi ignorando su comentario

-esta bien, ¿Gusta que le cargue la mochila y le traiga un café?-

-Lo de la mochila si, pero de lo otro prefiero que me haga el favor de irse a la mie...

-uy ya, te tomas las cosas muy a pecho últimamente, ya entendí, seré más suave contigo.-

-así está mejor, no querrás que está "simpática" pelea llegue más lejos de lo que esta.-

-No quisiera averiguarlo, hablando enserio hay veces que siento temor de que vayas a matarme por alguna de mis tonterías, pero se que eres muy blanda por dentro y no quiero dañar a alguien ni por dentro.-

-¿Me estás albureando?- le dije tratando de suavisar la conversación.
-bueno hasta aveces yo me doy miedo, pero luego recuerdo la vez que casi te orinas del susto al ver tu reflejo detrás tuyo jajaja, gritaste como mujer-
-bueno ya fue suficiente.-Dijo fer con las mejillas sonrojadas-.

-mira quién es el blando ahora jaja-
Después de eso fuimos de regreso cada quien a nuestros salones mientras yo caminaba con fer burlándome de el.

ExtraviadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora