Trato

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-A ver entonces en un mes debo hacer que alguien se encariñe con migo para que me de su alma, o su vida, y dartela a ti.-

-ya me estas entendiendo-

-¿Y cuando se acabe el mes?-

-Tendras permanentemente cada don que pediste, pero dependiendo las almas que me des, tendras un don más.-

-¿Pero eso no es injusto para los demas?.-

-Al contrario, les haces un favor, porque por cada don que recibas, muchos se benefician, y solo uno se va, asi que vale la pena que uno se vaya mientras muchos otros ganan.-

-¿Y cuanto tiempo va a durar esto?.-

-El tiempo en mi mundo no es el mismo concepto que tu tienes en el tuyo.-

-Pus si ya me di cuenta mira nomas como tienes a todos esos pelones cantando ahi en lo cochino del suelo. Y tu acá bien agusto comodanente.-

-No empieces, sólo te advierto que tienes un determinado tiempo para obtener al menos 3 dones, en un mes deberas tener uno y la mitad de otro, así que tienes 2 meses para entregarme 3 almas.-

-¿Y si no lo hago?-

-me llevo la tuya, pero no pienses en eso, solo piensa en cuanta gente sera beneficiada gracias a tus dones.-

-Es verdad, donde le firmó.-

-Justo aqui.-

-ya quedo, ahora dame mi deceo.-

-Muy bien pequeña tonta, ahora veras lo que es sufrir.-

Pufff

-¿Donde estoy?.-

-¡Aqui estas!.-

-¿Que ha pasado Liz?.-

-Te diste un asoton en la jeta cuando saliste corriendo.-

-¿Y donde estamos?.-

-En camino a mi casa, es de noche, y Ben nos lleva en su coche.-

-¿Donde esta Fer?-

-El quedo enterrado después de aquel terrenoto en la vieja casa.-

-¿QUEE?-

-jajajajajaja, perdon no podia evitarlo, el ya esta en su casa.-

-Ay Desgraciada.-

-Como te pusiste mal hoy te quedaras en mi casa para que te cuide.-

-Ay que linda eres, ahora te llamare mi beffirrius de pocholate ayññ.-

Nos empezamos a reir cuando segun yo empeze a imitar a una de esas niñas que son muy dulces con sus amigas.

-Ay ya callate!, si me han dicho que soy muy linda persona pero tu abusas de mi nobleza.-

-Ay te apuesto que cuando me cai y perdi la conciencia te enpezaste a carcagear y comenzaste a decirme, Ay que pendeja jajaja... y luego me dijiste, ay ya levantate y deja de hacerte la muertita, perra, jajaja... y al ver que no te hacia caso probablemente te preocupaste.-

-Estabas despierta-

-Si lo hubiera estado créeme que con haberme dicho perra te hubiese dado una patada.-

ExtraviadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora