Soonyoung no podía quitar sus pequeños ojitos de Jun y Minghao, con un puchero en su rostro. Porque sí, hoy día era cuando podía perder a su mejor amigo. Soon pensó toda la noche, sobre el beso, sobre Junhui, sobre Minghao, y lo que tal vez sería mejor para el castaño, sin embargo, ¿estaba bien intentar tener algo más con Minghao? ¿estaba bien que no dejara de pensar en aquel chico de nacionalidad china? aunque, sinceramente poco le importaba si estaba bien o mal en estas instancias, Soonyoung quería a Minghao con él.
Vernon ya se había retirado de la sala, junto con otros compañeros más, quedando una cantidad de estudiantes dentro de la sala, mínima, pero había, entre ellos, los dos chinos en que Soonyoung pensaba. "¿qué hago?" se preguntó mientras removía su cabello naranja frustrado, cerrando sus pequeños ojos, que cuando fueron abiertos, vio como ambas personitas que estaban en sus pensamientos, se estaban retirando de la sala, y ahí fue cuando el pecho de Soon dolió. "¿ya son pareja?" y fueron menos de cinco minutos en los que el colorín estaba procesando todo lo ocurrido. "no quiero esto" pensó, y rápidamente tomó su bolso para ir detrás de Minghao.
corriendo, miraba las salas vacías si es que se encontraban en alguna de ellas, sin éxito, seguía corriendo, negándose a la idea de que le quitaran a alguien tan valioso como lo era el castaño para él.
Digamos que Soonyoung no era el mejor deportista, para nada, por lo que rápidamente sus piernas dolieron y su respiración estaba notablemente agitada.
"los casilleros", haciéndole caso a pensamientos, corrió hacia allí, hasta que sus rodillas dolían y maldició ser un sedentario de mierda, mientras apoyaba sus manos en las piernas y trataba de recuperar aire. En ese momento los encontró.
Minghao y Jun hablando.
"es ahora o nunca".
El mayor se acercó donde ambos extranjeros hablaban.
- MingHao, tengo que hablar contigo. - Soonyoung habló en el momento que tocó el hombro del castaño.
- ahora no, Soon, estoy con Jun. - y la mirada del colorín viajó hasta el nombrado, quien sólo lo miraba con desprecio, y eso lo molesto aún más.
- Por favor, es urgente.
- Soonyoung, vete.
- Minghao.
- ándate, Soonyoung. - poco le importó si sus rodillas dolían, soltó un suspiro, y miró nuevamente al peliazul, para fijar su miraba otra vez en el castaño, tomarlo del brazo, y llevarlo con él a la fuerza.
- ¡Soonyoung, suéltame! - el menor exclamaba mientras el mayor lo llevaba agarrado de su mano, y le era inevitable sentir sentimientos extraños.
- ¡Joder, Soonyoung! - y el nombrado seguía haciendo oídos sordos. - ¡Estaba hablando con Jun! suéltame, Joder, quiero ir donde Jun. - El mayor frunció el ceño. - ¡que me dejes ir con Junhui, bastardo!
Soonyoung entró a la sala más cercana vacía, arrastrando a Minghao con él, cerrando la puerta y colocándose al frente de ella, pudiendo por fin soltar al menor y acabar con aquel brusco contacto.
- ¿y qué mierda te pasa a ti? - escupió evidentemente enojado el menor.
- ¿de qué me pasa? me pasa que te la pasas hablando de Jun, ¿puedes dejar hablar de una puta vez de él? - Soonyoung estaba igual o peor de enojado.
-¿es en serio? - MingHao soltó una risa llena de sarcasmo. - déjame ir.
- no, no se me da la gana.
- Poco me importa si se te da o no la gana. - el menor rodó sus ojos y nuevamente intentó salir de la sala, sin embargo, el contrario fue más rápido y lo tomó de un brazo.
- sólo responde algo y te dejaré. - ambos mantenían sus cejas unidas.
- rápido.
- ¿te gusta Junhui? - Soonyoung se acercó a Minghao, acortando la distancia y estando relativamente uno al frente del otro.
- joder, no te importa.
- por algo estoy preguntando, Minghao. - el mayor removió sus cabellos naranjas frustrado, para luego volver a fijar su vista el el menor.
- ¿quien te gusta soy yo? - cuestionó el más bajo, casi en un susurro, escondiendo su rostro en el cuello del menor, sin recibir ninguna respuesta.
- no vayas con Junhui. - la voz quebrada de Soonyoung llegó a los oídos del castaño. - no. - repitió el colorín mientras sentía como su pecho dolía, y lentamente sacó su rostro con unas pequeñas lágrimas, mejillas sonrojadas a no más poder, con lo labios rositas. - me gustas. - soltó antes de acercarse rápidamente a los labios del menor y depositar un pequeño besito en ellos.
ambos fijaron la vista en los ojos del otro, y nuevamente Soonyoung se acercó a los labios del castaño, aunque al principio no fue correspondido, en unos segundos Minghao tomaba por la cintura al mayor.
- dejemos de jugar. - susurró el menor en el momento de separarse, tratando de recuperar la respiración.
- ¡joder, no estoy jugando! - Soonyoung por milésima vez en el día tiró de su cabello.
- ¿no? - y la misma acción repitió el menor. - te digo lo que siento por ti, me rechazas, ¿y ahora te molesta que conozca a alguien más? - rió irónicamente. - ¿está bien rechazar a alguien y luego besarlo cuando supuestamente está durmiendo? - los ojos de Soonyoung abrieron lo que su tamaño le permitía. - no me gustan tus jueguitos, Soonyoung. - mientras Minghao soltaba palabras, caminaba hacia la puerta sin ser detenido por el mayor. - y respondiendo tu pregunta, sí, quien me gusta eres tú. - abrió la puerta y giró su vista al mayor. - sin embargo no me resignaré a sentir algo por Jun.
y la puerta fue cerrada, dejando a Soonyoung solo con sus miles de pensamientos sobre lo que acababa se pasar.
El castaño corrió hacia la salida, deteniendo su carrera en el momento que vio al chico de su misma nacionalidad, y este le sonrió.
- sigues aquí...
- quedamos en irnos juntos, tonto. - Jun tomó su bolso y lo acomodó en su hombro. - ¿estás bien?
- ¿mh? - MingHao subió su vista a los ojos del contrario, y esquivandola rápidamente. - sí.
- entonces no pongas esa cara, te ves feo. - se acercó y con un dedo en la mejilla del castaño levanto su labio fingiendo una sonrisa.
- Junhui. - el rostro de Minghao era serio.
- ¿qué sucede? - cuestionó el nombrado sin dejar de ver el rostro del contrario.
- l-la respuesta.
- ¿sobre? - Junhui miró confuso.
- tu confesión.
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