Después de aquel día, donde perdi cada parte de esperanzas, no quería seguir con el tratamiento, estaba arto de mi vida, de mi vida de muerda que escogi, como odiaba el hecho de conocer a Kim. Siempre fui un hombre que se rendía. Ante las nalgas de una mujer, pero el conocer a Holly me cambió por completo, esa mujer realmente valía la pena, quede agradecido con dios a verla conocido, y a verla despreciado aquella noche, nunca me hubiera perdonado contagiarla.
Me metí a duchar, y abri el agua, sentía como olvidaba todo con cada gota sobre mi, y comencé a llorar como un niño, sollze, y alguien me tomó por la cintura.
-Holly-
-hola Jackson -
La abracé, y lloré mas de lo que lo hacía, suspiraba, siempre con ella demostre quien en verdad era, alguien débil fingiendo ser fuerte.
-tranquilo, Jackson todo estara bien, no te dejare sólo nunca.-
-perdoname por dañarte tanto, por herirte, por lastimarte, por no ser lo que esperaste de mi-
-yo siempre supe como eras no solo fue tu culpa, si no la de ambos -
-no sabes lo arrepentido que estoy de a verme metido con ella, perdi todo Holly todo-
-aun me tienes ami -
-te amo mucho-
-y yo ati Jackson, te amo tanto, que quiero que luchemos con esta enfermedad siempre , no te dejaré lo juro mi amor -
Eso me dió una esperanza, una sola, que hizo latir mi corazón. Si hoy tenía una razón por seguir era HOLLY.
La mire a los ojos, con intención a besarla, y ella respondió, lo sabia era la mejor mujer del mundo.